The Girl and the Robot. Análisis PS4

The Girl and the Robot Game It

En los últimos años ha ido cayendo poco a poco el auge de las campañas de crowdfunding. Ahora es cada vez más complicado encontrar un proyecto que tuviese éxito mediante esta vía. Hoy traemos una de las excepciones que quedan, The Girl and the Robot llega a PC y consolas gracias a un largo desarrollo y al apoyo de la gente en Kickstarter.

Atrapados en el castillo

The Girl and the Robot nos pone en la piel de una chica en la habitación de un castillo. El juego comienza cuando nos abren la puerta de la habitación y ahí podemos empezar a deambular por el castillo. Sin saber nada más acerca de la niña y de los motivos por los que estaba encerrada comienza esta historia. No tardaremos demasiado en encontrarnos con el robot, encerrado en una jaula.

Obviamente el primer objetivo será el de liberarlo, y una vez logrado tendremos la posibilidad de manejar a ambos personajes. Aquí es donde comienza realmente el juego, perder a cualquiera de los dos personajes nos supondrá fracasar. Cada personaje tendrá unas habilidades, mientras con el robot podremos enfrentarnos a los enemigos que encontremos, será la niña la única capaz de saltar y alcanzar lugares elevados, además de curar al robot. Todo esto lo realizaremos con unos controles que, aunque no son los mejores, lo comentaremos más adelante, son muy simples y efectivos.

Una vez tenemos el control de ambos personajes comienzan los puzles. Estos rompecabezas son el eje central de The Girl an the Robot. A lo largo de esta aventura nos encontraremos continuamente con obstáculos que nos impedirán avanzar y para superarlos tendremos que cambiar de personaje para aprovechar cada una de sus habilidades y poder continuar hacia adelante.

Hay que reconocer que los rompecabezas diseñados por los chicos de Flying Carpet Games son muy originales, pero es cierto que la mayoría de ellos no supone un gran reto. La excepción la encontramos al final del juego, un combate que nos obliga a usar a ambos personajes para salir victoriosos. En esta ocasión vemos la mejor parte del juego concentrada en un final bastante memorable. El problema es que el resto del juego no logra estar a la altura de esa última escena. En definitiva, en cuanto a la experiencia que ofrece The Girl and the Robot, encontramos una gran idea algo desaprovechada por la sencillez de sus puzles.

 

La movilidad de un robot

Como ya hemos comentado antes los controles en The Girl and the Robot son muy simples. La variedad de acciones de ambos personajes es bastante limitada y eso hace que sea muy fácil manejarlos con el mando. A pesar de esto, y aunque los controles responden correctamente, es bastante incomodo el control de la cámara.

Cuando manejamos a cualquiera de los personajes tenemos la posibilidad de correr, pues bien, mientras corremos la cámara nos sigue correctamente, pero cuando no lo hacemos los movimientos de los personajes son algo erráticos. Ese es el mayor problema que hemos encontrado a nivel jugable y la verdad que puede ser algo molesto, hasta el punto de jugar todo el tiempo con el botón de correr pulsado. Como ya hemos comentado el resto de la jugabilidad es bastante correcta apoyada en unos movimientos bastante simples.

En cuanto al apartado técnico del juego hay que reconocer que sin grandes alardes consigue su propósito. Desde el primer momento la banda sonora y los escenarios nos dan una enorme sensación de soledad. El silencio más allá de la música en un castillo que parece estar totalmente desierto crea una atmósfera muy acertada para la historia que nos cuenta The Girl and the Robot.

Algo que también nos ha dado algún dolor de cabeza es la inestabilidad de frames, ya que cuando se acercan enemigos son habituales los bajones. Esto sumado a los problemas con la cámara nos ha supuesto ver las palabras Game Over en nuestra pantalla algunas veces de más.

 

Conclusiones de The Girl and the Robot

Desde el momento en el que arranca The Girl and the Robot tenemos la sensación de que estamos ante un gran juego en el que lo mejor está por llegar. El problema es que el juego avanza y nunca termina de convertirse en el gran juego que podría ser. Las partes negativas están presentes y hay poco bueno que destacar.

Finalmente nos deja un sabor agridulce este proyecto que arranca muy bien pero al que le ha faltado un poco de cocción para estar entre los mejores juegos independientes de los últimos años.

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