Rezrog es un juego de estrategia con estilo de tablero, donde bajo nuestra dirección tenemos un grupo de guerreros, magos y ladrones, quienes por cosas de la vida terminan unidos. Estos aventureros se enfrascan en un viaje en post de traer de nuevo la paz en las Tierras de Rezrog, puesto que un grupo llamado Magos Malvados y unos monstruos horribles han descendido a las profundidades de la tierra para cosechar el poder de unas gemas que allí se encuentran.
El comienzo de todo
Tras encontrarse en el camino (vaya coincidencia), nuestros siete héroes se forman en equipo para defenderse de un grupo de atacantes. Tras esa pelea -y el encuentro generado por el libre albedrío del destino, cansados de la batalla, caminan hasta llegar a una taberna para pasar la noche, en busca de descanso y comida, pero la taberna está desolada, todos desaparecieron, y la incógnita de lo que pudo haber pasado está en el aire.
Al día siguiente al despertar, todo sigue igual, nadie regresa ni aparece en la taberna, y así pues, juntos deciden averiguar qué pasó, dando comienzo a nuestra aventura entre calabozos de cartón, figuritas de tablero y liberando rehenes de las criaturas que han venido a aterrorizar en Rezrog desde las profundidades de la tierra. A todo esto, decir que podemos nombrar a nuestros guerreros de la manera que queramos, ¡punto extra a favor!
Tras las escenas que nos explican el meollo de la trama, vemos a los personajes reunidos alrededor de una mesa, en ella está el mapa del mundo del juego, este sirve para acceder a los distintos calabozos en los cuales tenemos la misión de rescatar a todas las personas que fueron tomadas por los malvados seres que aterrorizan Rezrog.
A lo largo de los calabozos toparemos con escenarios generados proceduralmente, cada uno está divido por secciones, las secciones se van agregando al abrir puertas al final de cada sección del escenario, asegurando niveles distintos en cada partida o incluso, cada vez que visitemos un nivel previamente finalizado. Los monstruos varían encontrando desde magos, criaturas voladoras, esqueletos asesinos, ratas apestosas hasta orugas lanza-ácido, entre otras (con alrededor de 115 enemigos distintos). Después de vencer al jefe final de cada calabozo obtenemos una llave que sirve para liberar a los personajes capturados.
Al finalizar una mazmorra, el personaje utilizado en ese nivel conservará para sí mismo el loot recogido a lo largo de la partida, llámese armas, pócimas, gemas; lo bueno es que este botín puede ser intercambiado desde el baúl compartido, donde podemos cambiar objetos entre personajes para sacar el mayor provecho de lo que obtengamos al finalizar cada nivel.
De entrada en cada calabozo, se juega una ruleta de varios modificadores que afectan la partida, desde oscurecer por completo el nivel, otorgar un movimiento extra, incrementar el oro que encontramos, mayor porcentaje de experiencia recibida, en fin, muchos que hacen las partidas diferentes cada vez, más fáciles o más complicadas.
Una de las mecánicas más divertidas/dolorosas es que si uno de nuestros miembros es vencido en algún nivel del juego, será capturado, y no podremos seguir utilizándolo hasta que volvamos a ese mismo nivel con otro de nuestros héroes a rescatarle. Si por alguna de esas desgracias de la vida llegásemos a perder a todo nuestro grupo, la partida acaba.
Habilidades de personajes
Nuestros personajes poseen 5 habilidades distintas: fuerza, intelecto, agilidad, resistencia (vitalidad) y suerte. Cada vez que subimos el nivel a una de estas, los valores como la defensa, daño, evasión, y resistencia a las distintas magias varían y suben sus números.
Existe un libro de habilidades especiales que podemos usar con los personajes, en estas encontramos la especialidad de contraataque, trampa de oso, carga, golpe doble, entre otras, que agregan un toque llamativo a las batallas (claro, tampoco es que descubrieron el agua tibia). Junto al mapa, se encuentra la Forja de Legados, este instrumento mágico nos permite utilizar gemas y oro de las mazmorras para crear puntos de estadísticas de legado a nuestros personajes, dichos puntos no se pierden y se adhieren a cualquier nueva partida que comencemos.
Además, en la taberna encontramos un yunque, que sirve para reparar el equipo dañado después de cada calabozo, de momento, reparar artículos no parece tan costoso, en relación a las monedas que obtuvimos en los primeros calabozos del juego. Y por si fuera poco, tenemos al famosísimo, nunca bien ponderado, personaje comerciante para vender y comprar cosas a según nuestro placer -y billetera.
El estilo visual en Rezrog es uno de sus distintivos, los personajes y ambientes tienen un estilo artístico de cartón, como si se tratase de un juego de tablero. Los personajes de Rezrog recuerdan al juego de mesa La Herencia de la Tía Hagata, de figuritas de cartón en bases de plástico para moverlos por todo el tablero; en general, las animaciones, e incluso algunos sonidos, vienen siendo de un juego de tablero.
La melodía en su banda sonora es buena, no impresiona, pero está a la altura del producto en general, sin aburrirte pero sin salir del compás al que baila el juego en su jugabilidad.
Cosas a mejorar
No me gusta el no poder mover la cámara libremente, la visión se queda siempre sobre el personaje, y aunque se puede ver bastante alrededor, es de mi gusto poder moverme con libertad por todo el nivel, algunas veces perdemos a los enemigos de vista debido al mal sistema de cámaras. Algunos tiempos de carga parecen muy largos, sobre todo el de la pantalla inicial.
La IA de los personajes enemigos puede mejorarse, hubo un momento en particular donde eliminé a una rata solo con moverme de lado a lado en cierto cuarto de un calabozo, me explico: En el centro de la sala había dos casillas ocupadas, una por una palanca y la otra por una fogata, al lado de ambas, hay una alcantarilla de la cual emana un humo que cuando pasas sobre él, te baja puntos de vida. Entonces mi técnica (después de notar la torpeza de la IA) consistió en moverme hacia arriba y hacia abajo en cada turno para hacer que el pobre ratón pisara la alcantarilla y perdiera puntos de vida, en este punto, no sé todavía si soy un maestro estratega o un noob que se aprovecha del bug salvaje en una IA sumamente incompetente para encontrar vías lógicas de tránsito en el nivel. Acepto que recurrí a esta técnica porque mi personaje tenía poco menos de 5 puntos de vida, y cualquier roce, me hubiese hecho perderle ( que por cierto, igual terminé perdiendo ese calabozo).
Hubo un detalle que me hizo sufrir pérdidas en mis guerreros, aunque esto podría haber sido que pequé de inocente y poco avispado, pues en el segundo nivel, me aventuré con un nuevo guerrero, sin recordar que no había obtenido nivel suficiente para enfrentar a los enemigos de ese nivel. Además, por si no bastara con un nivel insuficiente, olvidé equipar a mi hermosa arquera con un arco (eso no te lo explican, o al menos no te lo recuerdan al principio, el hecho de tener que equipar a los personajes antes de cada partida), y cuando pisé el calabozo, los puños no alcanzaron para darle muerte a la rata malvada. Para acabar de hacerla, no encontré alguna de mis amigas alcantarillas, y acabé perdiendo a mi arquera, y ahora me toca rescatarla.
Conclusión Rezrog
Con 100 niveles de calabozos, 10 distintos ambientes, 7 diferentes personajes, escenarios que no se repiten, decenas de enemigos diferentes, y hasta 60 habilidades distintas, Rezrog propone un juego entretenido, variado y nunca monótono. Su historia no es la mejor, pero el poco enfoque narrativo se compensa con el resto de sus componentes roleros y de calabozos, cambiantes y dinámicos, llenos de sorpresas, estéticas diferentes y agradables a la vista.
Un juego recomendado, aunque con cosas para corregir como el pathfinding de la IA enemiga y un tiempo de carga inicial sumamente largo. Rezrog ya está disponible en Steam, y promete un buen producto casual para el disfrute de los aficionados al RPG y por qué no, a los amantes de los juegos de mesa también.
https://www.youtube.com/watch?v=9CNqVMw1N9o