Tras mostraros cómo lucen la alfombrilla gaming Genesis Boron 700 y su compañero perfecto, el ratón Genesis Krypton 700, va siendo hora de completar el círculo y de mostraros el acompañante que la marca nos ha dado para ello, el headset Genesis Radon 600, un dispositivo con sistema virtual 7.1 e iluminación LED en rojo que tiene algunas características poco conocidas. Os lo contamos todo a continuación.

Antes de nada agradecer a la marca la confianza depositada en nosotros una vez más.

Características principales

Como es habitual, vamos a dejar que sea la propia marca la que nos hable sobre sus principales bondades.

Como podemos ver estamos ante un headset orientado al gaming, el cual no solamente lleva hardware para tal sino también una decoración a la medida, con luces LEDs en color rojo en sus cascos y el micro. Cuenta con una pequeña tarjeta de sonido que nos ayudará a poder utilizar su sonido virtual 7.1, todo ello con unos altavoces de 50 mm. y una frecuencia de respuesta que se sitúa entre los 20 y los 20.000 Hz.

El headset se conecto mediante USB, y viene acompañado de un software que nos permitirá configurarlo a nuestro gusto.

Unboxing

El Genesis Radon 600 continúa con la apariencia del resto de componentes gaming de la marca, llegándonos en una caja donde predomina el color negro con ciertos toques de color rojo, los cuales hacen que destaque, más si cabe, la iluminación que nos trae y que podemos ver en su parte frontal de la caja. En uno de los laterales nos encontramos algunas de sus funciones más importantes, como la mentada iluminación, el uso de una mini tarjeta de sonido o que podremos usar sonido 7.1 virtual. Por detrás nos encontramos  un resumen más extenso de sus capacidades en distintos idiomas. Una vez retiramos el cartón exterior vemos otra caja, esta vez solamente decorado con el logo de la marca en gigante, y dentro el Genesis Radon 600.

Una vez retiramos el dispositivo de la caja de cartón, el cual viene «colgado» en una percha para que no se mueva durante el viaje y no sufra golpes, nos encontramos con el resto de extras del paquete, un pequeño manual de instrucciones y pegatinas con los logos de la marca. Una vez tenemos todo fuera, estamos listos para comenzar a probar el Genesis Radon 600.

Genesis Radon 600

Una de las primeras cosas que nos ha llamado la atención al ponernos el headset es que hay mucho espacio para nuestras orejas, haciendo que la diadema apriete muy poco nuestra cabeza. A pesar de que pueda parecer un problema, este efecto está creado a propósito y es que tal y como nos han comentado desde la marca de esta manera consiguen que el headset pueda ser utilizado durante horas sin que sintamos la presión en las orejas. Esto tiene puntos tanto positivos como negativos y es que efectivamente, tras un par de horas de uso el Genesis Radon 600 se sigue sintiendo liviano y sin que demos señales de fatiga o sobrecalientamiento, pero por contra también tendrá un aislamiento menor de los ruidos a nuestro alrededor. Esto puede no ser un problema si estamos solos en la habitación o no hay ruido, pero es algo a tener en cuenta si lo vamos a utilizar en situaciones con cierto nivel acústico adverso.

Dejando esta parte clara podemos comenzar a desgranar los materiales y acabados del Genesis Radon 600, donde vemos que se ha optado casi en su totalidad por el uso del plástico, especialmente en la parte de la diadema. Eso sí, hay que alabar el trabajo a la hora de ocultar el cableado y es que no tendremos problema ninguno en este sentido, no dejándose ver por ningún lado. Para acabar con la diadema hay que destacar el acolchado de la parte de arriba, prácticamente inexistente, aunque siendo sinceros es algo que tampoco es necesario ya que, como decíamos, aprieta poco y no es necesario un mayor acolchado.

Siguiendo con esta lógica, el acolchado de los auriculares también cumplen sobradamente, aunque como ya dijimos son bastante grandes y no aprietan demasiado, por lo que esto se ve reflejado en el aislamiento acústico. A la hora de escribir estas líneas estamos usando los Genesis Radon 600 con Spotify a un volumen normal, y escuchamos sin problema alguno el claqueteo de nuestro teclado (hemos de decir que el Razer Blackwidow Chroma X hace mucho ruido), aunque en general cumple bien con su función.

En cuanto a la iluminación en un headset nos parece algo poco práctico, ya que cuando los estás usando ni la vas a poder ver en los auriculares, aunque si lo que buscáis es un toque de estética reconocemos que el símbolo de Genesis en rojo en los laterales le da un punto minimalista pero que destaca muy bonito. En cuanto a la iluminación del micro cumple un poco más y es que tiene cierta utilidad ya que nos sirve como punto de referencia. El micrófono en tono generales cumple bien son su función, teniendo un brazo totalmente maleable que nos permitirá ponerlo en la posición que queramos, incluyendo la de subirlo para que no moleste si no lo vamos a usar, pero siendo lo suficientemente rígido para que no se mueva de la postura en la que lo coloquemos.

Antes de hablaros sobre nuestra experiencia con el sonido de los Genesis Radon 600 nos gustaría hablar antes de su comodidad de uso y es que sí es cierto que podremos utilizarlos durante horas sin que prácticamente los sintamos. Eso sí, no hubiera estado de más añadir un cuadro de mandos en el cableado, como suele ser habitual, ya que solamente encontraremos en el auricular izquierdo una pequeña rueda trasera que regule el volumen, quedando totalmente olvidado el micro por ejemplo, para el que no tendremos ninguna opción para mutearlo fácilmente.

En cuanto a su uso lo cierto es que hemos quedado muy satisfechos de cómo suenan. Sus altavoces de 50 mm. nos dan un sonido claro con potentes graves, sobre todo si utilizamos su software de gestión para poder exprimirlos al máximo. Entre esto destaca su sistema virtual 7.1, el cual hace uso de la pequeña tarjeta de sonido integrada, la cual ni destaca ni se queda atrás en cuanto a la competencia, notándose en FPS o juegos donde el posicionamiento del sonido sea importante.

Software

Con un pequeño programa que nos ofrece un buen número de opciones podremos configurar a nuestro gusto las distintas funciones del Genesis Radon 600. Este mismo software ya lo hemos visto en otros dispositivos, añadiendo en esta ocasión un aviso al principio que nos parece muy importante, y es que tendremos que hacer clic derecho en las imágenes de los altavoces o del micro para poder sacar todas sus opciones.

Para empezar nos encontramos con los valores habituales como son el control del volumen, pudiendo hacer que se escuche más en un auricular que en el otro, la frecuencia de muestreo que nos permite escoger entre 44.1 y 48 KHz y el ecualizador.

Seguimos adentrándonos entre las opciones y lo primero que nos encontramos son los efectos de entorno, donde podremos imitar estar en un baño, en un auditorio o en karaoke por ejemplo, pudiendo también gestionar las dimensiones del lugar. Lo siguiente que nos encontramos es el sistema 7.1 virtual, permitiéndonos escoger dónde localizaremos los 7 altavoces que el dispositivo puede imitar. Por último en esta ronda de imágenes nos encontramos con el Xear SingFX, que nos deja entonar ciertas notas que de otra forma no alcanzaríamos y hacer un fading a nuestra voz.

En las últimas imágenes nos encontramos el Xear Surround Max, que crea experiencia 7.1 a partir de sonido estéreo, el control del volúmen y el uso del Xear SingFX para el micrófono (permitiéndonos camuflar nuestra voz como si fuéramos un monstruo, un pato o cambiando nuestro sexo).

Como decíamos, el Genesis Radon 600 viene acompañado de un programa sencillo y que nos permite configurar el dispositivo a nuestro antojo.

Conclusiones

Tras utilizar durante muchas horas este headset de Genesis nos ha quedado claro los grandes pros y contras de este dispositivo. Por un lado tenemos un sonido que funciona muy bien, con graves fuertes y sonido claro, así como una estética minimalista que luce perfecta con sus LEDs tanto en los laterales como en su micrófono. Por otro lado tenemos un uso de materiales donde impera el plástico, con la falta de un mando que nos ayude a poder mutear el micro fácilmente (os recordamos que el sonido podemos subirlo o bajarlo con una pequeña rueda situada en el casco izquierdo).

En cuanto a su insonorización sois vosostros los que debéis juzgar si es un punto a favor o en contra, ya que dependerá mucho bajo qué circunstancias de ruido alrededor nuestra lo usemos. Por todo esto y lo anteriormente citado, otorgamos el galardón de prestaciones al Genesis Radon 600. Podéis encontrarlo en Xtremmedia a un precio de 50,80€.