Tarde para la ira. Crítica

Tarde para la ira

Poco a poco comienza a extinguirse en taquilla el «blockbuster veraniego» el cual se despide hasta el próximo año, este periodo estival concretamente nos ha dejado con más sinsabores que alegrías; esta época de transición en la que nos adentramos, es el mejor momento de exposición para proyectos indefinidos o que intentan buscarse un hueco entre los grandes nombres. Tarde para la ira, hace acto de presencia con fuerza, pero sin hacer demasiado ruido.

Raúl Arévalo se pone al frente de la dirección y trae consigo bastante del set de rodaje de La isla mínima (2014), el entorno rural, la veracidad, a Antonio de la Torre y a él mismo (Raúl Arévalo), así pues, la cosa pinta bien. Tarde para la ira, es un thriller sobre la venganza y lo impredecible de la violencia, es como un tranquilo paseo rural interrumpido por un buen golpe intestinal, desde luego el director se estrena con decisión y muy posiblemente veamos al film entre las películas favoritas en los próximos Goya. El guión corre a cargo de Raúl Arévalo y David Pulido; el reparto está compuesto por: Antonio de la Torre, Luis Callejo, Ruth Díaz, Raúl Jiménez, Alicia Rubio, Manolo Solo, Font García.

Sinopsis:

Curro tras un atraco fallido en el cual es el único detenido, entra en prisión. Ocho años después sale de la cárcel más o menos rehabilitado y con ganas de emprender una nueva vida junto a su familia, lo que él no podía imaginar es que un desconocido llamado José le involucraría en una situación tan inesperada como atroz.

Tarde para la ira. Crítica

https://www.youtube.com/watch?v=6ZFaGgG2UD0

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