Tras unos días en el mercado y tras probarlo concienzudamente, os traemos el análisis del esperado WRC 5 el nuevo título del mundial oficial de rallys, que en esta ocasión estrena desarrollador ya que Kylotonn Games, junto a Big Ben Interactive, se pone al volante de uno de los títulos de conducción más importantes de cada año.

Tras varias ediciones sin pena ni gloria, los franceses buscan darle un nuevo aire a una franquicia histórica para que los fans vuelvan poco a poco a disfrutar de las cuatro ruedas como lo hacían antaño.

Un volante al alcance de todos

Es innegable que en los últimos meses han llegado grandes títulos de conducción al mercado como Forza o Project Cars en los que primaba la simulación y por lo tanto la dificultad de enfrentarse a un manejo lo más realista posible, excluyendo, o al menos desesperando a aquellos fans menos diestros.

Por ello, los chicos de Kylotonn Games han querido darle otro punto de vista a este WRC 5 dándole un matiz más arcade al juego, haciéndolo así mucho más accesible al gran público. Conducir no será difícil, aunque por supuesto batir los tiempos online sí lo será, así como completar una carrera perfecta, sin embargo terminar los trazados de forma competente estará al alcance de la inmensa mayoría.

No podemos negar que el juego es divertido y que resulta motivante completar las carreras sin grandes percances demostrando cierta habilidad, el problema viene cuando nos damos cuenta de que los tiempos de la IA están falseados, y es que prácticamente hagamos lo que hagamos ganaremos con uno o dos segundos de ventaja, algo que le resta todo tipo de interés a las carreras, motivándonos solo a batir marcas de cara a las tablas online.

Un auténtico rally con limitaciones

Por supuesto el formato será el habitual del WRC y únicamente contaremos con pruebas contrarreloj a lo largo de los trece rallys del calendario y sus seis tramos correspondientes: Montecarlo, Suecia, México, Argentina, Portugal, Cerdeña, Polonia, Finlandia, Alemania, Australia, Córcega, Cataluña y Gran Bretaña.

También contaremos con las licencias oficiales de los 51 pilotos de WRC, WRC-2 y J-WRC, entre los que destacan Sebastien Loeb, Dani Sordo o Robert Kubica. Eso sí, donde el título se queda escaso es en los modos de juego, y es que cuando hablamos del offline, apenas tenemos los modos de rally rápido y tramo rápido, además de un modo carrera en el que crearemos nuestro propio piloto e intentaremos ganar carreras para ascender de categoría y mejorar nuestro estatus dentro del mundillo. Aunque puede parecer entretenido, al final este modo está limitado por todos los lados, y si aún encima le añadimos el problema con los tiempos, pronto perderá todo el interés que puede tener.

El modo online aporta cierto interés a este WRC 5, ya que aparte de las clasificaciones online también contamos con carreras en las que participaremos contra nuestro rival en formato fantasma, así como desafíos semanales en los que ser los mejores en un tramo concreto. Además el próximo año el título llegará a los e-sports, por lo que el juego en línea adquirirá mucha más relevancia y seguramente se implementen nuevos modos de cara al desarrollo de los torneos.

Los baches de la generación

Siempre es difícil llegar a una generación y ponerse a la altura gráfica de los grandes títulos que circulan por ella. Cuando el presupuesto y el tiempo disponible son escasos, todavía se pone peor, y justo esto es lo que le ha ocurrido a Kylotonn Games, y es que la falta de dinero y las prisas nos han dejado un juego a medio camino entre PS3 y PS4 que, aunque cumple gráficamente, tiene errores que lo hacen demasiado imperfecto para estas alturas.

En primer lugar queremos valorar los aspectos más positivos del título, como son el diseño de los coches, bien recreados aunque con definición mejorable, así como la ambientación nocturna y la representación de las carreras con diferentes condiciones climáticas, quizás lo mejor a nivel visual del juego.

Por otro lado, tenemos circuitos bastante monótonos y demasiado vacíos en los que no vemos gente ni apenas objetos a ambos bordes de la pista. Otro de los problemas es la cantidad de popping y ciertos bugs como muros invisibles que nos han fastidiado más de alguna vuelta rápida. Es aquí precisamente donde más se nota la falta de pulidez del título.

El apartado sonoro sufre del mismo mal que el resto del juego, ya que resulta arcaico y poco creíble, ya que los coches suenan más parecidos a la mascletá valenciana que a un coche de competición. Eso sí, contamos tanto con textos como con voces en español, aunque la verdad es que estas resultan bastante aburridas e insulsas, tanto las de nuestros copilotos como las que nos guían por los menús.

Conclusiones WRC 5

Esta nueva edición del simulador de rallys nos trae una experiencia renovada y que apuesta por una jugabilidad más arcade y accesible a todos los públicos. Frente a esto tenemos una falta de complejidad y de realismo, un apartado técnico que no llega al nivel de la actual generación y una falta de modos notable.

No estamos ante el mejor juego de coches del momento, sin embargo si eres fan de los rallys es lo mejor y casi lo único que hay hoy por hoy en la generación. No es perfecto, pero sí una alternativa sólida dentro del género.

https://www.youtube.com/watch?v=aSOxuA_OESo