Al reciente anuncio de que Nintendo distribuirá de manera oficial en Japón, la WiiU premium en color blanco para el próximo 13 de Julio, se le suma lo que está dejando de ser un secreto, y es que el modelo WiiU Básico está condenado a desaparecer. ¿Que por qué decimos esto? Pues muy sencillo, hemos conocido un comunicado enviado por Nintendo a varias cadenas de tiendas occidentales donde se les solicita el stock de WiiU básica:
«Nintendo Wii U Basic Recall – Two Week Preparation On Tuesday, 6/18, all stories will need to return all new/unopened Wii U Basic (020359). .. Stores that have 10 or more in stock will receive shipping cartons from the [distribution center]. .. All other stores will need to save shipping cartons for this recall.»
En efecto, el próximo 18 de Junio se procederá a la recogida y esto denota que los 3GB de memoria interna disponibles en WiiU y las futuras actualizaciones que Nintendo podría tener en mente, así como las de los propios juegos, están derivando en que dicha memoria se antoje bastante más corta de lo que ya de por sí es, máxime cuando la actualización 2.1 del sistema ocupa unos 700MB o incluso la primera de todas que llegó a superar la barrera de los 2GB, por lo que Nintendo se está viendo obligada a dejar de comercializar el modelo básico en aras de evitar posibles problemas con futuras actualizaciones y lo más importante, que desincentive la compra de juegos a través de la eShop.
Sea como fuere, es evidente, que con el diseño actual de WiiU, a lo sumo podrían añadir en un futuro una memoria flash de 64GB o incluso de 128GB (cuando los costes de producción lo permitan) por lo que el modelo básico no tiene ningún atractivo a día de hoy. Además y para aderezar el cóctel, también podrían lanzar un rediseño de la consola (algo más grande) que incorpore un disco duro de 1,8 pulgadas o a la sumo 2’5 pulgadas de mayor capacidad (500GB por ejemplo) para así evitar todos estos problemas de almacenamiento y fomentar la compra online pero como todos ya sabréis, es demasiado pronto para algo así, por lo que la solución de eliminar el modelo básico es de momento la más razonable.
Dicho todo esto, el procedimiento será muy sencillo, las tiendas con muchas unidades, recibirán unos cartones con los que embalarán la WiiU básica y será reenviada a Nintendo. Allí, en sus instalaciones, podrán hacer dos cosas, o añadirle un videojuego para hacer el pack más atractivo y liquidarlo o bien, abrirán la WiiU básica, extraerán la paupérrima memoria de 8GB (3GB disponibles para el usuario) y será reemplazada por una de 32GB (29,8GB disponibles). Ahora bien, aunque la primera opción es la menos arriesgada y rápida (es un simple «refurbished» o reempaquetado), hay que recordar que las cifras de ventas de WiiU no son excesivamente altas y además, es precisamente el modelo básico el que más adolece este problema pero claro… si eligen la opción 2 (sustituir la memoria de 8GB por la de 32GB) surge la duda de qué harán con los usuarios que adquirieron el pack básico si deciden para mejorar el sistema, lanzar actualizaciones de más de 3GB… ¡Todo un dilema como el lector habrá podido percatarse!
En cualquier caso, y parafraseando a Tolkien, Nintendo ha tenido que pensar en algo como esto ante la inminente llegada de PS4 y XBOX «Juan»:
«Un Anillo para gobernarlos a todos, un Anillo para encontrarlos, un Anillo para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas.»
¿Y vosotros que opináis? Ahora que no hay diferencias de capacidad qué WiiU ¿cuál os gusta más? ¿La blanca? ¿La negra? ¡Se abre la veda!