Daylight, Análisis PC

Continúa la tirada de videojuegos Indie del género de terror. Capitaneados por el pionero de este subgénero, Amnesia: The Dark Descent y su no tan agradecida secuela, A Machine for Pigs, el aterrador y archiconocido Slenderman: The Eight Pages y el apoteósico Outlast, que marcó el techo de calidad en el género. Después de ver todo esto, ¿Quién puede decir que el survival horror está muerto?

Desarrollado por Zombie Studios (Saw, Blacklight Retribution) para PC y PlayStation 4, basado en el motor gráfico Unreal Engine 4, nos llega Daylight, un juego de terror en primera persona que sigue el legado impuesto por el reciente exitoso Outlast y que viene a poner a prueba nuestros nervios de acero con su claustrofóbica apuesta.

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Daylight nos pone en la piel de Sarah, una chica que misteriosamente ha aparecido en medio de un hospital aparentemente abandonado, en la ciudad ficticia de New Kipling. Nuestra protagonista está totalmente amnésica y no recuerda absolutamente nada. Jugando con la misma premisa argumental que Amnesia, deberemos guiar nuestros pasos siguiendo la voz de un misterioso hombre que nos guía a través del comunicador.

La trama, como suele ser tradición en este género, empieza siendo una confusión total, tanto para el personaje protagonista como para nosotros, y se irá desvelando con cuentagotas mediante diálogos clave con nuestra voz guía y las notas en forma de “diario”, cartas de los antiguos empleados del hospital y recortes de periódico que deberemos ir coleccionando a lo largo de nuestra aterradora aventura, que serán clave para nuestro avance, muy inspirado en la técnica de narración de la saga Silent Hill.

Daylight cuenta con una sencilla mecánica, una vez estemos hechos al juego. Tendremos que ir avanzando de zona en zona, para ello, habrá que tener en cuenta tres puntos de referencia: los fragmentos, la sala del sello y la puerta que desbloquea la siguiente zona.

Los fragmentos, vienen en forma de las notas que antes hemos descrito y son precisamente eso, fragmentos de historia del lugar y de la propia Sarah. Deberemos recoger un número concreto de fragmentos, determinado por la dificultad que seleccionamos antes de empezar la aventura (fácil, medio o difícil).

Cuando desbloqueemos todos los fragmentos necesarios, deberemos topar con la Sala del Sello. Que suele ser una sala no muy pequeña llena de unos códigos o letras escritos idioma desconocido, que iluminan la sala entera, rodeando una especie de círculo en la que será invocado el sello del lugar, un objeto común de valor simbólico que representa parte de los recuerdos del lugar y que nos será clave para el avance.

Ahora con el sello en nuestro poder, podremos dirigirnos a la puerta que da la siguiente zona, que estará cubierta en un principio por uno de esos jeroglíficos extraños que rodean el sello. Al acercarnos con él, desbloquearemos la “puerta” y podremos avanzar sin problema.

Estos tres pasos forman el pilar jugable de Daylight, pero no os penséis que todo termina aquí, nuestras andanzas por el hospital no serán precisamente agradables. Más bien porque Sarah, nuestra protagonista, será incansablemente perseguida por unos extraños espíritus de figuras femeninas, llamadas como brujas; y sin aparentemente razón alguna.

Estas brujas tendrán una mecánica similar a lo ya visto con la sombra en Amnesia: The Dark Descent y en el propio Slenderman. Aparecerán de la nada e intentarán perseguirnos para aterrorizarnos con su presencia, con más frecuencia según la cantidad de fragmentos que hayamos encontrado en la zona. Mirarlas fijamente y estar demasiado tiempo cerca de ellas provocará nuestra muerte, así que normalmente será el momento de salir pitando mientras gritamos “piernas, para que os quiero…”

Pero también contaremos con algo de ayuda, en Daylight tendremos dos tipos de consumibles. Como pasaba con los yesqueros en Amnesia, aquí disponemos de barras luminosas, un curiosos objeto que, a parte de la función que todos conocemos de dar luz, servirán para iluminar los elementos que guardan consumibles o fragmentos ocultos. No duran para siempre encendidas, pero si lo suficiente como para iluminar toda la zona en busca de ocultos.

El segundo tipo de consumible serán las bengalas, que tendrán una función más específica. Las bengalas sirven para combatir a los espectros, el fuego de la bengala servirá para ahuyentar a las brujas y hacerlas huir. Un buen salvavidas si nos vemos irremediablemente acorralados por estas y nuestro último estertor, hay que tener en cuenta que será el recurso menos frecuente, por tanto conviene más salir corriendo siempre que tengamos oportunidad, y utilizar la bengala cuando no nos quede otra.

También deberemos tener presente que no podemos utilizar ambos recursos al mismo tiempo, y encender cualquiera de ambos implica que si nos deshacemos de él, no podremos reutilizarlo. Así que deberemos de usar el adecuado en cada momento. Tampoco podremos utilizar ninguno de ambos cuando tengamos el sello en mano, aunque tampoco nos harán mucha falta…

Y por último, nuestra ayuda más fiel, elemento que caracteriza a nuestro personaje y nos permitirá avanzar con mayor facilidad por los entresijos pasillos del hospital de New Kipling, nos dará luz y nos irá haciendo un mapa de la zona, marcando los puntos de interés, como la Sala del Sello, nuestro teléfono móvil.

No es la primera vez que vemos un “arma” así en un juego de terror, en Outlast ya lo teníamos como uno de los elementos más importantes del juego y también en otros no tan conocidos, como Cry of Fear. Siempre tendremos el móvil a mano, aunque aquí, su función no será tan agresiva. El mero hecho de que en la mayoría de las ocasiones sea la luz que ilumine nuestro camino, será lo que nos provocará una sensación psicológica de tranquilidad dentro de ese infierno, adoptando el móvil como un símbolo de esperanza y de falsa seguridad en nosotros mismos y siendo el único motivo, abstracto, por el cual seguiremos adelante.

La duración completa de Daylight es bastante corta, rondando las 2 horas en la primera partida, según el modo de dificultad seleccionado, y media hora en la segunda o tercera sesión de juego. Dado la generación aleatoria de los mapas en cada partida, Daylight crea un motivo para la rejugabilidad. El mero hecho de querer conseguir todos los fragmentos para así completar la terrorífica, aunque ya bastante mascada, historia del juego, ya requiere de más de una partida para así poder hacernos con todas.

Aun por estos motivos, la repetitividad de la mecánica de Daylight, hace que esto no sea suficiente aliciente para empezar un new game en una dificultad más elevada. Suele haber bastantes momentos en los que nos da la sensación de que lo único que hacemos es pasearnos por los largos y cerrados pasillos mientras abrimos puertas, buscando notas de papel, para finalmente, ir del punto A al B sin apenas emoción alguna.

Las apariciones de las brujas quizás son el único motivo por el cual podemos mantenernos ciertos momentos en tensión, si eres una persona susceptible a este tipo de sustos quickly and easy, y la lograda ambientación claustrofóbica con extrañas y profundas voces y ruidos de ultratumba sumados a las interferencias en el móvil pueden ayudar a eso. Aún así, no compensa la tedia jugabilidad de hacer siempre lo mismo, que hará que nos aburramos en varias ocasiones, sobretodo al principio del juego. Esto funcionaba en Slenderman, Daylight requería algo más.

Otro punto negativo del juego son los tiempos de carga, los complicados requisitos que pide el juego, debidos a una mala optimización del mismo, provocan tirones y parones importantes en la tasa de frames mientras el juego esta cargando, volviéndolo totalmente injugable, incluso en PCs de gama media lo suficientemente preparados para arrancar el título y llevarlo a sus configuraciones gráficas más altas; provocando frustración y haciendo que disminuyamos ciertos requisitos en las opciones del juego, para así disminuir los tirones.

Por suerte, Daylight se encuentra ahora mismo a un precio bastante accesible para el público medio, 14,99 €. Aunque es un título que cuenta con sus fallos, nos mantendrá entretenidos durante un rato y puede que nos llevemos más de un susto, si nos encontramos en el ambiente adecuado con el que se juegan este tipo de juegos. Así que si eres un gran fan de este tipo de juegos y te gusta tenerlos todos, hazte con Daylight, aunque existen varias mejores opciones ahora mismo en el mercado.

 

Lo mejor:

Lo peor:

 

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