Death Road to Canada. Análisis Nintendo Switch

Death Road to Canda

Tras su estreno en PC, los chicos de Rocketcat Games se han animado a llevar su viaje por unos Estados Unidos repletos de zombis a las consolas. Death Road to Canada aterriza en Nintendo Switch, además de PS4 y Xbox One, creando una buena sinergia debido a que la consola de Nintendo nos permite cortar la partida en cualquier momento rápidamente. Analizamos al detalle esta versión portátil del juego de Rocketcat Games y Ukiyo Publishing.

De paseo por Estados Unidos

Nuestra aventura arranca en la soleada Florida, aunque en este momento no es precisamente un paraíso. Death Road to Canada arranca con un grupo de personajes en coche huyendo de un importante número de zombis que ocupan todas las calles. Tras superar un breve tutorial, en el que aprenderemos lo movimientos básicos que necesitaremos para movernos por los diferentes escenarios y aprovechar cada hueco de ellos, comenzará nuestra aventura.

El funcionamiento que sigue Death Road to Canada es bastante sencillo. Se muestra en pantalla el coche en el que viajan nuestros personajes cuando de repente nos aparece un mensaje en pantalla, para avisarnos de que algo ha sucedido. Tras conocer los hechos que nos rodean tendremos que tomar una decisión sobre qué hacer a continuación. La decisión que tomemos es de vital importancia ya que determinará el nuevo escenario en el que entraremos en acción. Quizá acabemos en una zona desierta en la que podamos llenar nuestro inventario de objetos útiles o quizá lo hagamos en un pueblo repleto de enemigos con los que tendremos que acabar.

Esta mecánica, aunque entretenida, es uno de los grandes problemas que nos deja Death Road to Canada. A pesar de lo inclusivo que es el hecho de tomar decisiones que afectan a la historia no tardamos en darnos cuenta de que la mayoría de los niveles tienen muy poca profundidad y nos harán dedicarnos casi exclusivamente a apalear enemigos una y otra vez.

Además de objetos y nuevas armas, cada una de nuestras paradas puede finalizar con nuevos personajes acompañándonos en nuestro viaje, ya sean personas extrañas o animales rescatados. Con este equipo que irá cambiando de personajes afrontamos la misión de atravesar los Estados Unidos hasta alcanzar la ciudad canadiense de Ontario.

A pesar de que cada partida es diferente debido a las decisiones que tomemos en cada encrucijada en la que el juego nos pone, es un lastre demasiado grande la sensación de repetición que sentimos desde prácticamente la primera hora jugando.

A golpes y balazos

Para lograr superar la frontera entre los Estados Unidos y Canadá tendremos que abrirnos paso matando a muchos zombies. Para liquidar a estos enemigos tenemos básicamente dos opciones. En primera instancia únicamente tendremos a nuestro alcance la potencia de nuestros puños y los objetos que podamos ir recogiendo como pueden ser bates e incluso los propios huesos de algunos enemigos.

Cuando nuestro grupo de acompañantes crece tendremos compañeros que nos ayudarán en cada una de las misiones a las que nos enfrentemos. Estos compañeros en algunas ocasiones llevarán armas de fuego y pueden ser muy eficientes a la hora de esparcir los sesos de los muertos vivientes por todo el escenario.

Si optamos, aunque gran parte del tiempo no tendremos más opción, por el combate cuerpo a cuerpo tendremos que tener en cuenta el cansancio de nuestro protagonista. Death Road to Canada aplica esta estadística que apenas aporta nada al juego y que a la vez ralentiza un poco la acción de golpear a los enemigos. Si pulsamos repetidas veces el botón de acción veremos cómo nuestro personaje se fatiga y tendremos que esperar unos segundos para volver a actuar.

En cuanto al apartado técnico del juego poco hay que destacar. El aspecto 8 bits de Death Road to Canada permite que el juego luzca de manera correcta sin precisar de demasiadas florituras en cuanto a las animaciones. Podríamos decir que la ejecución es correcta ya que no le encontramos problemas que merezcan ser nombrados, pero tampoco le encontramos detalles merecedores de ensalzar. Por su parte, en lo referido al sonido recuperamos lo comentado con el tema de las misiones. Los temas se repiten rápidamente lo que no hace más que aumentar la sensación de monotonía.

Conclusiones de Death Road to Canada

Death Road to Canada nos presenta una interesante propuesta que por la falta de variedad termina aburriendo demasiado rápido. Puede ser una buena opción para partidas cortas, pero tiene pocos aspectos que nos inciten a quedarnos pegados a la pantalla.

Una finalización poco más que correcta en el aspecto técnico no hace más que ahondar en los problemas mencionados anteriormente, lo que empeora al encontrarnos con todos los textos únicamente en inglés.

Política sobre notas en Game It.

Salir de la versión móvil