[Análisis] Two Point Campus. La gestión universitaria más gamberra

Two Point Studios, de la mano de SEGA, vuelve a la carga con Two Point Campus, su nuevo juego de gestión. Con todo lo que han aprendido de Two Point Hospital, su anterior título, el estudio nos trae una más que interesante propuesta para cualquier nivel de jugador, desde principiantes a veteranos. El humor, la libertad de acción en buena parte del juego y la inmensa cantidad de opciones de gestión van a ser su seña de identidad.

Hemos podido realizar este análisis gracias a un código facilitado por SEGA.

Empezamos por abajo y vamos escalando

Es posible que los jugadores más veteranos vean el inicio de Two Point Campus como algo pausado, pero era necesario para los jugadores más noveles. El juego mantiene la fórmula de ir contando nuestra historia, la de un gestor, que es contratado por diversas universidades. Un campus de pueblo, después una ciudad pequeña, una más grande… el jugador va a ir prosperando de manera paulatina.

En cuanto consigue la primera estrella, un nuevo mapa se abrirá y podrá emplear todo lo aprendido en la siguiente, donde se enfrentará a nuevos retos. Esta es la fórmula principal de Two Point Campus, muy amable con los nuevos jugadores pero que, al menos al principio, puede ser demasiado pausada para los veteranos. Sin embargo, una vez pasamos las primeras partidas donde nos enseñarán a crear aulas, zonas de recreo, dormitorios, baños, contratar profesores y demás, después comienza la ansiada libertad.

Es cierto que el título siempre se va a centrar en cumplir unos objetivos impuestos, pero cada vez lo haremos con más libertad creativa. Aquí es donde Two Point Campus brilla con luz propia y nos permitirá gestionar a nuestro antojo las universidades, pudiendo llevarlas a la excelencia (o a la ruina, que también puede ser el caso).

¿Alguien ha dicho fiesta?

Two Point Campus bebe directamente de las mecánicas que pudimos ver en Two Point Hospital, pero trasladadas a las universidades. Sin embargo, el estudio no se ha querido quedar ahí y ha puesto ciertos añadidos que harán las delicias de los jugadores. Comenzando por su variedad en aulas, tendremos al principio pocas cosas, como robótica o cocina, pero a medida que avancemos desbloquearemos cosas tan divertidas y extrañas como justas de caballería, realidad virtual o espías.

Para llevarlo todo lo mejor posible, tendremos a nuestra disposición empleados como profesores que impartan clases, bibliotecarios, bedeles, profesores para clases de refuerzo… Son muchas cosas en las que vamos a tener que fijarnos, ya que no solo de matrículas viven las universidades. El curso académico se divide por años, y una vez que estemos en el segundo también lo serán nuestros alumnos con nuevas necesidades y clases.

Además, cada vez que acabemos un curso llegarán las vacaciones, momento en el que el tiempo no correrá y tendremos oportunidad de adaptar la universidad al nuevo curso. Una vez que empieza, todo serán carreras, programación de actividades… En esto último el juego hace un magnífico trabajo y es que otra cosa que tendremos que vigilar es la moral de nuestros estudiantes. Una fiesta a tiempo siempre levanta el ánimo así que nada como celebrar el Magosto para que sean más receptivos y estudien mejor.

También habrá eventos aleatorios que nos pedirán ciertos requisitos, como por ejemplo las visitas de futuros estudiantes o los inspectores que comprobarán que todo está como debería. No faltarán además los detalles de humor en absolutamente todos los rincones, incluso con las peticiones de los estudiantes que buscarán también el amor por todas las esquinas.

Gestionar hermandades, obligar a los malos estudiantes que vayan a clases de refuerzo, o incluso expulsarlos si no mejoran… son muchas las actividades que podemos realizar. La gestión de una universidad no es fácil, pero sí muy divertida. Mención especial para los anuncios de los altavoces que siempre nos arrancarán una sonrisa y que incluso tienen guiños a Two Point Hospital.

Mismos gráficos, mejores animaciones

Es más que evidente que Two Point Studios ha reciclado bastante su motor gráfico de su anterior juego para este. No hay prácticamente diferencias y es que… ¿Para qué cambiar algo que funciona muy bien? Es por esto que en Two Point Campus no vamos a ver demasiadas diferencias con su anterior título. Se han reciclado muchos objetos, además de añadir las necesidades evidentes, luciendo igual de bien. Donde sí hemos encontrado mejores es en sus animaciones, que están bastante más pulidas.

El apartado sonoro tampoco tiene demasiados cambios. Sonidos divertidos, una banda sonora pegadiza y una megafonía que estará soltando coñas todo el rato son sus señas de identidad. Por desgracia lo harán siempre en inglés, por lo que si no dominamos demasiado el idioma, nos perderemos buenos chistes y referencias.

Conclusiones de Two Point Campus

Se podría hacer un resumen fácil en el que, si te gustó Two Point Hospital, este también te gustará. Sin embargo sería quedarse corto. Two Point Campus tiene más situaciones locas, más humor, más detalles, mejores animaciones, más contenido de base… y mucho más que ofrecer, siendo además más amable con los jugadores noveles.

No está exento de fallos y no todo es perfecto, especialmente para los más veteranos que verán cómo el inicio es demasiado lento. En determinados momentos poco más podremos hacer que ver pasar el tiempo para que acabe el curso y comience uno nuevo, pero una vez ganamos libertad de acción, será mucho más divertido.