Expansive Worlds y Avalanche Studios nos traen en esta ocasión un título de acción, aventura y toques de supervivencia, pero no uno cualquiera, sino uno en el que nuestras principales preocupaciones se presentan en forma de unos dinosaurios que habitan en la isla en la que hemos sido «liberados».
Si os gustan estas criaturas extintas desde hace millones de años y la supervivencia, no os perdáis nuestro análisis de TheHunter Primal que podréis leer a continuación.
Primal Eden abre sus puertas
El principal objetivo de TheHunter Primal, es intentar sobrevivir en una isla abandonada llamada Primal Eden dominada por dinosaurios. Nosotros seremos un exconvicto «contratado» para exterminar estas criaturas y así hacer habitable dicha isla para el ser humano. A cambio, nosotros quedaríamos libres de nuestra condena.
Nada más empezar, apareceremos en un punto aleatorio del gigantesco mapa gracias a una nave. La cual, nos ofrecerá nuestros primeros utensilios (un machete y poco más) aunque, en muchas ocasiones, esta nave «desaparece» así sin más y sin poder obtener los objetos principales de supervivencia, complicándonos bastante nuestra misión en la isla.
A lo largo del mapa podremos encontrar cajas de suministros con armas (difíciles de encontrar), vestimentas, objetos y munición para hacernos la tarea algo más fácil. Además, si estamos jugando online, cada vez que muera alguno de los jugadores de la partida, este dejará caer una mochila con todos sus utensilios. No os estamos hablando de que le robéis, sino de que sobreviváis, que no es lo mismo.
Aunque, al igual que nosotros podemos hacerlo, el resto también. Y siempre que nuestro personaje muera, apareceremos en la isla con otro distinto. Pero hay un punto que es clave en el título, siempre que salgamos y volvamos a entrar al juego, sin haber muerto, mantendremos todos nuestros objetos.
Aunque la cosa trate de dinosaurios y cuente con bastantes de ellos, a su vez peca de ser bastante escaso disponiendo, solamente, de un total de cinco especies que a su vez, se dividen en diferentes variaciones. Contaremos con la participación del impresionante Tyrannosaurus rex, Triceratops, Utahraptor, Quetzalcoatlus y el famoso Velociraptor. Una cantidad considerable y pequeña por partes iguales teniendo en cuenta todos los conocidos hasta la fecha, echando en falta muchas más especies y variedad de ellas.
A diferencia de otros títulos del género, el equipo de desarrollo nos lo pone bastante «fácil» a la hora de sobrevivir en Primal Eden. Primero, por la falta de necesidad de comer de nuestro personaje o de dormir; y segundo, por la poca dificultad que el título nos ofrece. Obviamente, si nos encontramos con alguno de los dinosaurios presentes sin tener una buena arma con la que hacerle frente, nuestras horas están más que contadas. Pero si no encontramos ninguno, podemos llegar a deambular por la isla recogiendo objetos durante bastante tiempo, sin llegar a toparnos con ninguna de estas criaturas (por muy difícil que parezca de creer).
El gigantesco Tyrannosaurus Rex
Sin duda alguna, el aspecto gráfico es lo mejor de todo el título. TheHunter Primal nos sumerge en un entorno agradable, bien diseñado y recreado, y con multitud de zonas llenas de muy variada vegetación. Tendremos bastante diversidad en escenarios y detalles, así como diferentes lugares como bosques, montañas y ríos.
A pesar de ser el punto más fuerte, las texturas pierden calidad en niveles intermedio-bajo dejando una visión del juego poco agradable, pero siguiendo su línea y ofreciendo variedad en ambientación. A su vez, también cuentan con bastantes problemas a la hora de las cargas y renderización de las mismas, llegando en ocasiones a quedarse a medias, o directamente sin cargar. Problema que se soluciona ajustando funciones en gráficos.
La calidad en rangos altos de rendimiento es todo un espectáculo visual para el jugador, sobre todo en la recreación de los dinosaurios más temibles de todos los tiempos. Aun así no llega a ser un gran portento visual a diferencia de otros del mercado, pero sí es capaz de cumplir con su cometido y contentar al usuario.
Otro factor que juega bastante a su favor, es el del sonido. Los efectos sonoros tienen una buena función dentro de este entorno, ofreciendo una sensación de soledad bastante atrayente y de tensión. Además, de que si jugamos con cascos, esta experiencia se hace más agradable debido a los rugidos y ruidos que podremos escuchar durante nuestro camino, así como los dinosaurios.
Cazando solo o en compañía
TheHunter Primal cuenta tanto con modo un jugador como con modo multijugador, ambos están conectados entre si. Desde el principio del juego, podremos escoger cómo jugar, si en solitario o en compañía. Para ello, simplemente tendremos que buscar una partida online o crear nosotros una y esperar a que la gente se vaya uniendo. Pero si lo que queremos es jugar nosotros solos, lo único que tendremos que hacer es disminuir la cantidad de jugadores a uno o hacer una partida privada.
Jugar solos al principio no está nada mal y se hace entretenido, ganando un poco más de dificultad, pero como mejor se disfruta es acompañado con gente para así completar objetivos y olvidar la sensación de soledad que tendremos a lo largo de todo el juego.
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Conclusión de TheHunter Primal
Avalanche Studios y Expansive Worlds nos traen un título con una idea muy interesante, pero que por desgracia no consigue cuajar como debería. El planteamiento de los dinosaurios es bueno, ya que nos ofrece la oportunidad de ver algunas de estas gigantescas criaturas en su máximo esplendor, pero a medida que vamos jugando el juego pierde fuelle de forma considerable.
Al principio engancha bastante debido a la necesidad de buscar a todas las criaturas, después se torna en jugar de manera más seria intentando coger objetos y sobrevivir en la isla, pero al cabo de unas cuantas horas jugadas su desarrollo se hace lento y llega incluso a ser repetitivo. No es un título enfocado a todos los públicos, sino que tiene uno muy selecto y determinado.
Lo mejor
- Los dinosaurios.
- El entorno.
Lo peor
- Problemas en cargas de texturas.
- Poca variedad de dinosaurios.
- Muy repetitivo en largas horas de juego.