The Binding of Isaac, análisis del primer juego

The Binding of Isaac

The Binding of Isaac, creado por el desarrollador independiente Edmund McMillen (creador de otros éxitos comerciales como Super Meat Boy) es uno de esos videojuegos para PC sencillos y adictivos que acabarán robándote tu valioso tiempo de sueño.

Historia The Binding of Isaac

Isaac y su madre viven felices en una pequeña casita en lo alto de una colina. Isaac pasa el tiempo jugando y coloreando mientras su madre ve a todas horas programas bíblicos en la televisión. Y son felices. O así lo parecían hasta que la madre de Isaac escuchó una voz en su cabeza que le hablaba desde los cielos.

-Tu hijo ha sido corrompido por el pecado. Para probar tu amor y tu devoción hacia mí, exijo un sacrificio.

-Haré tal y como me pedís, mi señor.

Isaac tendrá que escaparse a través del sótano de su casa, infestado de bichos y otra serie de criaturas espeluznantes para evitar que su madre acabe asesinándole. Sin embargo las cosas no serán fáciles, y armado simplemente con la basura que vaya encontrando por el suelo, Isaac se verá abocado a una lucha final que pronto se convierte en una batalla por sobrevivir no sólo a la locura de su progenitora, sino a su propia demencia.

Sobre el juego

A pesar de que el concepto suene sencillo, The Binding of Isaac es uno de los juegos indies más vendidos en Steam (con un precio tan bajo como 5€ y 2€ su expansión) gracias a sus cualidades únicas como rogue indie y arcade violento.

Para empezar, cada partida es diferente de la anterior. Uno tendrá que ir atravesando una serie de salas infestadas de todo tipo de enemigos que se generan aleatoriamente cada vez que terminas un nivel. Al principio no eres más que un niño desprotegido que se defiende con sus propias lágrimas, pero poco a poco irás consiguiendo objetos que aparecerán por pura suerte en las diferentes habitaciones y que se combinarán entre ellos creando unos resultados completamente inesperados.

¿Las consecuencias? Tendremos que jugar y volver a jugar hasta el infinito para poder dominar simples sumas de efectos de objetos como el hongo, que te permite correr más, y el espejo, que le otorgará a tus lágrimas un efecto boomerang.

Ya hemos mencionado que es un Rogue mezclado con Arcade y dirigido a los jugadores más hardcore y acérrimos al género, pero también casa con casual debido a la fácil implementación como pantalla reducida y a sus partidas (al principio) de poca duración y sin excesiva complejidad.

Pero la verdadera magia de Isaac es que es un juego, como llamarían algunos entendidos en la materia “purista”. Cada vez que mueres, reapareces al principio. Los desafíos al cabo de poco tiempo llegan a ser tan arduos que te superan por completo y dependes en gran medida de las monedas acumuladas y de la suerte que tengas encontrando objetos verdaderamente colosales. Es en el momento en el que llevas 6 horas jugadas y decides retirarte cuando aparece en mitad de una sala aleatoria un rayo láser que descuartiza a todos los enemigos y que te permite avanzar para enfrentarte, al final de todo, con el corazón de tu temida mamá.

Lanzado para PC, esta maravilla de la jugabilidad se distribuye a través de la plataforma Steam por sólo 5€ y uno puede hacerse con la expansión Wrath of the Limb con más contenidos y enemigos por sólo 2€. Y es que un juego para PC basado en un niño que derrota arañas y moscas lanzando lágrimas en una perspectiva cenital falseada en 3ª persona, no debería parecernos gran cosa, pero está catalogada bajo el sello PEGI 16 debido a la gran cantidad de sangre y de violencia que podemos llegar a vivir en los sótanos de Isaac.

Basado en The Legend of Zelda: Link to the Past en la forma que en avanzaremos por el juego, la historia de este pequeño es más sangrienta que la de su predecesor y en todo momento se pueden ver numerosas referencias bíblicas y a otros juegos menos conocidos: como un ayudante basado en el personaje de bomberman, numerosos enemigos con caras de memes o incluso un aliado sangriento llamado Super Meat Boy y que tendremos que ir reconstruyendo de un trozo de carne.

Las sensaciones que nos transmiten son la mayor de las confusiones y oscuridades, consiguiendo que una plana animación en 3D llegue a parecernos verdaderamente enfermiza en algunos momentos y que surjan teorías enrevesadas en Internet sobre quién es realmente la madre de Isaac y quiénes son esos cadáveres tan parecidos a él con los que te enfrentas en el sótano.

Para garantizar que sus jugadores repetirán una y otra vez su experiencia, Edmund se ha encargado de programar unos controles lo más sencillos posibles: podrás caminar, disparar en todas las direcciones y dejar bombas. Jugarás en 3ª persona, los enemigos se recargarán ante ti cada sala nueva no abierta y tendrás que asesinarlos a ellos antes de que te quiten tus tres corazones.

Poco a poco conseguirás ir desbloqueando nuevos niveles, nuevos trofeos y logros y nuevos objetos, que nos otorgarán poca o casi ninguna pista sobre el final del juego pero que nos darán en la compensación nuevos personajes con los que jugar. Estos nuevos modos de vivir la agonía de Isaac no son más que el propio niño disfrazado de sus héroes y cada uno traerá un objeto de serie que describa su historia de fondo:

Si queremos disfrutar al completo de esta increíble aventura tendremos que atravesar un número aleatorio de niveles que nos deparan sorpresas increíbles.

Zonas y niveles de The Binding of Isaac

Existen inicialmente 3 zonas que se van ampliando hasta 6 zonas a medida que completamos el juego. Cada nivel se compone de dos fases y cada zona se caracteriza por el tipo de enemigos que pueden aparecer, la forma que pueden tener las salas, el número de salas por zona y los enemigos finales. Dentro de cada tipo de zona existe una variante que cambia ligeramente a los enemigos pero no aumenta la dificultad.

En el primer nivel, The basement/Cellar, los enemigos son sencillos y la mayoría de veces se moverán aleatoriamente o tratarán de huir de nosotros. Los premios por completar una sala son fácilmente adquiribles y el número de salas ronda los 26 por partida.

The Caves/ Catacomb, el siguiente nivel, es un poco más complicado: los enemigos tratarán de alcanzarnos o disparándonos directamente o chocando contra nosotros para quitarnos vida. El número habitual de salas entre las dos fases es de 36

El tercer nivel: The depths/ Necropolis, aumenta bastante la dificultad, además de los enemigos. Los elementos del entorno tratarán de hacernos daño mientras no acabemos con los enemigos de la sala. Los premios son inaccesibles como en el nivel anterior. El número habitual de salas es 40. En el primer nivel nos enfrentaremos a un boss aleatorio pero en el segundo lucharemos siempre contra “mamá”.

El segundo nivel corresponde al primer final del juego. Una vez superado desbloqueamos las siguientes dos salas.

Si ya hemos vencido a mamá en una partida anterior podremos acceder al nivel The womb/ Utero. En este nivel desaparecerán las salas de tiendas y las salas de ítems. Los enemigos podrán teletrasportarse dentro de la sala y los elementos que tratarán de hacernos daño aumentan. Los premios son totalmente inaccesibles y el número habitual de salas es de 44. Tendremos que acabar 10 veces estas salas para desbloquear la siguiente.

Al terminar 10 veces el nivel anterior desbloquearemos el nivel de Satán que solo tendrá un piso y no dos como los anteriores, los enemigos son tremendamente peligrosos y en varias salas nos enfrentaremos a bosses de niveles anteriores.

No hay salas especiales, ni tiendas, ni salas de objetos. El enemigo final siempre será el mismo Satán y derrotarlo desbloqueará el siguiente nivel del juego que podremos elegir en lugar de este en posteriores partidas (los objetos que desbloqueamos en uno u otro lado son distintos).

Lo mismo ocurre con el nivel “Catedral”. La catedral tendrá enemigos del mismo nivel de dificultad que Sheol. Pero la mayor diferencia es que el enemigo final somos nosotros mismos o una representación de nosotros en el centro de la sala. Tendremos que derrotar a “Isaac” una vez con cada personaje si queremos desbloquear el último nivel de dificultad.

El cofre supondrá el nivel más difícil del juego: para empezar te regalan 4 cofres para tratar de afrontar el reto que supone este nivel. Los enemigos suelen ser la combinación de varios bosses, o de varios minibosses o de todo al mismo tiempo. No hay ninguna sala especial y nuestro objetivo será llegar al enemigo final lo antes posible. El enemigo final es el misterioso bebé azul bautizado como “???”. Su forma de atacar es similar a la de “Isaac” pero las balas trataran de alcanzarnos siempre que pasen cerca. Terminarlo nos enseñará el último final del juego.

Como veis, los gráficos son minimalistas en un juego tan descabellado. A pesar de su relativa sencillez, no es nada fácil conseguir jugarlo.

Cómo se juega a The Binding of Isaac

La primera sala del juego ya explica todo lo necesario para empezar a disfrutarlo, en la esquina superior izquierda tendremos el mapa con las salas adyacentes, e irá revelándose a medida que avancemos, cada sala especial tendrá su propio icono para que sepamos orientarnos aunque nos encontremos lejos de ella. Después disponemos de los contadores de dinero que nos servirán para las tiendas o para gastarlos en las máquinas tragaperras). Las bombas, que harán daño y nos permitirán destruir rocas y revelar salas secretas. Y las llaves que nos permitirán abrir cofres y salas cerradas.

Inmediatamente después tendremos dos dibujos que nos indican el tipo de arma que disparamos (lágrimas en un principio) y el objeto que tenemos equipado. Por último se nos mostrará la vida en forma de corazones. Hay otros dos tipos de objetos que se mostrarán debajo de la barra superior que son los consumibles (solo se pueden usar una vez) y los “trinckets” (que nos darán un efecto pasivo). Pero aunque todo lo que necesitemos sean esos 10 botones, los objetos que consigamos cambiarán drásticamente la manera a la que nos tenemos que enfrentar a los distintos retos que suponen cada sala lo que hace que cada partida sea una experiencia irrepetible.

La enorme cantidad de posibilidades gracias a la aleatoriedad y la inmensa cantidad de objetos existentes hacen posible que aunque podamos terminar prediciendo que tipo de juego se ajusta más a nuestra manera de jugar no podamos llevarla a cabo siempre y tengamos que esforzarnos en acabar el juego de una manera novedosa.

Conclusiones The Binding of Isaac

Es un juego indie, se nota en su estética y en su planteamiento pero esos detalles son los que hacen único y tan endiabladamente divertido este juego. Puede pecar de ser de la vieja escuela donde la dificultad a veces por pura casualidad es endiabladamente alta y en otros casos convertirse en un paseo hasta el final. La habilidad es necesaria para llegar lo más lejos posible, pero la suerte (al ser todo tan aleatorio) influye en cada partida.

Es un juego sencillo y por lo tanto es muy fácil aprender a controlar al personaje, la interfaz es simple pero efectiva y cumple a la perfección con su propósito. Lo bueno de este juego es que te hará preguntarte el porqué de su historia, te sacará una sonrisa recordando aquella combinación tan fuerte de objetos y te enfadará cuando la suerte no está de tu lado.

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