Si alguien dudaba que todo el caso relacionado con la caída del servicio de PlayStation Network no fuese a ser un problema a largo plazo, Sony hace públicos los datos que confirman la debacle.
Al parecer la cifra de pérdidas totales por tener el servicio de juego online así como los daños ocasionados por todo el embrollo ataque hacker-robo de datos confidenciales-25 días con el servicio de juego online cerrado, rondan los 120 millones de euros dentro del computo anual…casi nada. Es decir, Sony prevé un año con grandes pérdidas económicas.
Lo peor del asunto es que Sony avisa a sus inversores de que estas previsiones pueden ser incluso superiores a lo estimado.
«En base a la información disponible en estos momentos, los costes asociados con el acceso no autorizado a la red se estiman en aproximadamente 14.000 millones de yenes para el año fiscal que terminará el 31 de marzo de 2012″
La cifra total de 14.000 millones de Yenes equivale a unos 122,67 millones de euros al cambio de moneda actual.
Además debemos añadir «aproximadamente 5.000 millones de yenes como impacto por la pérdida en márgenes netos asociados al descenso en las ventas derivados del terremoto» que destruyó Japón.
Los acontecimientos que detallan estas pérdidas ocurrieron en el mes de abril, lo que supone que su repercusión financiera no será tangible en las cuentas que se cerraron en el mes marzo.
Sony estima que las pérdidas ascenderán a un total de 2.245 millones de euros para todo el año fiscal que les ocupa.
Como consumidores de un producto está claro que los problemas económicos de la empresa no deben preocuparnos, queremos un artículo y pagamos por ello. Sin embargo, el hecho de que una compañía de videojuegos tenga dificultades económicas terminaría afectando a la larga a los consumidores. Recordemos lo ocurrido con Sega y su Dreamcast. Por suerte hablamos de una compañía con capacidad más que suficiente para reponerse del varapalo sufrido.