[Análisis] CupHead + The Delicious Last Course vuelven esta vez en formato físico para Nintendo Switch

CupHead + The Delicious Last Course DEALS

Aprovechando la salida de la edición física de CupHead + su dlc The Delicius Last Course de Meridiem Games, nos hemos animado a realizar un análisis para aquellos que aún no conocen este juego. El juego es muy conocido por mucha gente, pero aunque parece increíble la cantidad de gente que desconoce la existencia de títulos tan emblemáticos como lo es CupHead es bastante elevada.

Para ello debemos remontarnos a septiembre de 2017, donde un estudio indie llamado Studio MDHR sacó CupHead al mercado para Xbox One y Steam. Los hermanos Chad y Jared Moldenhauer que fundaron este estudio en octubre de 2013 en Canadá y se pasaron más de cuatro años trabajando en su ópera prima. Con el paso del tiempo el título fue cosechando premios y más de dos millones de ventas. Esto animó a llevar su título a Nintendo Switch en 2019 y en 2020 a PlayStation 4.

CupHead - Karnaval Konfuso

¿Qué es CupHead?

Para poder explicarlo correctamente debemos hacer una pequeña parada en la historia del juego para dar algo de contexto. Todo comienza en un mágico lugar llamado Inkwell Isle, donde los hermanos Cuphead y Mugman viven junto al sabio Elder Kettle, el anciano tetera.

Un día los hermanos se alejaron demasiado de casa y acabaron en un mal lugar llamado el casino del Diablo. Tras una gran racha de suerte jugando a los dados el mismisimo Diablo que curiosamente es el propietario del casino les invita a subir la apuesta «Ganad una tirada más y toda la fortuna del casino será vuestra, pero si perdeis me quedaré con vuestras almas». Cuphead cegado por la avaricia agarró los dados y los lanzó sin pensar el peligro que corrían.

Como era de esperar, la tirada fue nefasta y un doble uno o más conocido por Ojos de serpiente les ha costado su alma. Tras rogar y suplicar por su vida el Diablo llega a un acuerdo con ellos. Deberán conseguir las almas de toda una lista de deudores del Diablo que se han dado a la fuga. Si los hermanos lo logran les perdonará su deuda. Tan solo tienen hasta el día siguiente al mediodía para lograrlo.

Ante semejante lío, Cuphead y Mugman fueron a ver a Elder Kettle para pedirle consejo. Él les aconseja seguir el juego y que deben prepararse para afrontar todo tipo de encuentros poco amistosos. Elder Kettle les da una poción que les permite disparar al chasquear los dedos y así tengan alguna posibilidad en su cometido.

Una jugabilidad endiablada

CupHead es un juego que brilla en muchos sentidos y la jugabilidad es uno de ellos. El juego es un plataformas 2D de scroll principalmente lateral que cuenta con la premisa base de enfrentarnos directamente con los clásicos jefes de final de fase, algo conocido como Boss Rush. Esto es algo que al principio nos asustaba un poco, pues lo más habitual es que recorramos una fase y tras esto luchar contra el temible jefe. Se hace raro pero nos hemos acostumbrado rápidamente a este formato tan directo y adictivo.

Para enfrentarnos a estos diversos y alocados jefes dispondremos inicialmente de un control sencillo y directo:

Con esta lista de controles a nuestra disposición podremos realizar diversas estrategias. Estos controles están tan bien implementados que van como la seda y sin ningún tipo de input lag que pueda estropear la experiencia. La asignación de los botones por defecto son bastante adecuadas, y se pueden personalizar a nuestro gusto para que se adapte a nuestro estilo.

Tres islas que debemos visitar

El juego tiene tres islas, las que podremos recorrer a medida que avancemos en el juego. Con la intención de no ser demasiado lineal, el juego nos permite en casi todo momento el enfrentarnos a diversas situaciones. Para ello podremos mover a CupHead o a Mugman por las islas con una vista elevada. A medida que superemos las pruebas se irán desbloqueando accesos a otras partes de las islas. A lo largo de las tres islas principales disponemos de tiendas en las que comprar objetos. Una vez comprados, los podremos equipar y usar en los combates. Para poder realizar dichas compras necesitaremos monedas que iremos encontrando escondidas por el mapa o bien en las fases de estilo Run and Gun.

Tres estilos de juego distintos

Las fases de tipo Run and Gun es uno de los dos tipos de juego extra del que dispondremos. Como bien dice su nombre, haremos lo habitual de un clásico de plataformas, recorrer la fase de izquierda a derecha y matando a todo lo que se nos presente. La dificultad de estas fases no llegan al nivel de la de los jefes pero tampoco se quedan cortas.

El otro estilo de juego que nos encontraremos son las fases de vuelo. Este tipo de fase son al más puro estilo de juegos clásicos de naves (Shoot’em-up) como Gradius, Némesis o Parodius. Nos enfrentaremos en combate contra un jefe, pero difiere en que pilotamos una avioneta y los tipos de disparo varían. Además de esto, no dispondremos del movimiento rápido pero a cambio tendremos el poder transformarnos en una versión miniaturizada para poder movernos más rápido y esquivar fácilmente a los enemigos y sus disparos.

Es todo un acierto el haber incluido distintas formas de jugar, aportan frescura sin perder un ápice de la identidad característica del juego.

Una Dificultad alta pero recompensada

Al buen hacer de la jugabilidad, los hermanos Moldenhauer han querido aportar una dificultad acorde a los juegos de 8 y 16 bits, donde los juegos al no ser muy largos debían de suponer un reto y un camino de aprendizaje. Todas las fases sean del estilo que sean cuentan con este camino de aprendizaje bien marcado, pues veremos que nuestro esfuerzo se verá recompensado en forma de progreso de cada nivel. Esto no significa que dominando una fase ya domines el resto, pues los patrones y comportamientos de cada fase están pensados para sorprendernos. Cuando creemos que lo hemos visto todo, nos volverán a sorprender de nuevo provocando que nos eliminen en la partida.

Una dificultad elevada requiere aportar al usuario algo para que la frustración no se apodere de él. Por un lado han añadido un nivel de dificultad fácil para los jugadores que aún se están iniciando. Por otro lado en el nivel normal las pasaremos canutas pero a pesar de eso veremos cómo han añadido el ingrediente secreto que nos hace desear intentarlo una vez más. Da igual qué tipo de jugador seas, el juego siempre encuentra la horma de tu zapato para enseñarte que el camino del aprendizaje está ahí y debes recorrerlo. Importante saber que para poder pasaros el juego, es necesario superar todas las fases en nivel de dificultad normal.

Podemos decir que la satisfacción de superar cada fase es una parte de la recompensa. El juego permite reintentar las fases aún habiéndolas superado, pero no debemos confiarnos, pues aún conociendo bien la fase nos eliminarán muchas más veces de las imaginadas.

El multiplayer local siempre es bienvenido

Aunque el rey del multiplayer es el online en estos días, algo que muchos usuarios echamos de menos y mucho más los que pertenecemos a grupos y asociaciones de videojuegos retro, es el poder jugar en multiplayer local en muchos de los juegos existentes actualmente. Esto es algo que CupHead no ha olvidado y como buen juego basado en los juegos de 8 y 16 bits, nos permite jugar a dobles en casi todos los modos que dispone la consola Nintendo Switch. Tanto en modo televisión con la dock o bien con los Joy-Con desconectados, podremos compartir esta diversión con otro jugador más. Como siempre os decimos, en este tipo de juegos, el poder jugar a dobles cooperativo aumenta mucho la diversión y es muy recomendado.

Gráficos de los años 30 a otro nivel

Los hermanos Chad y Jared Moldenhauer desde niños fueron admiradores de los dibujos animados de los años 30 y 40. Eran tan fans de ellos que siempre que les era posible se hacían con colecciones cintas VHS de la era dorada de Walt Disney Animation y Fleicher Studios, para así poder verlas una y otra vez.

No fue hasta 2010 cuando el comienzo del auge de los estudios indie en la industria del videojuego que los hermanos Moldenhauer tuvieron su tercera oportunidad de crear un juego, y esta vez estaban de acuerdo de que este juego fuese todo un homenaje a ese estilo animado que les marcó en su infancia.

Gracias a este contexto se entiende el porqué CupHead es como es, pero no se marchen todavía, aun hay mas. Además del estilo, la forma de crearlo también es parte de la identidad de CupHead. Para que el estilo mantuviese toda su fuerza, decidieron que todas las animaciones fuesen creadas a mano, tal como se hacía en aquellos tiempos y con las mismas técnicas. Tal fue fue semejante locura que tienen el Record Guinness en ser el videojuego con más fotogramas de todos los tiempos, la cifra de más de 45.000 nos deja el cuerpo frío del gran trabajo que hay detrás de este juego.

Con este gran esfuerzo, este estudio indie ha logrado algo muy épico, darnos un juego con un estilo gráfico hermoso, bien animado y que desprende magia. Hasta tal punto es su encanto que en ocasiones perderemos vidas por quedarnos embobados al apreciar lo bien hecho que está. La cantidad de premios obtenidos por ello son la guinda a este hermoso pastel. Annie Awards, The Game Awards Winner – 2017, Dice 21 Annual Awards, Game Developers Choice Awards,Gaming Awards SXSW 2018 y The Webby Awards, todos ellos alabando este magnífico trabajo.

Música con un ritmo frenético

Lo grande de CupHead es que todas las partes que forman este juego han sido tratadas con un respeto y amor incondicional. Por lo tanto la música y los efectos no iban a ser menos. Compuesta por Kristofer Maddigan y grabada en vivo en estudio, hace que la banda sonora de más de dos horas y media de duración entre todas las piezas musicales sean una delicia para nuestros oídos. La banda sonora de CupHead ha conseguido varios premios a lo largo de su vida: BAFTA Winners Games, DICE 21″ Annual Awards, Even Better than I Expected (Steam).

Sabían que la música debía tener la misma atención a los detalles que el estilo gráfico, y para ello han investigado distintos estilos musicales hasta dar con el más adecuado, así garantizar que la música y los gráficos estuviesen en armonía. Toda la banda sonora acompaña al juego correctamente, marcando el ritmo, aportando emociones. En definitiva se podría decir que enriquece todo el conjunto del juego.

Kristofer Maddigan reconoce que su gran inspiración fue el gran compositor y excepcional pianista Duke Ellington (1899-1974), es fácil comprobar que las canciones de CupHead beben directamente de él, para los que aún no conocíamos a Duke Ellington y hemos escuchado antes la OST de CupHead, al escuchar a Duke nos vendrá el sacrílego y al mismo tiempo halagador pensamiento de, esta es parte de la banda sonora de CupHead.

Los efectos de sonido aportan una percusión extra a la banda sonora. Se nota desde el inicio que no han escatimado esfuerzos ni presupuesto en ellos. Son discretos, adecuados y van acordes con todo. No cansan ni hasta los más repetitivos, son muy variados pues cada acción, personaje y situación tiene sus propios efectos.

The Delicous Last Course

Los componentes de Studio MDHR aprendieron la lección en los últimos meses de la entrega de CupHead en 2017. Pasaron por un verdadero infierno de horas para poder entregar en la fecha que se habían comprometido. Esto les marcó muchísimo y todo el equipo acordó que de continuar sería sin plazos marcados que les volviese a poner en tal crítica situación de estrés. Por eso el DLC de The Delicius Last Coruse ha tardado tanto en llegar, pero al fin en verano de 2022 ya estaba disponible para los amantes y fans del juego.

Aunque a simple vista parezca una expansión muy continuista, a medida que jugamos nos daremos cuenta que la magia de CupHead es que cada fase es algo fresco inclusive en su contenido original, de esta forma vemos que ser continuista en este caso no es ningún problema. Aún así esta expansión nos trae las siguientes novedades:

Para poder acceder a él es importante saber que no se accede desde el menú del juego. El equipo de Studio MDHR ha pensado en una forma mucho mejor y más integrada. Para poder acceder deberéis pasar cualquiera de los mausoleos existentes en las islas y al pasarlo veremos como el personaje del barquero nos invitará a llevarnos a la nueva isla.

Una edición física de coleccionista

Durante mucho tiempo CupHead tan solo estaba disponible en edición digital. Por suerte para todos nosotros, Meridiem Games nos trae por fin la edición física de CupHead, una edición que por suerte es más que una caja y un cartucho:

Sin duda una buena excusa para volver a comprar el juego, o bien para los nuevos jugadores poder acceder a todo el contenido actual de CupHead de una sola tacada y con material físico extra.

Conclusiones

La vuelta de CupHead puede que no sea una gran novedad para los que ya lo hemos disfrutado en su momento, pero es un juego que bien merece que tengamos en su edición física y mucho más con esta edición. Para los que gracias a este artículo acabáis de conocer este gran juego, no debemos perder la oportunidad de haceros con él, es todo un tesoro audio visual y jugable que disfrutaremos (y por momentos odiaremos) cada segundo de el.

The Review

CupHead + The Delicious Last Course

9.3 Score

CupHead + The Deliciuous Last Course vuelven esta vez en una edición física especial gracias a Meridiem Games.

PROS

  • Unos gráficos que te harán perder vidas por quedarte admirándolos
  • Nada como jugar con una música con un ritmo trepidante
  • Una jugabilidad endiabladamente divertida

CONS

  • Que no tengamos noticias de un nuevo DLC en camino

Review Breakdown

  • Apartado Técnico 10
  • Jugabilidad 9
  • Historia 9
  • Duración 9

CupHead + The Delicious Last Course DEALS

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