Qué pedimos a un juego redondo

Buenos días, buenas tardes, buenas noches. Lo que sea apropiado para cuando leáis este artículo. Alguno se habrá olvidado ya de mi, pero otros me recordarán por noticias como Fumito Ueda y el desarrollo actual o por análisis como el de Uncharted 2. Fuera coñas: mi ajetreada vida actual me impide estar al día de las noticias como antes, así que con permiso del BoSS voy a escribir de vez en cuando algún artículo de opinión, que es algo que puedo hacer de rato en rato, y así no me salgo de la esclavitud familia completamente.

Estos días me ha dado bastante hype el Darksiders. Imagino que lo conoceréis: un juego multiplataforma con diseños de Madureira en el que encarnamos a Muerte, uno de los jinetes del apocalipsis. A priori parecía un God-of-War-wanabee, pero leyendo ya los análisis que hay por ahí parece tener una mezcolanza de ideas muy bien ejecutada: algo de lucha God of War, pero con menos profundidad de combos. Algo de Zelda, algo de Prince of Persia y, encima, un regusto a Soul Reaver… y ha sido leer eso último y decir para mi mismo: «tengo que catar ese juego sí o sí»

Pero leo muchas críticas diciendo que el juego no innova. Que se queda corto como juego por eso, que en cierto modo es un juego menor. Y yo me pregunto: ¿qué buscamos en un juego? Es más ¿qué es realmente innovar? Porque, al fin y al cabo, ya está todo inventado.
Hagamos repaso a los mejores juegos de este año. No voy a entrar ya en franquicias eternas como Fifa o Call of Duty, me quedo con algunos de los que más me han gustado a mi últimamente: Borderlands, Batman Arkham Asylum y Uncharted 2.
Borderlands es un juegazo. Conjuga el control FPS de juegos como Halo (incluyendo los coches, divertidísimos), un buen modo cooperativo por red o a pantalla partida, el sistema de misiones tipo Wow y el sistema de personajes (selección fija entre varios personajes y aumentos de experiencia según ramas) de Diablo 2. Ah, y el sistema de generación de objetos aleatorios por estadísticas, de Diablo 2 también. ¿Hay algo que no hayamos visto nunca? Pues no. Tampoco su aspecto Cell-shading, su gamberrismo o su locura son nada nuevo. Pero es un juegazo y nadie lo puede poner en duda.

Batman es un juego redondísimo. No puedes ponerle una pega real a ninguna parte de su desarrollo, aparte de que te guste más o menos su aspecto gráfico, que ya es cosa de sensibilidades personales. Auna sigilo, acción, algunos puzzles e incluso fases de medio-plataformeo en 2D. La visión de detective tampoco es que sea una novedad, puede recordar por ejemplo a la vista de águila del Assasin’s Creed. Si tiene algo nuevo es el sistema de combate, pero no creo que en el conjuto del juego sea algo realmente importante.

De Uncharted 2 qué más puedo deciros. Para mi es el GOTY indiscutible, pero como su propio nombre indica es una segunda parte, continuista de hecho, de un juego que ya se dedicaba a unir cosas de diversos juegos, llámense estos por ejemplo Gears of War 2 o Tomb Raider.

Al fin y al cabo, inventen cosas o no, el saber pillar lo mejor de muchos sitios y ponerlo junto sin que chirríe ya me parece mérito suficiente. Es un modo de innovación, realmente ¿no creéis? ¿O no es Portal un juego de puzzles en primera persona? ¿Y Mirror’s Edge el llevar las plataformas a esa vista?
¿No será que proliferan muchos juegos de tipo God of War y, por otro lado, mucho gafapasta en la industria? ¿Que a veces marcamos juegos como maravillas y otros como simplemente correctos según vengan de un autor u otro? No todos los juegos pueden ser Shadow of Colossus, digo yo…

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