Kingdom Hearts III Re:Mind. Análisis PS4 y Xbox One

Kingdom Hearts III llegó a nuestras consolas el pasado 25 de enero de 2019. Casi un año después, el pasado 23 de enero se lanzó Kingdom Hearts III Re:Mind para PS4 y el 25 de febrero para Xbox One. El esperado DLC del título de Nomura en el que el autor prometía añadir más desafíos y unificar mucho mejor la historia contada en esta tercera entrega. ¿Merece la pena este contenido? Pues, depende.

Nota importante ante posibles spoilers: si estás leyendo este análisis, daré por hecho de que has completado Kingdom Hearts III, o sin haberlo jugado conoces todos los acontecimientos que ocurren a lo largo del mismo. Si no es así, entonces abandona este análisis ya que desvelaré cosas de la trama principal. Tranquilos, evitaré spoilers acerca de Re:Mind.

Kingdom Hearts III Re:Mind se sitúa justo después de los sucesos ocurridos al acabar con Xehanort en el final de Kingdom Hearts III. Nuestro protagonista, Sora, está completamente decidido en ir a buscar a Kairi para rescatar y traerla de vuelta al mundo. Mientras que Mickey le advierte de que el latente «poder del despertar» sólo sirve para despertar a aquellos corazones dormidos, o para traerlos de vuelta. No para corazones que hayan desaparecido. Si emprende este viaje, debe saber que posiblemente no regrese.

Kingdom Hearts III ReMind

Capítulo I: La historia de Re:Mind

Con esta premisa, Re:Mind nos trae contenido nuevo compuesto por cinemáticas sueltas en momentos clave. En los que vemos que falta diálogo como el encuentro entre Xigbar y Luxord en el Olimpo. Así como otras que profundizan mucho más en el desarrollo de la trama. Pasadas un par de escenas que llegan para explicarnos bien ciertos acontecimientos, o simplemente arrojar más oscuridad a la historia de Xehanort. Llegamos al verdadero contenido de este DLC, en donde Sora viaja hasta el Fin del Mundo para encontrarse con Chiriti, el cual le explica los riesgos que conlleva el acto que va a realizar.

Durante este tramo del contenido descargable, Sora vuelve atrás en el pasado para viajar a través de cada uno de los corazones de los portadores de la llave espada con el fin de encontrar cómo recuperar a Kairi. De esta manera, también se nos narra algunos vacíos argumentales que quedaron sueltos en el juego principal como qué ocurre con Consciencia Latente o incluso qué sucede realmente durante el despertar de Roxas.

Añadidos que -como gran fan- se agradecen, ya que Nomura se ha tomado la molestia de profundizar y explicarnos bastantes partes de la misma. Más allá de los grandes esfuerzos que realiza Sora por encontrar a Kairi. Pero sí, en fin, son elementos que debieron estar en el juego base.

Kingdom Hearts III Re:Mind podríamos dividirlo, perfectamente, como en tres tomos diferentes. El primero de ellos es una avalancha de cinemáticas para dar forma a los diferentes vacíos de la trama. Mientras que el segundo empieza con el viaje de Sora, para acabar en un tercer capítulo que nos eleva al clímax total.

Capítulo II: Los portadores de la Llave Espada

Durante el clímax de Re:Mind, Sora viajará a través de los corazones de los portadores en busca de respuestas. En este trayecto, nos toca revivir sucesos vividos anteriormente. Aunque con un pequeño tema a tener en cuenta: esta vez no podemos manipular nada de lo ocurrido.

A lo largo de todo este tramo tendremos situaciones vividas anteriormente, pero vistas desde la perspectiva de ese personaje. Por ejemplo, el ataque de la oleada de los Sincorazón a Aqua. Del porqué se queda parada poco antes de recibir el golpe. O simplemente qué ocurre dentro del corazón de Ventus cuando este cae noqueado.

Para conseguir rescatar a Kairi también pasaremos por las diferentes batallas contra la Organización del laberinto. Lo único que, en esta ocasión, tendremos leves cambios. Se nos narran diálogos nuevos con los personajes antes de que Sora llegue a ayudar. De esta manera conseguimos controlar a los diferentes custodios en las batallas bien sea Roxas, Ventus o Riku entre otros. Dando una de las mecánicas más pedidas por la Comunidad.

Para no entrar en muchos más detalles de la trama en este tramo, ya que lo consideraría como un spoiler bastante grande. Decir que, una vez alcanzado a Xehanort, la historia volverá a tomar su rumbo original. En otras palabras, desde este punto todo lo que veamos y ocurra es completamente nuevo. El verdadero camino en busca del corazón de Kairi. Y hacedme caso, que este momento es impresionante. Me cuesta morderme la lengua, para no desvelar mucho más de todo lo que ocurre a partir de aquí.

Capítulo III: Limitcut

Sin duda alguna, el Episodio Limitcut ofrece todo aquello que esperábamos de Kingdom Hearts III en cuanto a dificultad (en un principio) y de su DLC. Este contenido adicional y sin entrar mucho en spoilers, nos vuelve a dejar combatir contra datos recreados de cada uno de los miembros de la Organización XIII.

En lo personal me parece un punto de «vuelta a lo mismo», me explico. No sé cuántas veces nos hemos enfrentado ya a la Organización. Aunque esta vez lo hace con un motivo importante para la trama y con los miembros reales de la misma. Por tanto, sí, efectivamente lo que estás pensando. Nos enfrentaremos a personajes como el mismísimo Xehanort, Terranort o incluso Xion.

Los combates suben drásticamente el nivel de dificultad respecto a lo visto en el propio juego o incluso en Re:Mind. Cada uno de los integrantes de la Organización son un desafío completamente único. Las rutinas, en más de un caso, se vuelven frustrantes y sus acciones de movimiento y ataque, realmente devastadoras. Sobre todo esto último, ya que todos cuentan con un gran abanico de ataques nuevos. Un desafío a la altura de la saga que no dejará indiferente a nadie.

Pero, llegados a este punto, imagino que muchos os preguntáis: pues bien, una vez completado este episodio ¿qué ocurre después? A parte de que sería un gran spoiler desvelarlo con pelos y señales. De esos de cortar cabezas… Diré que, como marca de la casa, tenemos encuentro con un Jefe Final Secreto de esos que quitan el hipo. Y más aún sus dos posibles finales, estos quitan hasta la respiración.

Conclusión Kingdom Hearts III Re:Mind

Para mí -en lo personal- Kingdom Hearts III Re:Mind es un DLC que cumple su objetivo. La parte de Re:Mind profundiza más en ciertos aspectos de la trama y nos cuenta todo lo que ocurre después de que Sora cruce ese portal al final de Kingdom Hearts III. Mientras que Limitcut nos deja uno de los desafíos más grandes de la saga y uno de los finales secretos más impactantes de su historia.

Como lore, posibilidades en jugabilidad y desafío es un DLC completo. Un material en el que se ha notado que tanto Nomura como su equipo han trabajado duro. Puliendo aspectos negativos de Kingdom Hearts III y escuchando un poco más a su Comunidad, con elementos como la posibilidad de controlar otros personajes principales.

Ahora bien, ¿merece la pena comprar Re:Mind? Sinceramente, sí y no por partes iguales. En mi caso es un «SÍ» por todo lo que ocurre en Re:Mind a nivel narrativo, las mejoras jugables que trae y el Episodio Limitcut.

Mientras que, por parte del «NO», tenemos su elevado precio para el tipo de contenido que ofrece. Siendo sinceros, debería haber sido un contenido incluído en el juego base. Además, si eres uno de los que no se sintió lleno jugando Kingdom Hearts III, probablemente no consigas llenar ese vacío con este DLC.

Nota: Por varios motivos relacionados con la saga. He decidido prescindir de poner una nota final al análisis. Cada uno que valore si realmente le merece la pena adquirir este producto o no.

Lo mejor:

  • Poder controlar a otros personajes de la saga.
  • Las mejoras gráficas, de control y jugabilidad de combate que ofrece.
  • La trama de Re:Mind, profundiza más en todo lo relacionado con Sora y Kairi.
  • El capítulo Limitcut y el jefe final, el mayor acierto.
  • Su modo foto y composición.

Lo peor:

  • Su elevado precio.
  • La repetición excesiva de sucesos: enfrentarse a la Organización, momentos vistos anteriormente…
  • A la trama original le cuesta arrancar.
  • Contenido que debería haber estado en el juego principal.
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