Life is Strange. Análisis PS4

Al leer aventura episódica todo el mundo piensa automáticamente en Telltale Games, el estudio detrás de trabajos como The Walking Dead o la adaptación de Juego de Tronos, pero durante el pasado año el estudio parisino DONTNOD Entertainment, con el apoyo de Square Enix, nos trajo Life is Strange. Una increíble aventura que, en principio, pasó bastante desapercibida pero por su gran calidad ha ganado cada vez más seguidores. Esta aventura centrada en la narrativa ganó fans a medida que se sucedían sus capítulos gracias su precioso (y un poco hípster) estilo y su cuidada historia que mezcla amistad y líos de instituto con la ciencia ficción. La aventura de Max y Chloe llega ahora en formato físico, de la mano de Koch Media, y totalmente traducido al español.

Max y Chloe, oda a la amistad

Encarnamos a Max Caufield, una estudiante de fotografía en la prestigiosa Academia Blackwell, la cual vivirá una semana bastante intensa. Nuestra protagonista, aun descentrada por su regreso a Arcadia Bay, tendrá un inesperado reencuentro con Chloe, una rebelde de pelo azul y una amiga de la infancia de Max. Ambas comenzarán una aventura que las llevará a visitar los lugares más oscuros de la Academia Blackwell y Arcadia Bay.

El argumento puede parecer algo insustancial al principio, una simple historia típica de serie de instituto, pero a medida que avanzamos en el juego se vuelve bastante oscura y dura. Entre todos los líos en los que Max y Chloe están envueltas se mezclan las investigaciones detectivescas, el drama, mezclada con paradojas espacio-temporales y, sobre todo, una historia increíble de amistad entre las protagonistas. Además el título cuenta con varios giros argumentales increíbles, de esos que te dejan con la boca abierta, sobre todo los cliffhangers al final de los episodios 3 y 4.

Rebobinar el tiempo no es tan bueno como parece

Life is Strange es una aventura narrativa muy al estilo del trabajo de Telltale, pero tira más hacia la aventura gráfica tradicional. El título se basa en la exploración de los diferentes lugares para buscar información y encontrar objetos, la interacción con los distintos personajes y algunos puzles. Los rompecabezas que nos encontramos son bastante sencillos, como por ejemplo simples ejercicios de memoria para enlazar las distintas pistas a modo de detective.

Además de todo esto, en Life is Strange tiene un gran peso en la toma de decisiones, pero no como las que encontramos en títulos de Telltale donde te dan a escoger en un determinado momento una elección. La mayoría de las acciones provocan una reacción en mayor o menor medida, y la toma de decisiones se torna mucho más importante ya que notamos realmente que nuestras decisiones tienen consecuencias reales en el devenir de la historia.

A la parte narrativa del juego tenemos que añadirle un aspecto clave de la jugabilidad, la posibilidad de rebobinar el tiempo, lo que nos permite cambiar nuestras decisiones o conseguir nueva información de los demás. Esto provoca que muchas veces podamos ver las consecuencias a corto plazo de nuestras decisiones. Pero si algo de bueno tienen las decisiones de Life is Strange es que no hay una buena y otra mala, todas podrán tener repercusiones positivas o negativas que no veremos de manera inmediata.

Para añadirle rejugabilidad al título contaremos con una serie de fotos opcionales, momento en los que Max tendrá la opción de sacar una foto a algo en concreto. Estas pueden ser al entorno, como a un personaje o cosa que nos encontramos en determinado momento, o pueden ser fruto de nuestras acciones, donde tendremos que hacer algo antes para conseguir el momento de la foto. Cada episodio cuenta con diez fotos opcionales distintas, las cuales quedaran reflejadas en el diario de Max.

Arcadia Bay en fotos

En el aspecto gráfico Life is Strange llama mucho la atención, y aunque no es precisamente un portento, artísticamente la aventura de DONTNOD es, sin duda, increíble. El diseño dibujado a mano, la estupenda iluminación y el color hacen que algunos de los planos pudieran ser fotos de Max. Eso sí, también nos encontramos algún fallo, como por ejemplo, el pelo de los personajes, tan rígido que parece de plástico, o fallos en la sincronización labial en la parte final del juego.

La banda sonora está a la altura del resto del juego, con temas indie y acústicos, muy en la línea del título. Estos temas ayudan en la ambientación de corte intimista que pretende transmitirnos el título, algunos de ellos de artistas como José González o Syd Matters. Además está perfectamente integrada, no solo en las escenas cinemáticas, sino también en partes donde controlamos a Max. En cuanto al doblaje nos encontramos un gran trabajo sobre todo por parte de las voces de las protagonistas, Hannah Telle y Ashly Burch, aunque el resto de personajes no pierda calidad.

El título llega en formato físico con una total traducción al español, y cuando decimos todo es todo. Desde las conversaciones, que es lo lógico, hasta carteles que miraremos en las paredes o las pantallas de los ordenadores, con los que podremos navegar siempre entre varias páginas.

Conclusión de Life is Strange

Con Life is Strange nos encontramos una aventura narrativa especial, una historia de corte intimista, que sumado al gran diseño artístico y la banda sonora, nos deja totalmente embobados. El título es totalmente recomendable, sobre todo para los fans de este subgénero de las aventuras narrativas, ya que esta es la mejor que hayamos visto, teniendo todo lo que querrían tener los trabajos de Telltale Games. Una muy buena historia de amistad entre dos jóvenes, que pese a los elementos sobrenaturales de la trama, parece totalmente realista. Además de los muchos momentos increíbles, desde giros totalmente inesperados a momentos muy emotivos.

Salir de la versión móvil