God of War III Remasterizado. Análisis PS4

God of War III Remasterizado

Parece que a Kratos no le fue suficiente con acabar con los dioses del Olimpo en una ocasión, así que ha decidido repetir la hazaña esta vez en Playstation 4 con un apartado técnico que nos hará sentir una auténtica deidad a los mandos de nuestra consola de última generación de Sony. God of War III Remasterizado desembarca en Playstation 4 y nos ha dejado con la boca abierta a pesar de haberlo disfrutado hace ya unos años en Playstation 3.

Mismo juego, cambio de plataforma

El que habitualmente es el principal motivo de compra de una remasterización, la mejora a nivel técnico y la inclusión de todo el contenido adicional ya lanzado, se diluye un poco en God of War III Remasterizado, ya que la versión original de Playstation 3 era un título que exprimía al máximo el potencial de la tercera generación de consolas Playstation.

En God of War III Remasterizado cerramos la historia de Kratos con su batalla frente a los dioses del Olimpo, como ya hicimos en Playstation 3. Y es que aquí radica una de las mayores pegas de esta remasterización, no nos ofrece apenas ninguna novedad jugable con respecto a la entrega original. Esta falta de nuevo contenido hace que sigamos estando ante un juego cuya historia podemos superar en apenas 8 o 10 horas.

A pesar de esto God of War III Remasterizado mantiene esa jugabilidad que lo hace uno de los mejores exponentes del género Hack’n’slash pero sin descuidar los puzles, que en esta tercera entrega tienen menos peso en la historia que en sus entregas previas.

La falta de nuevo contenido añadido a que el God of War III original de Playstation 3 ya era un juego muy solvente a nivel gráfico nos hace preguntarnos si a pesar de las mejoras que existen en la versión remasterizada era necesario este port para Playstation 4.

Playstation 4 comandada por dioses

A pesar de la continua guerra de resoluciones que se está librando entre Playstation 4 y Xbox One, God of War III Remasterizado demuestra parte de la capacidad de la consola de Sony alcanzando los 1080p y un framerate de 60 fps de manera regular y que en muy pocas ocasiones sufre bajadas.

Esto se consigue en parte gracias a que la cámara del juego estará fija en todo momento por lo que nuestras perspectiva del escenario no cambiará hasta que no avancemos por el mismo. Así se aprecia mucho más el trabajo realizado con las partes secundarias de los escenarios.

Este hecho también limita una de las novedades que trae esta remasterización, nos referimos al modo fotografía, que nos permite guardar los mejores momentos del juego, los escenarios más espectaculares o cualquier cosa que aparezca durante nuestra sesión de God of War III Remasterizado.

A pesar de que, como hemos dicho antes, los escenarios están muy trabajados, algo que se aprecia mucho más gracias a la mejora gráfica posible en Playstation 4, el no poder mover la cámara a nuestro antojo limita bastante el modo fotografía y nos impide disfrutar en profundidad de un diseño que roza la excelencia.

También hay un aspecto a nivel gráfico que no termina de encajar dentro de un título visualmente tan trabajado como es God of War III Remasterizado, se trata de las escenas cinemáticas donde sí podemos apreciar que el trabajo de remasterización no ha sido tan intenso como en el resto del juego o apenas se han retocado.

El apartado sonoro tampoco muestra grandes cambios entre la versión original y la remasterizada y, como ya sucedía en Playstation 3, es un gran trabajo más que en la música en los efectos sonoros de las batallas que junto a la gran cantidad de sangre nos hacen enfrentarnos a unos combates muy impactantes.

Un Kratos muy manejable

Si nos centramos en el aspecto jugable de God of War III Remasterizado nos pasa algo similar como lo que sucede con su narrativa, estamos ante un título muy bueno en estos aspectos, hasta el punto de que no necesita que se le hagan retoques que puedan comprometer su buen funcionamiento.

De esta manera el control que tenemos sobre Kratos sigue respondiendo igual de bien que en el año 2010, cuando se lanzó la versión original. Esto nos permite, como ya era posible antes, realizar una infinidad de combos cambiando de armas durante el mismo combate con solo pulsar un botón y llenar el escenario con la sangre de nuestros enemigos.

Conclusión de God of War III Remasterizado

God of War III ya era un gran título cuando se lanzó en el año 2010 para Playstation 3 y aunque el trabajo realizado, sobre todo visualmente, con God of War III Remasterizado ha sido muy bueno es un claro ejemplo de que no por tener mejor aspecto visual estamos ante un videojuego mejor y que en ocasiones no es necesaria la remasterización.

Echamos en falta alguna novedad más allá del modo fotografía, aunque también agradecemos que se mantenga la buena jugabilidad en esta remasterización.

En definitiva estamos ante la versión mejorada, solo visualmente, de uno de los imprescindibles de Playstation 3 pero que no trae nada nuevo para aquellos que ya lo disfrutaron en el momento de su lanzamiento.

A pesar de esto es la oportunidad perfecta para que aquellos que todavía no hayan vivido estas aventuras divinas gocen de Kratos en su mejor versión.

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