OLLIOLLI. ANÁLISIS PC

OlliOlli es un juego de plataformas indie desarrollado por Roll7 y General Arcade. Lanzado anteriormente en PSVita, este juego de skate llegó por fin a PC, Mac OS y Linux, siendo lanzado posteriormente para PS4 en una fecha todavía sin concretar.

Este videojuego nos presenta 50 niveles en los que, montados en un skate, tendremos que llegar a la meta, realizando por el camino diferentes saltos y grinds (subirse a un bordillo o a una barandilla y deslizarse sobre ella con un skate) para desbloquear el siguiente nivel.

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Los niveles están divididos en 5 mundos (Urbano, Chatarra, Puerto, Base y Neón, este último, algo sospechosamente parecido al Tokio de Cars 2) en los cuales tendremos acceso a 5 niveles 1 a uno. Cuando completamos un nivel en el modo de juego inicial, Carrera, desbloqueamos Spots, una versión más pequeña y difícil de Carrera en la que tendremos que conseguir la máxima puntuación posible. También, si al completar cada carrera cumplimos los objetivos secundarios, se desbloqueará el modo Pro de dicho nivel, aumentando (como bien indica su nombre) su dificultad. Todo esto resulta en una amplia propuesta, pero por desgracia basada en la rejugabilidad de los niveles, lo que rechaza a muchos jugadores.

A todo gas

El manejo de nuestro personaje resulta complicado en un principio, a pesar de manejarse únicamente con el stick izquierdo del pad (que es necesario para jugar), los gatillos y el botón “A”. Mediante la combinación de estos controles, “grindaremos”, haremos giros en el aire y demás viguerías propias del manejo del skate, que quedan bastante bien en pantalla a pesar de ser 2D. Hay que señalar que, a no ser que queramos terminar el juego al 100% con la máxima puntuación, acabaremos utilizando las combinaciones de teclas más sencillas, pues la velocidad del personaje requiere mucha precisión a la hora de realizar los movimientos y no deja tiempo para los combos más complicados. A pesar de esto, las carreras son frenéticas y divertidas, manteniéndonos atentos durante todo su recorrido, pues un solo error nos hará repetirlas.

A medida que avanzamos los niveles, vamos adquiriendo habilidad y la jugabilidad resulta más sencilla, al menos hasta que llegamos a al mundo «Base», en el que la dificultad se incrementa de manera desproporcionada a los niveles anteriores. El juego resulta bastante divertido y adictivo, siendo en los momentos más complicados poco frustrante, a pesar de que podemos estar repitiendo el mismo nivel 30 veces.

El progreso del jugador se mide con un multijugador en el que únicamente comparamos nuestras puntuaciones con las de nuestros amigos de Steam y otros jugadores del resto del mundo. Se echa de menos algún elemento de personalización para nuestro skater, como ropas, gorros u otros skates.

Técnicamente nos encontramos con un juego sencillo, no presume de grandes gráficos (los requisitos recomendados son bastante bajos) y en general, sin ausencia de bugs, aunque hay uno muy importante que impide ver el juego (nos encontramos ante una pantalla en negro) aunque se soluciona desactivando la interfaz de Steam en las opciones del juego.

¿Minijuego?

La interfaz es minimalista, con una bonita estética y la combinación entre grises, blanco y amarillos. El sonido no desentona con la imagen, aunque tampoco es el más apropiado para un juego de Steam (recuerda a la música de los menús de los PES antiguos). Gráficamente, nos encontramos ante un juego que aspira a lo retro, pero se queda estancado en la estética de un minijuego. Esto, unido a la variedad de niveles y a los tiempos de juego que ofrece (no es un juego para echarse horas, sino para jugar unos 10 minutos sin nada que hacer), hace que nos encontramos ante un juego que brillaría como minijuego de una página web, pero que se ofrece al público por el sobrevalorado precio de 10’99 €.

Conclusión

OlliOlli supone un buen juego de plataformas para pasar el rato, aunque no para dedicarse seriamente a completarlo. Sus bajos requisitos de sistema y sus cortas partidas atraerán a más de uno, pero su precio y la necesidad de un pad probablemente alejen a muchos de este juego, más característico de páginas como Miniclip que de una plataforma como Steam.

Lo mejor

-Frenéticas carreras cortas

-Diversión para rato

-Pocos requisitos del sistema

-Un juego, en general, bastante adictivo

Lo peor

-Precio desmesurado a lo que ofrece

-Una gran variedad de niveles, pero solo accesibles mediante una rejugabilidad exhaustiva

-La necesidad de un mando.

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