Desde hace unas semanas los videojuegos están en el punto de mira de gobiernos y organizaciones que los culpan de violentar a la sociedad y, en especial, a la juventud. No es nuevo usar la tecnología como cabeza de turco sobre cualquier cosa que amenace la quietud y armonía de determinados sectores.
En una entrevista realizada al príncipe Harry tras su vuelta de Afganistán, este no sólo defiende, sino que alaba la capacidad de algunos juegos para aumentar determinadas habilidades que pueden ser usadas en la vida real. Según publicaba The Daily Mail, Harry declaró:
«Los exámenes fueron siempre una pesadilla. No había nada como patear una pelota, jugar a la PlayStation – o volar – que por lo general, lo encontró un poco más fácil que caminar» respondió cuando le preguntaron por su preparación en Ludgrove Prep School y Eton College. “Soy una de esas personas a las que les gusta jugar a la PlayStation y Xbox todo el tiempo y me gusta pensar que gracias a esto soy muy bueno en el manejo de mis pulgares” – añadió refiriéndose a su capacidad para manejar helicópteros.
En ningún momento de la entrevista relaciona su afición a los videojuegos como una ayuda para el manejo de armas de fuego, a pesar de que sí alude haber matado enemigos en el frente.