Cuando Kenneth Branagh decidió realizar la versión cinematográfica de “Thor” en el año 2011, muchos de nosotros salimos un poco/bastante decepcionados, ya que no era lo que habíamos visto o leído fielmente en los cómics, era algo más soso o falto de chispa como consecuencia de no tener un «malvado» como jefe final (exceptuando a Loki). A cambio nos mostraron una ciudad de Asgard rebosante de originalidad con su esperado Puente de arco iris, instrumento de unión entre mundos. Al final ésta resultó ser una película de transición para preparar “Los Vengadores” que llegarían unos años después arrasando la ciudad de Nueva York con una batalla épica entre Hermanos/Dioses.
Siempre he dicho que tanto “THOR” como “Linterna Verde” de DC cómics iban a resultar más que difícil llevarlas a la gran pantalla, y no me equivoqué. Tanto el Dios del martillo como el humano de la lámpara y el anillo no triunfaron en las salas de cine como se merecían. Innovaron demasiado y el público no estaba preparado, acostumbrados a superhéroes mundanos caminando por calles de NY o de Metropolis/Gotham.
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Dos años después, “THOR: El Mundo Oscuro”, parece que ha sabido contentar a la mayoría de fans de Marvel, con una duración correcta pese a su lento inicio y dándonos acción a raudales gracias a unas batallas intergalácticas entre el ejército de Asgard y los Elfos Oscuros, al más puro estilo “Star Trek”o “Star Gate” (todo un acierto poner a Malekith como enemigos supremo de todo el cosmos). Se atisba un rayo de esperanza para confiar en la fase 2 de Marvel tras la decepcionante IronMan 3.
Si algo hizo bien Kenneth en su primera parte era introducirnos Asgard como esa ciudad perfecta, llena de luz, que se nos presenta de nuevo en su segunda parte con mucho más detalle, metiéndonos de lleno como un habitante más de la ciudadela dorada.
Vuelve a repetir todo el reparto de la primera parte con Chris Hemsworth y Tom Hiddleston a la cabeza, seguido de Natalie Portman, Anthony Hopkins, Idris Elba (el cual tiene mucho más protagonismo con su personaje de Heimdall) y Jamie Alexander (que suena bien fuerte para ser la próxima Wonder Woman de DC/Warner, y con razón).
Para finalizar os planteo una cuestión que durante toda la película se me vino a la cabeza cual flashback y no es otra que: la narración sobre la leyenda de los Elfos Oscuros, ¿no os parece un poco “copia” de lo que nos enseñó Guillermo del Toro, mi cuenta cuentos favorito, en su Hellboy: El ejercito dorado?
Crítica realizada por Álvaro Guti (@alvaro_gg) para Game It.