Gigabyte Brix GB-XM12-3227 [Review, unboxing y montaje]

Como bien sabéis, además de amantes de los videojuegos somos amantes del multimedia, y los pcs ultra compactos nos encantan. Anteriormente hemos analizado varios modelos de ellos, siendo el último el Zotac Zbox ID92 Plus con un resultado brillante, y en esta ocasión nos vamos a poner manos a la obra con la variante de dichos ultra compactos de Gigabyte, en concreto el Gigabyte Brix GB-XM12-3227.

Para comenzar con el análisis, os vamos a dejar con el vídeo del unboxing y montaje de la memoria RAM y mSATA.

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Como la palma de la mano

Como habéis podido ver en el vídeo, el Gigabyte Brix GB-XM12-3227 es un pc ultra compacto que hace buen uso de dicho término, puesto que con las medidas de 11,5 cm x 11 cm y su diseño ultra delgado de apenas 3 cm de alto, se postula como uno de los ultra compactos más pequeños del mercado. Dicho tamaño podría acarrear problemas en cuanto a temperatura, pero el Gigabyte Brix GB-XM12-3227 incorpora un sistema de disipación bastante aceptable que permite que se mantengan estables en todo momento. Más adelante mostraremos unas pruebas de rendimiento para que podáis observar.

El acabado del Brix, como el resto de dispositivos de Gigabyte, está tremendamente cuidado. Se ve sumamente elegante con su superficie en negro, con una lámina de metraquilato y el logotipo de la marca impreso sobre ella. El cuerpo del mismo es completamente de aluminio, por lo que el calor se disipa a la perfección y da una sensación de robustez mucho mayor. Quizás el punto débil es que el conector de corriente es incluso más grande que el propio Brix, pero eso no es achacable a Gigabyte (¿llegarán a poder reducir el tamaño de los transformadores de corriente alguna vez?).

Potencia para lo que necesites

Este modelo en concreto, incorpora un procesador Intel Core i3-3227U, de doble núcleo y con capacidad de llegar a 1,9GHz, que va montado sobre una placa propia de Gigabyte con el chipset Intel HM77. La placa está preparada para albergar memorias mSATA, por lo que la memoria interna del dispositivo será a través de dicho formato, y además soporta hasta 16 Gb de memoria RAM en formato SO-DIMM DDR3 a un máximo de 1600 MHz, albergados en dos ranuras. Este modelo en concreto no viene ni con memoria RAM ni con la memoria mSATA, por lo que quedaría a nuestra elección el montarle la opción que creamos conveniente, y en nuestro caso, hemos optado por 2 memorias Corsair de 8 Gb de RAM cada una y una memoria mSATA de 250 Gb para hacer todas las pruebas.

 

El rendimiento del procesador es bastante aceptable, como veremos en las pruebas que realizamos a continuación, permitiéndonos la reproducción de vídeos en Full-HD sin problema ninguno. No así con el apartado gráfico, ya que incorpora una gráfica integrada sencilla Intel HD 4000, por lo que podemos descartar este dispositivo como ordenador de juegos. Aun así, la potencia que nos brinda de procesamiento, lo convierten en un dispositivo bastante notable en el apartado multimedia.

En cuanto a conectividad, el Brix nos brinda conexión inalámbrica a través de una tarjeta WiFi integrada con conectividad 802.11N y la conexión por Bluetooth 4.0. La tarjeta inalámbrica es interna y no tiene conexión externa, por lo que podría verse reducido el radio de alcance de la señal WiFi, pero hemos hecho varias pruebas y apenas lo hemos notado.

Conexiones suficientes

En cuanto a conexiones, el Gigabyte Brix GB-XM12-3227 no se aleja mucho de sus competidores, ofreciendo los puertos básicos para un uso normal. Estos son:

Tener el puerto USB 3.0 en el frontal nos sirve de gran ayuda si queremos aprovechar el tamaño del dispositivo para colocarlo en un lugar poco accesible. Además, la incorporación del Mini DisplayPort nos permite conectar un segundo monitor al mismo, dado que la capacidad de la tarjeta gráfica así lo admite, lo que ayuda en gran medida si decidimos utilizarlo como puesto de trabajo.

Primeras impresiones

Como hemos dicho anteriormente, uno de los puntos fuertes que tiene este Gigabyte Brix GB-XM12-3227 es el diseño. La sensación al sacarlo de la caja y poder coger el pc con la palma de la mano es estupenda. Además, los materiales en los que está fabricado están muy refinados y son muy elegantes. Y si a eso le sumamos el escaso peso, lo convertimos en el pc ultra compacto perfecto. Aunque quizás sea eso lo que haga que el Brix flaquee en un punto, y es que las conexiones que incorpora son sólo suficientes, puesto que pensamos que debería incorporar algún puerto USB más, por ejemplo.

Una de las cosas con las que no podemos estar de acuerdo es la manía de ciertos fabricantes por incorporar los drivers del sistema en formato físico, cuando el dispositivo no tiene lector de DVD. En este caso Gigabyte no es una excepción (como sí lo fue Zotac), por lo que si tenemos que instalar el sistema de cero, probablemente necesitemos de otro ordenador para poder pasar los drivers a una unidad digital antes de poderlos instalar. Aun así, para nuestro análisis, este paso nos lo ahorramos.

El sistema operativo con el que hemos trabajado es Windows 8.1, aunque en la memoria mSATA que nos presta Gigabyte viene instalada también una distribución de Ubuntu preparada con XBMC para el disfrute del dispositivo como centro multimedia. Nosotros para hacer las pruebas de rendimiento, hemos optado por el sistema de Microsoft.

Decir que el sistema tarda apenas 5 segundos en arrancar al completo, con todas las aplicaciones necesarias abiertas desde el principio, lo que es un lujazo si estás acostumbrado a un arranque de un pc convencional. Además, moverse por el sistema operativo, abrir carpetas, programas… se convierte en una tarea bastante agradable, hasta el punto que no notamos que el procesador utilizado es un i3 a apenas 1,9 GHz.

Pruebas de rendimiento

Como siempre, la costumbre en exprimir la máquina nos hace que la pongamos en un aprieto en alguna que otra prueba de rendimiento. Mostramos los resultados a continuación, así como un cuadro de temperatura durante las pruebas.

Cinebench

Durante el test con Cinebench podemos evaluar la carga de la CPU, además de la gráfica con OpenGL. Como vemos en el gráfico, nos sitúa el rendimiento de la CPU un poco por debajo de un i5 de baja gama.

3DMark

El software 3DMark ha sido lanzado de una sola pasada, realizando todas las pruebas tanto gráficas como de rendimiento, y la verdad es que no ha obtenido un resultado por debajo de lo esperado.

Podéis ver el análisis completo a través de esta dirección: http://www.3dmark.com/3dm/3955233

Prueba de temperaturas

Respecto a las temperaturas alcanzadas por la máquina, la verdad es que es lo que más nos ha asombrado.

El microprocesador Intel Core i3-3227 es capaz de aguantar temperaturas de hasta 105ºC, y como podemos ver en la tabla, no ha alcanzado más de 61º, por lo que estamos ante un dispositivo que refrigera muy bien el calor.

Conclusiones

Una vez más, nos encontramos ante un dispositivo enfocado al multimedia y trabajo de oficina. El Gigabyte Brix GB-XM12-3227 tiene potencia suficiente para poder visualizar cualquier tipo de contenido multimedia a una resolución de Full-HD sin despeinarse, por lo que va sobrado en ese aspecto. Pero como no le podemos pedir peras al olmo, el Brix no está enfocado a trabajos que requieran una alta capacidad de procesador, ya que sus 1,9 GHz en doble nucleo lo limitan bastante. Una configuración como la que mostramos en el análisis hace que tengamos un buen equipo para el salón. Además, teniendo en cuenta su precio, rondando sobre los 250€, lo hacen una muy buena compra.

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