RetroAnálisis en EsLaÚltima.com: Sonic the Hedgehog

Tal como informabamos  ayer y aprovechando la mayoría de edad del erizo de Sega, en EsLaÚltima vamos a  dedicarle un pequeño homenaje a modo de Retroanálisis de lo que fué en su día su primera aparición en público para la grandiosa Megadrive, lo que aportó en aquel momento y lo que queda de aquel legado, con todos vosotros: Sonic The Hedgehog.

Corría el año 1991 cuando un servidor se quedó «boquiabierto» al ver por primera vez ( en casa de mi tío, con su flamante Megadrive ) aquel erizo pasar fases como si de un Mario se tratara pero con la diferéncia de que este lo hacía «a toda leche» saltando y brincando, pasando por tubos y haciendo loopings como una bala. La verdad, me quedé flipado, desde aquel día lo tuve claro, tenía que vender mi alma al diablo para  hacerme con una Megadrive y un cartucho de aquella maravilla, imaginaos, teniendo una NES y una Master System cualquiera pedía «otra» consola en aquella época, y  con 12 años, supongo que me pondría muy pesado, pero al final lo conseguí.

Un Digno rival para Mario

Una vez que conseguí jugar a Sonic se me pasó la resaca de Super Mario Bros 3 enseguida, a medida que pasabán las semanas veía como ocupaba las portadas de todos los medios especializados de la época, sobretodo en revistas. Estaba claro, a Mario, icono indiscutible de Nintendo, le había salido un digno rival.

Decir cual fué el secreto sería difícil, ¿su velocidad? ¿porque era azul? vete tu a saber, el caso es que este típo de juegos, como yo los llamo «atemporales», son muy pocos, pero los hay ( Punch Out, Mario World, SF II…), son esos que por mucho que pase el tiempo los vuelves a jugar y disfrutas como el primer día, esos de los que sin tener que llevar la etiqueta famosa de «casuals» pueden gustar a mayores, niños y hasta extraterrestres, por lo que sea no la necesitán, son esos que aparece uno o dos por generación y esta más claro que el agua de que Sonic es uno de esos privilegiados.

¿De que va?

Umm, viendo la pantalla de arriba no puedo pensar en otra cosa que no sea en hacer el famoso truco para elegir fase: Arriba, abajo, izquierda, derecha, dejamos apretado A y seguidamente le damos a Start, vaya tela…

Pués  Sonic the Hedgehog no se haría famoso por su eleborado guión, no, aunque los plataformas de la época no solían plantearnos eso para nada, solo diversión directa, todo era muy onírico, imaginaos un mundo totalmente inventado donde los animales de este han sido idiotizados robotizados por un peculiar villano, el  Dr. Robotnik, un híbrido entre Dr Infierno de cachondeo y Dr Willy, de la saga Mega Man, todos ellos tienen algo en común.., su locura por los ingénios robóticos ( a ver que pensabáis ).

Para liberar a los animalitos de este mundo tendremos que pasar fases llenas de plataformas,  animales robot y todo típo de trampas y saltos imposibles donde Sonic ¿ un erizo ?,  armado de su increíble velocidad y su ataque giratório tendrá que arreglárselas para liberar a los comentados animales. Lo dicho, aquello era tan normal como jugar con un fontanero ¿ porque italiano? en un mundo de setas intentando liberar a su novia ¿ una princesa ? de ¿ un dinosaurio ? Juegos perfectos para un rato de diversión sin complicaciones, nada que ver con los elaborados guiones de los juegos de hoy en día.

Gráficos

Para la época, impresionantes, tendríamos que destacar sus decorados llenos de color y sus pinceladas 3D con sus palmeras, el efecto de las anillas que vamos cogiendo y demás detalles muy trabajados. La fluidez con la que se mueve el erizo es escandalosa y llega a coger buenas velocidades con todo y los años que han pasado.  Los enemigos  son curiosones, animales robotizados, cada fase con sus cuatro o cinco variantes de animal robot. Dichas pantallas son totalmente diferentes y muy cuidadas, desde la famosa «Green Hill Zone» repleta de hierba verde y mogollón de loopings, pasando por la «Marble Zone» y su liloso y frío decorado repleto de lava,  sus zonas acuáticas, la bonita «Star Light Zone», una ciudad nocturna,  hasta la fortaleza de hierro y su «Srap Brain Zone», todas ellas ya decimos, muy trabajadas y pese a solamente ser cinco, no se nos queda corta la cifra.

La verdad es que lo más grandioso de todo es que hoy en día se puede jugar a la perfección y los gráficos no nos parecerán jurásicos, si os fijáis hasta quedán resultones, ahí esta el ejemplo de su «atemporalidad»

Sonido y efectos

¿Quién no se sabe hoy en día la musiquita de las fases de Sonic? Si hay una palabra para definir las melodías no es «pegadizas», es que no se pueden definir, es el colmo de lo pegadizo.  Cada una de las cinco fases tiene su melodía y queda friki decirlo pero es que las musiquitas de las fases están seleccionadas a la perfección, pegan totalmente con la naturaleza de la pantalla, es algo difícil de explicar pero los que han jugado seguro que saben a lo que me refiero. La melodía de Robotnik como enemigo final también esta muy bien seleccionada, quedando en ciertos momentos muy épica como Final Battle.

Los samplers de los sonidos no son muchos pero como en todo lo relacionado con este título, son de una calidad brutal, desde el curioso sonido del salto que nos seguirá durante todo el juego cientos de veces, pasando por otros como el gracioso hálito de Sonic para coger oxígeno debajo del agua, hasta el curioso «-waaang-« de cuando nos colocamos el escudo, explosiones y demás correctas.

Jugabilidad

Si, si, esa es la palabra. Y nos ponen consolas con mandos de 35 botones, dos analógicos, gatillos.., que si patada baja que si agacharse que si «disparar mientras corres», ¿pero que follones son esos? Posupuesto que eran otros tiempos, pero curiosamente en aquella época la Megadrive era la consola con más botones ( no había salido la Super Nes aún ), tenía tres más el start y para cachondeo de todos   ( sobretodo de los creadores del erizo ), en Sonic nos sobrán dos botones, es decir, tan solo necesitamos uno, ¡¡ un botón para pasarlo bomba!!, yo a eso lo llamo jugabilidad endiablada.

El juego consta de cinco fases, cada una dividida en tres, dos que hay que pasar y una con el enemigo final que toque, siempre Robotnik con alguno de sus peculiares inventos. Una vez superadas hay una secreta que es el enemigo final otra vez Robotnik con su artefacto final. La verdad que el juego del tirón podía durar una buena tarde, no son 25 horas de juego pero la magia del tema es que una vez te lo pasas repites para unas 500 horas de juego…

conclusión

No sabemos con exactitud donde ni cuando perdió el rumbo «Sonic team», pero lo que esta claro es  que lo que  están haciendo ahora con Sonic Unleashed o Sonic y el Caballero Negro y demás títulos confusos dista mucho y esta a años luz de lo que una vez fué un título capaz de «revolucionar» un género ( plataformas ), como en su día lo hizo SF II por ejemplo en el de la lucha. Juegos capaces de hacer que después les sigan o les imiten infinidad de títulos posteriores y sean un icono dentro de esos géneros consoleros. Este primer Sonic daría pié a dos entregas más, para muchos la tercera fué la más completa,  después seguiría con la franquícia una y otra vez con altibajos y finalmente terminaría estrellándose definitivamente hasta lo que es hoy en día, una caricatura de lo que fué. No obstante, Sonic también refleja a la perfección el espíritu que siémpre ha reflejado Sega, capaces de hacer lo mejor, pero también expertos en cagarla liarla también como el mejor, por eso me encanta.

Así que, «siémpre nos quedarán los Sonics originales» para hacer decenas, centenares y miles de partidas con una propuesta muy directa, facilona, simple,  lo que queráis, pero capaz de enganchar desde el mas «hardcoreta» hasta el más «casualón» de los consoleros, ¿este «Sonic uno»?, una joya «atemporal».

Lo mejor

– Originalidad, revolucionó el género plataformero.

– Acabado técnico de lujo para la época, melodías, gráficos…

– Jugabilidad, de lo más bestia de la historia de las consolas, con un solo botón.., increíble…

Lo malo:

Por decir algo.., faltaría algo de variedad de acciones, puzles, enemigos más poderosos que otros.., pero claro, con un botón.., ¿ que más le podemos pedir ?

– La mala racha por la que pasa la saga, para meterlos a la cárcel a todos los del «Sonic Team» este.

Retropuntuación: 9 ( rozando el diez, los que veáis mis análisis podréis observar que soy muy ráncio para los dieces)

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