Pocas son las ocasiones en las que vemos algo así, y la verdad es que a todos los aficionados nos alegra esta nueva propuesta iniciada en Italia por una fuerza política cuyo fin es nada menos que promover el desarrollo de videojuegos.
Il Popolo Della Libertà, el partido de Berlusconi, tiene como objetivo proporcionar apoyo sobre todo fiscal a las empresas creadoras y distribuidoras de videojuegos, y beneficiar con ayudas capitales a aquellos que inviertan en la industria italiana del videojuego.
La Associazione Editori Software Videoludico Italiana, AESVI(similar a aDeSe en nuestro país), se muestra muy competente ante esta propuesta, y su secretaria Thalita Malagò opina que:
«Esta propuesta de ley presentada por el PdL ante el gobierno italiano representa un paso histórico para el desarrollo de la industria del videojuego en Italia. Si se aprueba contribuirá a convertir a Italia en un buen país para el negocio del entretenimiento interactivo, desde las start ups a los grandes estudios».
Además, la secretaria piensa que invertir en nuestro mundillo tiene como significado «invertir en los jóvenes, en la creatividad, en innovación y en crecimiento económico»
Junto a ella, gran parte de los empleados de AESVI se han puesto muy a favor de esta propuesta que situaría a Italia entre los países que ya han obtenido beneficio gracias a nuestra industria como Canadá o Reino Unido.
Mientras, en España, nadie nunca se ha preocupado por dar ningún tipo de apoyo ni económico ni social a la industria, que sigue sin ser considerada cultura. Una industria que podría ayudar muchísimo en nuestra situación actual si recibiera ayudas. Un sector que ayudaría en parte a salir de la crisis actual y por el que no se ha invertido aún ni un duro. Señores, ¿no va siendo hora de darle una oportunidad a una cultura que ya está dando beneficios a varios países?
Un aplauso para Italia, que ha iniciado una propuesta legislativa que, de seguir adelante y aprobarse, podrá dar un impulso bestial a la industria y el país italiano se sumaría a los que ya han puesto sus esperanzas en este, nuestro mundillo.