Machenike K500, unboxing y review

Estamos de enhorabuena y os traemos el Machenike K500, un teclado mecánico con unas características de escandalo y que nos llega por menos de 70€ para ofrecernos una base interesante si queremos entrar en el mundo de los teclados custom. Hot swap, iluminación RGB y una conexión USB tipo C son su principal carta de presentación. Quedaos porque vamos a enseñaros todo lo que nos tiene que ofrecer este pequeño juguete.

Antes de comenzar, queremos dar las gracias a Machenike por cedernos el material para su análisis.

Especificaciones técnicas

Vamos a ver que información nos aporta el fabricante acerca de este Machenike K500.

Como podemos observar estamos ante un teclado cableado con 84 o 94 teclas en función de si lo queremos en formato ANSI o ISO, en este caso el modelo que analizamos es formato ISO ES por lo que tendremos 94 teclas. Como punto destacado tenemos la conexión hot swap de los pulsadores Outemu (en el modelo analizado es Outemu red) y con la iluminación RGB vamos a poder tener el modo «audio visualizer» que adapta la iluminación a la música que estemos escuchando.

Unboxing

La presentación del Machenike K500 es muy sencilla, pues es uno de los puntos donde han podido ahorrar costes y ofrecernos así mejores características donde realmente importa. En color negro y con toques morados solo nos encontramos con el modelo en la parte frontal y en la parte trasera un gráfico del teclado junto con dos códigos QR. Una vez abierto solo nos encontraremos el teclado, el cable de conexión y las herramientas de extracción de teclas y pulsadores.

Machenike K500

Comenzamos a ver este teclado que nos llega con un precio muy agresivo y que trae características que nos encontramos en aparatos que superan los 100€. Que sea un producto chino no tiene que echaros para atrás, ya que os adelanto que se ha convertido en mi teclado para el trabajo dado que su formato, sonido y experiencia de uso se adapta perfectamente a mis gustos. A primera vista su formato 90% hace que podamos disfrutar de un teclado completo ahorrando espacio en el escritorio y haciendo que visualmente quede más estético.

Su diseño es bastante colorido, buena prueba de ello son los tres colores que nos encontramos en este modelo y que además añade la marca y el modelo en la parte inferior para darle un toque más profesional al teclado. Nos permite regular su altura gracias a dos patas traseras que permiten el efecto grada y que con gomas antideslizantes nos habilita a elevar el teclado y así poder escribir más cómodos. Hubiera sido una autentica locura que nos incluyera un reposamuñecas acorde a la temática, pero ya es mucho pedir a un precio muy ajustado.

Disponible en tres switches (blue, red y brown) con la capacidad de hacer hot swap nos da la entrada a la posibilidad de personalizar nuestro Machenike K500 haciendo que sea el teclado que nosotros buscamos sin tener que dejarnos una barbaridad en el. El poder cambiar los pulsadores siendo compatible la placa con los habituales dos pines hace que podamos poner por ejemplo, pulsadores cherry o panda y dar un salto muy palpable en el tacto a la hora de escribir.

Sus teclas PBT con un diseño tricolor y con una preciosa Ñ (nótese que me cuesta encontrar keycaps de este tipo) nos da una variante de color que personalmente creo que le sienta muy bien con esas dos teclas en color verde pastel que rompe notablemente sobre el blanco y el gris del resto de keypcaps. En cuanto al tacto, tenemos un switch linear que nos da una pulsación rápida ideal para el gaming que se remata con un sonido ligeramente «amarmolado» que tanto nos gusta a los que nos pica el gusanillo de los teclados.

Al ser un teclado en formato completo, tenemos a nuestra disposición todo lo necesario para poder trabajar sin echar de menos ninguna tecla aunque esta reducción de espacio nos obliga a tener que hacer uso del clásico menú FN para controlar todo o acceder a teclas habituales como puede ser suprimir o inicio / fin pero que por su contraparte han podido implementar todo el teclado numérico que hace que sea muy cómodo si tenemos que usar el teclado para productividad y necesitamos acceder a los números de manera rápida. Con este menú FN vamos a poder ampliar las capacidades del Machenike K500 y podremos también controlar todo el apartado multimedia para que no echemos en falta un teclado de formato completo con teclas dedicadas.

En cuanto a la iluminación el Machinike K500 tiene una completísima iluminación RGB que vamos a poder controlar de dos maneras, mediante el software propio de la marca o con las propias teclas. Tendremos la posibilidad de guardar perfiles pues tiene memoria integrada que también sirve para crear las macros al tener el sistema de anti-ghosting que detecta todas las pulsaciones haciendo que podamos tener nuestras acciones en solo una tecla y facilitando nuestras acciones al jugar.

Finalmente para la conexión se ha optado por un cable USB tipo C que conecta al teclado por un lateral y que hace una L haciendo que el cable estorbe lo menos posible a la hora de usarlo y que podamos quitarlo para transportarlo a cualquier lugar.

Conclusiones y experiencia de uso

La verdad que mi cara de sorpresa al tenerlo en mis manos contrasta con su buen hacer a la hora de utilizarlo en el día a día tanto para jugar como para trabajar, siendo esto ultimo para lo que más he podido usarlo. Es sorprendente que, basándome en su precio, la única queja que le pueda sacar es que un par de teclas me han llegado con la serigrafia torcida (ya que no son teclas grabadas con láser) porque su rendimiento ha sido muy bueno. Si quereis probar un teclado mecánico con hot swap y comenzar a coquetear con el mundo de los custom este es la mejor opción para hacerlo (hablando que quieras una distribución ISO ES) bajo mi punto de vista y es por eso que desde Game It le otorgamos los galardones de Prestaciones, Diseño, Producto Recomendado y Calidad / Precio al Machenike K500.