Razer Sabertooth. Análisis

Recientemente hemos hablado de ratones, teclados, headset y alfombrillas (sí, alfombrillas) de Razer pero nunca habíamos tenido la oportunidad de catar un mando de la marca. El Razer Sabertooth ha sido el elegido.

Con licencia de Xbox 360 este mando mejora el de Xbox 360 añadiéndole seis botones extra totalmente programables, además podremos guardar esta configuración en tres perfiles distintos. La marca ofrece una confianza única, sabemos que en el diseño de todos sus productos (o casi todos) pondrán la máxima atención posible no defraudándonos.

Como con todos los periféricos me gusta poner al principio las características del mismo. Antes de eso, en este análisis me gustaría anunciar el sorteo del mismo. Habrá que estar atento a la web porque los Reyes Magos van a pasar por Game It y dejarán algo para ti. Para más información visita el post correspondiente.

Ahora sí, aquí las características:

Ficha técnica

Requisitos del sistema

(Xbox 360/PC)

(PC)

Presentación

Como todo en Razer la presentación es impresionante. La habitual caja de la marca con la foto del producto en la parte delantera y sus características en la trasera esconde en su interior un estuche negro con un toque verde y las instrucciones del mando. El estuche es lo suficientemente rígido como para asegurarnos que nuestro mando estará sano y salvo independientemente de cómo haya sido tratado de camino a nuestra casa.

Dentro del estuche encontramos ya el ansiado mando en una parte y los cables en otra. El periférico es negro con algunos detalles verdes y el logo de Xbox en el centro, como cualquier mando de Microsoft. Además, en un lateral tiene el logo de Razer, marcado con líneas algo más oscuras. A modo de resumen podríamos decir que cuenta con un diseño elegante, sencillo y no muy llamativo, algo que sin duda agradeceremos.

El mando

Razer puede presumir de que uno de sus productos, el mando Razer Onza, fuera vetado temporalmente en la MLG (Major League Gaming) por ser considerado un dispositivo que otorgaba demasiadas ventajas a los jugadores. El Razer Sabertooth es la evolución de éste.

Al coger el mando lo primero que nos llama la atención es lo bien que se adapta a nuestras manos y la comodidad que transmite. Uno de los miedos que se puede tener a la hora de hacernos con el periférico es si los seis botones de la parte trasera del mando y los dos que están bajo éste serían un problema a la hora de usarlo. Éste no es el caso.

Aunque no lo parezca, los dos botones oscilantes de debajo del mando son uno de los mayores aciertos del periférico. Situados en una posición inmejorable su uso será muy intuitivo y rápido.

Hablando ahora de los botones sobre el mando (X, Y, B y A), éstos están algo duros y son una incógnita constante, es decir, no sabremos si lo hemos pulsado o no hasta que veamos la acción reflejada en la pantalla. No ofrece la seguridad que puede ofrecer otro mando, aunque acostumbrarse a ello no será un problema.

Una de las características que más llaman la atención respecto a su predecesor es la inclusión de una pantalla OLED inteligente con la que podremos regular la retroiluminación, cambiar el modo o elegir perfil.

Conclusión

El Razer Sabertooth es un mando en el que puedes confiar. Su estuche resistente hará que podamos transportarlo fácilmente y sin ningún miedo a que sufra daños (tanto el cable como el periférico) permitiéndonos así llevarlo a torneos.

En sus seis botones extra podremos programar las acciones que queramos. Éstos, al contrario de lo que pueda parecer, no será un inconveniente a la hora de estar cómodos con el mando.

[Vía Razer]

Os recordamos que tendremos un sorteo del mismo, tan solo tendréis que estar pendientes a la web estos días, ¡Suerte!

Salir de la versión móvil