El estudio independiente español Resistance Studio, lanza al mercado Pushy and Pully in Blockland, su primer juego que llega a PC, Xbox One, PlayStation 4 y Nintendo Switch. Título que homenajea a las recreativas de las décadas de los 80’s y 90’s, un rompecabezas bastante agradable y simplicista enfocado para los amantes de los clásicos.
Acción entre cubos
En Pushy and Pully in Blockland controlamos a Pushy y a Pully en una aventura espacial donde ayudamos a las dos protagonistas en la recuperación de su nave. Deambulando por el planeta Blackland, debemos acabar con toda señal de vida para avanzar por los 50 niveles diferentes que posee el juego. Clasificados en 5 fases y divididos en 10 niveles cada una, todos ellos únicos entre sí.
Cada fase principal tendrá un diseño para simbolizar que nos encontramos en otro lugar, por tanto también es un indicativo de que encontraremos alienígenas diferentes. A priori la gran mayoría de estos seres son peligrosos de forma indirecta, ya que no hacen un intento de ataque como tal. Simplemente se mueven por el escenario que debemos estudiar y evitar para acabar con ellos. Algunos tienen un comportamiento parecido con la pequeña diferencia de que pueden romper los cubos de su alrededor. Por otro lado, sí tenemos una serie de criaturas que buscan el contacto activo con nosotros para derrotarnos como las ruedas o los pulpos que lanzan rayos.
La mecánica principal de Pushy and Pully in Blockland consiste en movernos por un escenario lleno de cubos y arrojarlos hacia todos los enemigos del nivel. Nuestro objetivo es claro: acabar con los alienígenas presentes antes de que se acabe el tiempo establecido. Meta que podemos alcanzar tanto solos como con un compañero gracias al juego cooperativo, donde cada uno cuenta con su propia clasificación y vidas.
Las primeras fases tienen una dificultad normal, mientras que en el primer jefe ya podemos apreciar un pequeño aumento de la misma. A medida que avanzamos en las fases y niveles del juego, se nota claramente cómo va subiendo la dificultad gradualmente. Poniéndonos ante rompecabezas más complejos donde debemos tirar de ingenio y estrategia para resolverlos en el menor tiempo posible.
Las batallas contra los jefes son desafíos variopintos, con dificultades muy dispares entre sí que nos dejan con situaciones únicas. Cada uno tiene una rutina que se debe aprender para acabar con él y la verdadera guinda del pastel cae sobre estos seres. Donde mantener la calma puede hacer que se nos agote el tiempo u optar por una estrategia más violenta hará que perdamos nuestras vidas en seguida.
Si en algún momento agotamos la cuenta atrás, el juego se tornará más rápido y aparecerá una nave que nos perseguirá a no ser que derrotemos las amenazas restantes. Si durante el trayecto, nuestro contador de tres vidas se reduce a cero, habremos perdido la partida. Aunque, si reducimos todas las vidas podemos volver a reaparecer desde la pantalla de «game over» sacrificando los puntos almacenados durante la partida. En tus manos está la elección.
Pero los niveles no solo consisten en completarlos rápido, ya que para los más exigentes contamos con la recolección de puntos y desbloqueo de logros. Los cubos están divididos por marcas y colores, en donde si juntamos tres o más del mismo tipo recibimos un power-up o puntos extra. Por ejemplo, si juntamos los bloques amarillos obtenemos una bomba que podemos lanzar en línea recta y explotará al mínimo contacto. Perfecta para acabar con grupos de enemigos. Por cada extraterreste que acabemos y cubos del mismo tipo que alineemos, se traducen en puntos para nuestro personaje. Datos que irán a un ránking local y online una vez finalizada la partida. Ofreciendo un campo competitivo para aquellos que buscan alcanzar la máxima puntuación posible y aparecer en la tabla de clasificación global.
Blockland y el encantado de lo artesano
El primer aspecto destacable de Pushy and Pully in Blockland que entra fácilmente por los ojos, es su carismática presentación visual. Un estilo gráfico basado en bits con el que homenajea a las clásicas recreativas de las décadas de los 80’s y 90’s. Con un planteamiento y diseño de escenarios que recuerda a otras obras del género como el famoso Bomberman, lleno de bloques que se deben alinear o romper para continuar.
Absolutamente los 50 niveles de los que dispone el juego han sido diseñados a mano uno por uno. Un apartado en el que podemos apreciar el buen trabajo de Resistance Studio como el mimo con el que los han hecho. Dejándonos un planteamiento de rompecabezas realmente desafiante en más de una ocasión con algún que otro escenario agobiante por la cantidad de enemigos a derrotar y cubos que alinear.
Pushy and Pully in Blockland cuenta con un apartado artístico la mar de atractivo. Donde podemos destacar el buen uso de las paletas de colores brillantes y saturadas, como el diseño presentado en cada uno de los personajes alienígenas. Sobre todo el de los cinco jefes finales y sus combates. Aunque la mención especial se la llevan -como es de esperar- nuestras dos protagonistas, que lucen un estilo «kawaii» muy acorde con la temática del título. Destacando por sus colores así como por la personalidad tan marcada en las animaciones durante los propios niveles de juego.
A niveles técnicos es un juego que se comporta bastante bien. Parte de ello se debe gracias a lo poco exigente que es con nuestro ordenador y las pocas mecánicas jugables que presenta. Por otro lado, la experiencia final se complementa perfectamente con la banda sonora escogida. Formada por una variedad de pistas que hacen uso de los ritmos de la época de las recreativas. Rociando cada rincón del juego con melodías bits agradables y potentes con una composición de efectos de sonido acordes a la ambientación.
Conclusión Pushy and Pully in Blockland
Pushy and Pully in Blockland es un juego bastante divertido y exigente por partes iguales. Aunque su diseño nos muestra un juego dulce, en realidad es todo lo contrario, encontrándonos con una dificultad que aumenta correctamente de forma gradual. La obra de Resistance Studio es entretenida de principio a fin, donde su mimo en el diseño artístico de personajes y niveles, y su campo audiovisual atrapan desde el minuto uno.
Por desgracia, estamos ante un juego que no ofrece nada nuevo al sector prefiriendo tirar por lo sencillo, antes que innovar en algo propio. Pero, ¿entonces funciona? Claro que funciona, francamente diría que bastante bien de hecho. Bien sea por su diseño, su jugabilidad o banda sonora. No obstante me hubiera gustado ver algo más de iniciativa por buscar algo personal, que marcara la diferencia en un género con muchas competencias parecidas.
Política sobre notas en Game It
Nota: 6
Lo mejor:
- Artísticamente el juego luce fantástico, un gran homenaje a las recreativas arcade de la época.
- Una dificultad que progresa adecuadamente con el jugador, ofreciendo desafío y satisfacción al ser completado.
- Diseño de escenarios, personajes, jefes finales y combates.
- Juego cooperativo de dos jugadores, con vidas y puntos independientes.
Lo peor:
- Poca iniciativa por destacar ofreciendo algo más personal y/o novedoso a la mecánica.
- Al fin de cuentas, tenemos una jugabilidad demasiado simple.
