La Visita. Crítica

La Visita llega a nuestras pantallas el 11 de Septiembre de la mano de Universal Pictures. La película dirigida por M. Night Shyamalan, que ha tenido una carrera detrás de las cámaras llena de altibajos con grandes títulos como El Sexto Sentido o El Protegido y proyectos muy regulares como Airbender o After Earth. En el reparto contamos con Olivia DeJonge, Ed Oxenbould, Deanna Dunagan, Peter McRobbie y Kathryn Hahn.

La trama es la siguiente: Becca (Olivia DeJonge) está rodando un documental de la vida de su madre (Kathryn Hahn). Para tener un trabajo completo, decide ir a casa de sus abuelos junto a su hermano Tyler (Ed Oxenbould) para ver dónde se crió su madre. La relación entre su madre y sus abuelos no es muy buena, ya que con 19 años su madre se fue de casa. Al llegar al pueblo, su abuelo (Peter McRobbie) y su abuela (Deanna Dunagan), les esperan para acompañarlos a la antigua casa de su madre. Todo parece tranquilo y muy hogareño, pero a medida que avanzan los días, el comportamiento de sus abuelos va cambiando y empiezan a hacer cosas raras.

Este nuevo proyecto de Shyamalan de terror con cámara a mano es bastante entretenido. Nos mete en un paisaje rural donde la convivencia entre abuelos y nietos parece perfecta en un primer momento, pero es muy diferente al caer la noche y a medida que van pasando los días la cosa va a peor.

Durante toda la película tendremos algunos momentos de tensión muy bien creados principalmente por el personaje de Deanna Dunagan. Su interpretación en esta película es de lo más destacable: en un principio la tenemos como la típica abuelita que hace galletitas y es muy simpática con sus nietos, pero su personaje tiene un cambio de actitudes que ponen algo en tensión al espectador. Peter McRobbie también cumple, el cambio de su personaje no es tan destacable como el de Dunagan, pero no por ello dejar de ser sorprendente.

El film tiene una parte cómica y es gracias al personaje de Tyler, quien casi siempre utiliza un comentario ingenioso que puede producir más o menos gracia al espectador. Su personaje es bastante simpático, nos muestran que le encanta rapear y tiene una obsesión con los microbios (germofobia), lo que le impide tocar un pomo si no es con un pañuelo o un trozo de papel. Becca por otro lado es una enamorada de los documentales y quiere hacer uno para estrechar la relación entre su madre y sus abuelos.

El hecho de que esté rodado con cámara en mano, no es tan repetitivo e incluso molesto como en algunas películas del mismo estilo. La ambientación en una casa rural da mucho juego, tanto de día como de noche, pero no es algo nuevo que hayamos visto utilizar al director, ya que jugó mucho con una ambientación parecida en El Bosque.

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Conclusiones de La Visita

La Visita no es la mejor película de Shyamalan, pero ha creado un film muy entretenido. Todos los fans del director se pueden dar por satisfechos del buen paso que ha dado para arreglar las decepciones pasadas.

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