Skiller SGM1. Análisis y unboxing de este ratón gaming

Seguimos en Game It trayéndoos análisis de interesantes dispositivos y en esta ocasión vamos a hablar de una marca no tan conocida en España como se merece, Sharkoon, que nos trae su gama gaming llamada Skiller y, más concretamente, un ratón de lo más interesante, el SGM1. Como siempre queremos empezar agradeciendo a la marca que nos hayan permitido probar su dispositivo.

Características principales

Como es habitual en nuestros artículos, vamos a dejar que sea la propia marca quien nos cuente las principales funciones del SGM1.

Como podemos ver estamos ante un ratón gaming con un sensor óptico PixArt PMW3336 con unos DPIs máximos de 10.800 repartidos entre distintos pasos que podremos cambiar mediante dos botones situados debajo de la rueda (10.800, 8.200, 5.200, 3.600, 2.400, 1.600 y 800) los cuales podremos configurar a nuestro gusto con el software dedicado que Sharkoon pone a nuestra disposición.

Con una tasa de muestreo de hasta 1.000 hz, los cuales también podremos cambiar con su software en tres pasos, tenemos un ratón con un peso de unos 130 gr. (sin cable), y unas dimensiones no demasiado grandes, lo cual lo hace bastante fácil de manejar. A nuestra disposición tendremos hasta 12 botones, con los famosos interruptores Omron en los dos principales, lo que nos asegura una buena vida de uso. La rueda destaca por su extenso uso, ya que tendremos tres botones en ella (pulsación y uno a cada lado) así como subir y bajar como viene siendo habitual.

A nuestra disposición tendremos un sistema de iluminación RGB que podremos configurar desde el software, pudiendo escoger entre iluminación fija, respiración y ciclar entre los distintos colores. En los laterales encontramos 5 botones para macro iluminados en blanco así como un LED que nos marca el tipo de DPI que tenemos activado con un pequeño sistema de cuenta.

Por último tenemos un cable de nylon mallado con una longitud de 1,8 metros acabado en un USB chapado en oro.

 

Unboxing

El Skiller SGM1 nos viene en un empaquetado que empieza a ser habitual en esta clase de dispositivos, con una caja donde predomina el negro y en la que podemos ver un dibujo reflectante del dispositivo que tenemos en la mano. Por la parte trasera nos encontramos, en distintos idiomas, sus principales características, mientras que por el lado derecho podemos leer todas sus especificaciones al completo en inglés.

Como si de un libro se tratara, podemos abrir la parte frontal y dejar al descubierto el SGM1, el cual podemos ver a través de una ventana plástica. A su izquierda vemos otro dibujo más del ratón, donde nos destacan el cableado, los botones de DPI, la rueda con tres botones, los leds RGB con el logo de Skiller y el sistema de pesas interno.

Por último, al abrir la caja, podemos ya sacar todo de la caja y ver que incluye una cómoda bolsita de viaje, un pequeño CD con el software y el manual de usuario y un repuesto para los almohadillas antideslizantes posteriores.

SGM1

Una vez tenemos todo fuera de la caja podemos comenzar a probar y disfrutar de este dispositivo de Sharkoon.

SGM1

Si por algo nos ha sorprendido Sharkoon con su Skiller SGM1 es con las buenas características que ha lanzado este ratón gaming por una compañía que hasta hace poco no conocíamos demasiado a pesar de estar trabajando desde el 2003. Con la estadísticas en la mano vemos que nos ofrece todo lo que un gamer puede necesitar, desde un buen sensor como es el PixArt PMW3336 de hasta 10.800 DPI, 12 teclas totalmente programables, una iluminación RGB, un software que nos permitirá configurarlo todavía más… Pero no todo son estadísticas sino que lo que importa es cómo se siente en nuestras manos.

Desde el principio nos puede parecer un ratón un poco pesado para su tamaño, ya que no tiene unas dimensiones muy grandes lo que lo convierten en un dispositivo muy manejable, esto se debe a que cuenta con un juego de seis pesas ya integradas que podemos quitar a nuestro antojo. Con 4 gr. cada una podremos jugar con su peso hasta encontrar el que más se adapte a nuestras necesidades.

El sistema para cambiar las DPI al instante también es de lo más cómodo y es que no necesitaremos volver a darle la vuelta al contador para ajustarlo para ese momento en el que necesitamos más rapidez de movimiento o menos, con los dos botones configurados para subir y bajar por los distintos escalones podremos manejarnos rápidamente. Además, gracias al software podremos cambiarlo como queramos, destinando botones a poner una cantidad concreta, eliminando pasos intermedios en la escala…

Otra característica interesante reside en la rueda del ratón y es que no estaremos ante un simple botón y un deslizamiento que sirva para subir y bajar las ventanas o cambiar el arma. Si movemos los dedos hacia los lados podremos pulsar dos botones más, lo que hace que lleguemos a una nada despreciable cantidad de 12 botones en el SGM1, ninguno de ellos abarrotándolo y haciendo que lo pulsemos sin querer.

De lo único que nos queda por hablar antes de pasar a su software es del diseño, donde sí que podemos desgranar algún que otro detalle no tan positivo. Si bien es cierto que ergonómicamente es muy cómodo, deslizándose con suavidad y sin tener botones incómodos que se pulsan con facilidad, donde más se ha ahorrado ha sido en los materiales de construcción, escogiendo el PVC como principal. Hay que tener en cuenta que estamos con un ratón de unas capacidades de lo más interesantes a un precio aproximado de 45€, por lo que no se les puede reprochar nada.

Por último hablar de su conexión y es que tenemos a nuestra disposición un cable mallado en nylon de 1,80 metros, acabado en un conector USB chapado en oro que nos permitirá sacar el mayor rendimiento a la frecuencia de muestreo de 1.000 Hz.

Pruebas

Como decíamos antes, todo lo que os podamos decir sobre sus estadísticas quedan muy bien en el papel, pero hasta que no lo probamos no podemos saber si realmente estamos hablando de un ratón de calidad. Por ellos os mostramos a continuación los resultados que han arrojado nuestro Mouse Test.

Como podemos ver en las pruebas, el Skiller SGM1 cumple a la perfección con todas las tareas, consiguiendo las estadísticas que nos aporta el fabricante sin dificultad alguna, lo que nos habla muy bien de los componentes internos. Todas estas estadísticas pueden variar en función de las opciones que escojamos en la configuración del software, como puede ser la resolución o la frecuencia de muestreo.

Software

Hoy en día que a un dispositivo gamer no le acompañe un software comienza a darnos la sensación de que nos falta algo. Sharkoon también ha pensado en esto y ha puesto a nuestra disposición un programa para poder extender un poco más la configuración de nuestro SGM1. Os detallamos a continuación qué es lo que incluye.

Vamos a empezar por los menos de la izquierda, donde podemos encontrar las opciones correspondientes a los botones. Aquí podemos escoger entre los de la cara frontal y los de la lateral, pudiendo recrear distintas pulsaciones (teclados, funciones multimedia…) o simplemente desarrollar nuestra propia macro. Lo cierto es que todo es muy intuitivo y sencillo.

Todavía seguimos en el lado izquierdo y aquí podemos configurar la sensibilidad del ratón, pudiendo hacer que se mueva mucho más con menos movimiento o todo lo contrario. En la parte izquierda inferior, por último, nos encontramos con el botón de perfiles, desde donde podremos crear los nuestros propios y cambiar cómodamente cuando lo necesitemos.

Comenzamos con las opciones del lado derecho y lo primero que nos encontramos es la configuración de los DPI, donde podemos escoger cada uno de los pasos y la cantidad que tengan, su color en la iluminación y, de así quererlo, también deshabilitar cualquiera de ellos. Lo siguiente que nos encontramos es la iluminación en sí del ratón, pudiendo escoger entre tres modos distintos: fijo, respiración y ciclando entre los colores. Además cada una de estas configuraciones nos dará la posibilidad de cambiar un parámetro, como es el brillo en el fijo, el tiempo de pulsación en respiración y cuánto tarda en cambiar cada color en el modo ciclando.

Llegamos a las últimas opciones. En la primera imagen podemos ver tres: la muestra de sondeo o frecuencia de respuesta, pudiendo escoger entre 125, 250, 500 y 1.000 Hz., la velocidad del ratón y por último el tiempo necesario para hacer doble click. En la última vemos dos configuraciones: el nivel de desplazamiento de la rueda, pudiendo escoger cuántas filas salta con cada movimiento (también podemos hacer que pase una pantalla completa) y por último decidir si utilizamos el angle snapping o no (una ayuda que nos permite no perder el eje cuando estamos realizando movimientos verticales u horizontales).

Como podéis ver el software es bastante completo, y nos permite configurar el Skiller SGM1 con bastante libertad.

Conclusiones

Sharkoon ha puesto en nuestras manos un dispositivo de lo más interesante, con un sensor PixelArt PMW3336 de 10.800 DPI, una frecuencia de muestreo de 1.000 Hz. 12 botones programables, interruptores Omron… Todo lo necesario para que podamos disfrutar delante de nuestro ordenador sin que el ratón nos de un solo quebradero de cabeza. Quizás la única pega que le encontramos son los materiales externos, pero no se puede pedir más a un dispositivo como este que podemos encontrar en PCComponentes a 45€.

Por todo esto y lo anteriormente citado, otorgamos los galardones de producto recomendado y calidad/precio al Skiller SGM1 de Sharkoon.

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