Cada vez son más los videojuegos que nos permiten ponernos en la piel de los seres malvados que solo quieren encontrar su lugar en el mundo. En este caso, Goblin Stone nos transporte a un pueblo goblin donde estos pequeños seres solo tienen una meta en la vida: acabar con los asquerosos aventureros. Lejos de ser una ironía, lo cierto es que los humanos, enanos y demás calaña están acabando con el mundo por culpa de su egoísmo, su poder desmesurado y sus ansias de sangre goblin. Algo habrá que hacer al respecto…
En las próximas líneas vamos a hablaros sobre un juego que tiene muchas trazas para entretenernos durante horas, pero que en eso precisamente radica su punto más débil: son demasiadas horas.
La piedra de los goblins
El mundo es un lugar cruel y despiadado, especialmente si eres una pequeña criatura verde. Goblin Stone nos pone de protagonista a esta raza que suele ser uno de los enemigos más débiles que hay en los juegos de rol, y no es para menos. En este mundo, en donde los aventureros son despiadados y gobiernas con mano de hierro, tendremos que afrontar la complicada tarea de gobernar todo un poblado.
Esto se consigue consiguiendo la piedra de los goblins, la cual va a ser el inicio de una fortaleza que pondrá en jaque a todas esas razas humanoides tan despreciables. Desde un punto de vista muy humorístico, no solamente veremos a goblins a nuestras órdenes, sino que también tendremos esas típicas razas que odiamos en los RPG como los orcos o los gnolls. De esta manera, Goblin Stone nos propone todo un desafío y es que ponernos de parte de los seres más débiles y con menos recursos no va a ser nada sencillo.
Un roguelite con muchos más elementos
A pesar de que el juego está catalogado como un roguelite, este es uno de los aspectos que más se va a utilizar… o no, me explico. El combate y la exploración del mapa se realizará mediante este formato, y es que deberemos escoger caminos que se van a generar aleatoriamente, pudiendo conseguir recursos, objetos, experiencia… hasta el jefe final de la sección. Esto puede comernos un gran número de horas y es que para poder ir avanzando en la historia del juego deberemos derrotar y explorar mucho, pero no está aquí su punto fuerte. La base, donde tendremos nuestra Goblin Stone, será la que realmente se llevará muchas horas, aunque como digo depende más bien de nuestro estilo de juego. Si te gusta la gestión y el farmeo, vas a necesitar muchísimas horas, demasiadas, para avanzar en la base.
La base se va a gestionar algo parecido al Fallout Shelter, donde vamos a ver un corte transversal de la tierra en donde podremos excavar para crear distintas habitaciones. De esta manera, podremos acomodar a los goblins y a nuestros aliados, crear guilds para mejorar sus clases/categorías, habitaciones donde crear mejores goblins… Un poco de todo. Sin embargo, vamos a necesitar no solamente atraer nuevos goblins para poder mejorar, sino una ingente cantidad de materiales por no hablar de almas, que estas se consiguen con goblins derrotados o retirados del combate.
Las categorías que hay a disposición de nuestros combatientes están bastante bien diferenciadas, teniendo un poco de todo. Así, tendremos al típico tanque, los DPS que hacen mucho daño pero aguantan poco… También encontramos que los goblins van a poder realizar magia, aunque hay que decir que en este caso sí que no hay mucha variedad.
El combate se desarrolla en fila, escogiendo en cada caso su posición en la cola y después la acción a tomar, las cuales tienen distintas velocidades. De esta manera, se añade un componente táctico muy grande. Si queremos realizar acciones lentas deberemos poner el tanque delante para que aguante los envites y después el resto pueda actuar, o, si hay acciones rápidas ponerlos de primero para que pasen su turno rápidamente. Como siempre esto significará la diferencia entre el éxito y el fracaso.
En general Goblin Stone tiene una gran variedad de géneros, con toques de exploración, RPG, combate por turnos, roguelite/roguelike, city builder… Aunque para mí gusto se han pasado un poco con la faceta del farmeo y es que para poder mejorar nuestra ciudad y a nuestros pequeños grandes guerreros vamos a necesitar muchas cosas. Esto hace que el desarrollo sea lento y, por momentos, un poco repetitivo porque nos vamos a ver realizando una y otra vez las mismas tareas para poder mejorar la base y, de esta manera, poder avanzar.
Los cuentos infantiles retratados a la perfección
El aspecto gráfico la verdad es que encaja a la perfección con la propuesta y el toque humorístico de Goblin Stone. Tenemos a nuestra disposición un punto de vista distinto, con los héroes como auténticos villanos, haciendo que la historia en formato cuento tenga un punto extra. Si a esto le añadimos dibujos pintados a mano como encontraríamos en los cuentos infantiles de antaño pues casa todo a la perfección.
En cuanto al sonido, la verdad es que está bastante bien, con nuestro narrador poniendo la guinda del pastel. Eso sí, hay que tener en cuenta que la música corre a cargo de Peter McConnell, que entre su haber tiene trabajos para Heartstone y Lucas Arts, casi nada.
Conclusiones de Goblin Stone
El juego de Orc Chop Games nos va a tener un buen número de horas pegadas a la pantalla, siendo este también uno de sus puntos débiles. El farmeo que vamos a necesitar para poder avanzar en su historia es excesivo en muchos puntos.
La jugabilidad es divertida, las posibilidades de la base son muy grandes y el apartado técnico casa a la perfección, por lo que es un juego más que recomendable para cualquier amante de estos géneros. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en determinados momentos vamos a necesitar armarnos de paciencia, ya que la aventura es larga, ardua y pelear contra esos malditos aventureros nunca es tarea sencilla.
The Review
PROS
- Realmente divertido en su humor
- La estrategia está siempre muy presente
- Una enorme base para mejorar y mucho que hacer
CONS
- Puede llegar a ser algo repetitivo con el paso de las horas
- El farmeo es excesivo a veces