Continuamos con nuestra sección de hardware analizando el último smartwatch de Samsung, el Galaxy Watch 3, un accesorio que mantiene todas las bondades de sus predecesores y opta por un look más clásico. Y es que servidor lleva ya tres generaciones de smartwatches Samsung en sus espaldas y, la verdad, me cuesta muchísimo cambiar de marca en este sentido (y he probado de todo, a excepción de Apple) por lo que no he podido resistir la tentación e hincarle el diente al nuevo smartwatch de la compañía.
Antes de comenzar, agradecemos a Samsung el préstamo del Galaxy Watch 3 para su review
Especificaciones técnicas
Comenzamos la review dando un pequeño repaso a sus especificaciones técnicas con la tabla extraída de la web del fabricante
El Galaxy Watch 3 vuelve a los orígenes
Tras salirse de su tradicional línea en el Galaxy Watch Active Samsung ha vuelto a implementar un look más clásico y volver a implementar el bisel giratorio, que ha sido seña de identidad en todos sus smartwatches, en este Galaxy Watch 3. No obstante no se ha desechado todo lo aprendido con el Watch Active y mantenemos algunas funciones en este nuevo modelo. La corona del bisel es totalmente lisa en su zona frontal contando con un minutero en la zona interior y un estriado en la exterior para asegurar un buen agarre. El deslizamiento es, como de costumbre, sumamente suave y preciso para poder navegar por los menús del reloj con total suavidad y soltura. También encontramos dos botones laterales con un diseño más clásico y un comportamiento exquisito.
Volvemos a encontrar una caja algo más abultada y pesada (46.2 x 45.0 x 11.1 mm y un peso de 53.8 g) aunque, siendo honestos, te acostumbras en cuestión de un momento y llegas a olvidar que lo llevas. La correa en esta ocasión deja la goma o silicona para optar por la piel sintética, más acorde con su look sobrio que permite que llevemos el reloj en las ocasiones más sobrias y disfrutar de sus prestaciones en cualquier momento. Por último, tanto la caja como la pantalla cuentan con un tratamiento antihuellas bastante eficaz y que me convence más que la del Galaxy Watch, siendo un buen upgrade a nivel estético.
Una pantalla generosa y con un funcionamiento exquisito
La pantalla del Galaxy Watch 3 cuenta, como hemos mostrado en la tabla, con un panel Super AMOLED de 1.4″ (34.5mm), resolución 360 x 360 píxeles y 16M de colores. El panel ofrece un rendimiento excepcional tanto en fidelidad como en visualización en las peores circunstancias, gozando de un ajuste del brillo excepcional y una respuesta táctil perfecta. Por si todo esto fuera poco, se activa sin error alguno al levantar la muñeca y cuenta, como ya es tradicional en los Galaxy Watch, con un bloqueo para evitar que detecte el agua como pulsaciones táctiles.
Y ya que mencionamos el líquido elemento, el smartwatch es totalmente sumergible y podremos utilzarlo para nadar sin problema alguno, también es bastante robusto y cuenta con certificación IP68.
En lo referente a personalización, la store de Samsung cuenta con una generosa cantidad de watchfaces para personalizar el reloj, implementado algunas nuevas para este modelo y manteniendo las clásicas así como apps de personalización que incrementarán exponencialmente el número de wathcfaces. En lo referente a apps la cosa merma bastante con respecto a WearOs aunque, siendo honestos, hay más que de sobra para cubrir cualquier necesidad.
Un smartwatch sobrio con uso deportivo
La estética del Galaxy Watch 3 lleva a engaños, lo confieso, y es que tras ver el look sobrio y formal del reloj no llegas a pensar la cantidad de usos deportivos que puede tener. Comenzamos por los sensores típicos como GPS para tus rutas en el exterior, medición de ritmo cardíaco y el cada vez más famoso oxímetro. En el apartado de actividad física encontramos una ingente cantidad de modos de entrenamiento para calcular tus calorías quemadas y vigilar de cerca tu rendimiento deportivo aunque, la verdad, no he visto ninguno enfocado al entrenamiento de fuerza (las pesas de toda la vida) centrándose en uno específico para máquinas de fuerza.
El seguimiento del GPS es bastante preciso y cuentas con un entrenador de running que te ayudará a mantener un ritmo adecuado a tu nivel, algo que viene muy bien a los que no hacen cardio nunca y pretenden iniciarse en este deporte (algunos nos quedamos con ejercicios de fuerza para no perder masa muscular, pero ese es otro tema), un detalle si optamos por utilizar este smartwatch como regalo navideño e incitar a un ser querido a que comience una vida más sana. Además, y siguiendo en esta línea, podremos almacenar música para que ésta amenice nuestros entrenamientos y reproducirla en unos auriculares bluetooth sin tener que cargar con el móvil.
Autonomía, el gran lastre de los smartwatches más completos
El Galaxy Watch 3, al igual que todos los Galaxy Watch que le han precedido, cuenta con una gran variedad de funciones entre las que encontramos los usos deportivos, visualizar y contestar las notificaciones y mensajes de las apps de mensajería, apps, visualización de el tiempo atmosférico en tiempo real (creo que hasta da la hora)… Todo esto con un tamaño relativamente compacto, un panel Super AMOLED y una pequeñísima batería. Obviamente, la autonomía del reloj no puede ser la de un reloj tradicional aunque ha mejorado bastante respecto a los anteriores.
Y es que, actualmente, mi Galaxy Watch me ofrece una autonomía de unos dos días aproximadamente apagándolo por la noche. En cambio, con este Galaxy Watch 3 he decidido probar a fondo la app de control del sueño y he decidido mantenerlo encendido y puesto las 24 h del día, consiguiendo sacarle 72 horas de uso ininterrumpido sin usar el reloj para reproducir música o entrenar (solo para pasar de pista el spotify del móvil en el Gym). Destacar que durante la noche puedes activar un modo denominado «buenas noches» que inactiva la activación de pantalla al levantarla, mediante el bisel y respuesta táctil pudiendo activarse solo al pulsar un botón. Y ya que lo mencionamos, la app del sueño es bastante buena.
Experiencia de uso del Samsung Galaxy Watch 3
Voy a intentar profundizar todo lo posible para que aquellos que no han tenido nunca un Galaxy Watch se hagan a la idea de la experiencia que ofrece este smartwatch. El uso del reloj pasa por la instalación de una app en nuestro terminal, desde la que podremos ajustar qué apps nos muestran notificaciones, gestionar todos los ajustes, descargar apps y watchfaces, sincronizar nuestros datos, etc. La app es bastante simple e intuitiva por lo que no me voy a parar mucho en ella, solo decir que la primera configuración no tarda más de 5 minutos.
Una vez emparejado el reloj con el terminal podremos navegar por los distintos widgets con tan solo girar el bisel o deslizar la pantalla, siendo muy fácil de dominar y pudiendo personalizar cualquier detalle para acceder rápidamente a las funciones que más usamos. Una vez personalizado el reloj y pasada esa fase de estar cacharreando todo el día sus funciones se integran en nuestra rutina diaria y, la verdad, cuesta hacerse a la vida sin uno de estos.
En lo referente a la experiencia de este modelo en particular, nos ha encantado el cambio de estética puesto que hace que el reloj encaje en cualquier situación o look, incluso los más formales. La experiencia de uso propiamente dicha es sublime, con un funcionamiento bastante fluido y gran variedad de opciones para adaptarlo a tu día a día (tanto para tu actividad deportiva como para productividad). Algo que estoy seguro me váis a preguntar, la opción de medir el oxígeno en sangre, no puedo aseverar si es precisa o no puesto que, como la gran mayoría, no dispongo de un oxímetro clínico para contrastar los resultados.
En lo referente al precio, podéis encontrarlo por 391€ (45mm) en Amazon.
Por todo esto, otorgamos los galardones de Diseño, Producto Premium, Producto Recomendado y Calidad Precio de Game It al Samsung Galaxy Watch 3
