Ozone Blast 4HX, review y análisis en vídeo

No ha pasado ni una semana desde que analizamos el Ozone Blast OceloteWorld 7.1, headset de Ozone en el que el jugador profesional de la LVP Ocelote aportó su granito de arena, y hoy volvemos con una versión stándard de ese mismo headset. A priori puede parecer el mismo headset con diferentes colores, aunque analizándolo a fondo encontraremos alguna que otra diferencia más. Estamos hablando del Ozone Blast 4HX.

Como siempre y antes de iniciar el análisis exhaustivo del periférico os dejamos con una toma de contacto en forma de vídeo con este unboxing y análisis.

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Características técnicas

En este aspecto poco hay que destacar si lo comparamos con el Ozone Blast OceloteWorld 7.1, seguimos contando con dos altavoces de 44mm. Dichos altavoces tienen una impedancia de 50 ohmios y una frecuencia de respuesta de 20 Hz – 20 KHz. Destacamos, al igual que hicimos con la versión de Ocelote, la alta impedancia de los altavoces (la media de mercado en el mundo gaming es de 32 ohmios) y esto lo notaremos bastante en la definición de sonido ofrecida por el headset. En lo referente a la frecuencia de respuesta la encontramos algo limitada, aunque el sonido ofrecido por el headset se puede calificar de sobresaliente. En esta ocasión no tenemos la opción de simular el sonido envolvente ni contamos con un software dedicado para controlar los diferentes efectos y configuraciones de sonido, algo que sí que echamos en falta tras probar el Ozone Blast OceloteWorld 7.1.

En multitud de ocasiones hemos hablado de las ventajas y desventajas de las dos variantes de micrófonos que podemos encontrar en el mercado (unidireccionales y omnidireccionales). En el caso del Ozone Blast 4HX encontramos un micrófono omnidireccional, lo cual puede plantear serias dudas ya que éstos pueden pecar de captar ruidos de fondo. Muchos fabricantes intentan eliminar dicho ruido de fondo bajando la sensibilidad del micrófono, algo que afecta directamente a la calidad del audio de éste. En el caso de Ozone Blast 4HX se ha implementado un filtro de sonido más que eficiente, obteniendo una grabación notable. La calidad de la grabación podéis verificarla en el vídeo del inicio del post, ya que el audio ha sido grabado íntegramente usando este headset.

En el micrófono encontramos la primera gran diferencia con el Ozone Blast OceloteWorld 7.1, y es que éste no se mutea al plegarse ni cuenta con dos colores en el led de estado del micrófono, siendo éste de color rojo sea cual sea su estado de funcionamiento.

Otra diferencia que encontramos con respecto a la versión Ocelote de éste headset es que el Ozone Blast 4HX es multiplataforma, siendo compatible con PS3, PS4, PC y Xbox 360, mientras que la versión de Ocelote sólo es compatible con PS4 y PC.

Diseño

En esta ocasión el color rojo es el que acompaña al acabado rubber exterior del headset, también encontramos acabados en piel sintética para la diadema y la cara interna de los audífonos y la llamativa franja cromada del exterior de éstos. Se echa en falta el engarce en aluminio de la diadema que le daba un toque agresivo al Ozone Blast OceloteWorld 7.1, aunque hay que reconocer que en negro no queda nada mal. Volvemos a reseñar que el recubrimiento en piel sintética del interior de los audífonos ofrece un aislamiento acústico que, normalmente, es superior al de la tela (encontramos casos como el del Astro A40 en los que se ofrece un aislamiento acústico excepcional gracias a la combinación de otros factores) aunque suele dar algo más de calor en sesiones largas de uso.

Este aislamiento acústico se ve reforzado gracias al diseño circumaural del audífono (envuelve la oreja en vez de descansar sobre ella) y al cabezal basculante del audífono, que hará que éste se adapte a la perfección a la forma de nuestra cara. Los audífonos son hergonómicos o, lo que es lo mismo, tienen la forma de nuestra oreja. Esto ayuda a reducir su tamaño y, por tanto, el de todo el conjunto. Este tamaño se puede ver más reducido aún gracias al diseño plegable de éste, lo que nos permitirá guardarlo o transportarlo con mayor facilidad.

La estructura interna del headset es de aluminio, algo que hará que el headset sea bastante robusto y liviano (345 g) aunque algo más pesado que su versión Ocelote (306 g), suponemos que este aumento de peso se debe a la utilización de otro material para el engarce de la diadema (en la versión Ocelote es de aluminio). Aún así sigue siendo un headset liviano y que podremos utilizar durante horas sin notar fatiga, en lo referente al ajuste de la diadema no es libre sino que utiliza el clásico sistema de puntos para fijar el anclaje de ésta.

La iluminación de esta versión del Ozone Blast es en color rojo, tanto en los audífonos como el led del micrófono, ofreciendo un contraste con el negro del diseño exterior del headset bastante atractivo. Con respecto a la intensidad de ésta podéis verla con más detalle en el vídeo del inicio del análisis.

Control y cableado

Al igual que en el Ozone Blast OceloteWorld 7.1, encontramos un cableado con terminación en goma y con conectores sin baño de oro. En esta ocasión encontramos un conector USB 2.0 y un jack de audio. Además se incluyen adaptadores RCA y Jacks de 3,5 mm que harán que el headset sea totalmente compatible con las consolas PS3, PS4 y Xbox 360. Con respecto a los esquemas de conexión del producto para cada plataforma se pueden encontrar en la web oficial del producto.

El controlador es otra de las pequeñas cosas que distinguen al Ozone Blast 4HX de su versión Ocelote, y es que nos encontramos con un controlador integrado mucho más completo que el que pudimos ver en la versión de Ocelote. En esta ocasión sí que encontramos un led de estado que cambiará de color al mutear el micrófono. Además de ésto tendremos dos controles de volumen, uno para el audio del juego y otro para el chat de voz (obviamente esto es útil para las consolas ya que en PC contamos con el mezclador de audio del S.O.).

Conclusiones

En este análisis hemos tenido sensaciones enfrentadas, sobre todo porque acabamos de analizar la versión Ocelote de este mismo headset y las comparaciones pueden resultar (o no) odiosas. Dejando estas a un lado, encontramos un headset con un sonido sobresaliente gracias, en parte, a la impedancia de sus altavoces. En lo que a grabación se refiere encontramos un micrófono que ofrecerá una calidad de grabación notable. Además el conjunto es bastante liviano y sumamente cómodo, pudiendo hacer uso de él durante horas sin notar fatiga alguna. Sus audífonos ofrecen un aislamiento acústico notable y el controlador cumple a la perfección con su cometido.

Si lo comparamos con la versión Ocelote echamos en falta el software dedicado que ofrece multitudes de opciones de configuración y el sonido envolvente simulado y que el micrófono se mutee al plegarlo, aunque agradecemos el led de estado del controlador y que sea compatible con un mayor número de plataformas.

Por tanto, y ante todo lo anteriormente expuesto otorgamos el galardón de oro de Game It a este Ozone Blast 4HX.

Como siempre recordaros que podéis encontrar este headset en la web de Versusgamers por un precio de 69,90€. Y estar atentos estos días que habrá una pequeña sorpresa sobre los mismos.

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