Mordheim City of the Damned es un juego de estrategia (wargame) ambientado en el universo de Warhammer Fantasy, publicado por la empresa multinacional británica Games Workshop y que ahora ve la luz de la mano de Rogue Factor con un videojuego muy sólido que plasma perfectamente el rol más clásico.
La acción se sitúa en la ciudad de Mordheim, en el año 1999, unos 500 años antes de la cronología de Warhammer Fantasy y es en ese año cuando el Imperio se encuentra sumido en una Guerra Civil desde hace muchos años, no hay Emperador en el trono y los restos del Imperio son objeto de luchas intestinas. Ese mismo año, un cometa de dos colas (el símbolo de Sigmar, dios del Imperio) fue visto en el cielo. Los astrónomos predijeron que caería en la ciudad de Mordheim, donde se encontraba el convento de las Hermanas de Sigmar.
La caída de este cometa se interpretó como el retorno de Sigmar, durante el cual se volvería a vivir una época dorada. Se organizaron viajes a Mordheim llenando la ciudad por encima de su capacidad. La superpoblación, junto con el ambiente que se vivía en la época, hizo que la ciudad se convirtiera en un nido de adulterio, depravación y libertinaje, aumentando el estado de anarquía. Conforme se acercaba el momento del impacto del cometa, más y más gente se acercaba a Mordheim, y la situación empeoró. Los demonios empezaron a recorrer las calles como hombres, las semillas del Caos reclamaban la ciudad como suya tras haberse hecho dueños de las almas de los habitantes.
El cometa cayó en nochevieja, pero no sucedió el prometido retorno de Sigmar. El cometa impactó en la ciudad matando instantáneamente a aquellos que se encontraban cerca. Se creó el rumor que Sigmar había juzgado y eliminado a quienes había considerado indignos. Mordheim se convirtió en un lugar de miedos y paranoias. Al poco del suceso, corrió la voz de que una piedra misteriosa se había extendido por la ciudad, dicha piedra se conoció como Piedra Bruja, que tenía la reputación de poseer todo tipo de cualidades. Pronto distintas facciones empezaron a ofrecer sumas de dinero enormes por esta piedra así que muchas bandas comenzaron a llegar a Mordheim, ahora conocida como la Ciudad de los Condenados, para conseguir una fortuna vendiéndola.
El juego se desarrolla en un ambiente lúgubre muy bien adaptado donde el acabado visual es muy válido siendo lo que el juego exige sin tener demasiadas excentricidades, la música es en consonancia pero solo como acompañamiento, dejando el apartado técnico con una calidad creíble que permite una perfecta jugabilidad.
Tipos de bandas y sus acólitos.
Lo primero que tendréis que hacer en Mordheim City of the Damned es elegir una de las cuatro bandas disponibles, teniendo cada una de ellas sus propias habilidades, hechizos y criaturas.
En primer lugar están los Mercenarios Humanos venidos de la provincia de Reikland, ubicada en el corazón del imperio y famosos por su lealtad y disciplina en combate, siendo un ejército extremadamente profesional y organizado. En Reikland, una armadura robusta y una espada fiable son más valiosas que las sedas y vestiduras ornamentadas con joyas, y el príncipe Siegfried reclama el trono imperial vacante sabiendo que los guerreros de su tierra darán su vida para verle coronado. Soldados leales al acero de los mercenarios, arqueros, caballeros y guerreros expertos son algunas de las unidades que el príncipe tiene a su disposición.
En segundo lugar tendremos el clan de los Eshin llamados Skaven, asesinos sigilosos llegados de lejanas tierras donde aprendieron toda clase de pérfidos trucos para poder sobrevivir, ahora son uno de los clanes más temidos del imperio subterráneo. Se infiltran en los reinos de otras razas espiando entre las sombras para llegado el momento, emboscar a su presa y darle muerte sin honor ni piedad. Debido a su feroz velocidad y a una brutalidad impensable para los humanos, se convierten en una de las bandas más temibles y a considerar a la hora de conseguir el control de Mordheim. Sus filas están plagadas de criaturas de todos los tamaños provenientes de las entrañas de la tierra.
En tercer lugar están las Hermanas de Sigmar cuya roca se erige en medio del río Stir, en la región sur de Mordheim. Este sitio, mas una fortaleza que un convento, ha sobrevivido a la devastación del cometa sirviendo como refugio para las Hermanas de Sigmar, que debido a su milagrosa salvación han sido tildadas de brujas por su propio credo, aún cuando ellas conservan una devoción fervorosa hacia su dios. Con el objetivo de probar su valor y redimir a la orden, buscan expulsar los males que asedian Mordheim y así evitar que la corrupción de la piedra de la bruja continúe propagándose. Armadas con fe y martillo, las Hermanas están dispuestas a enfrentarse a todo aquél que las desafíe, encontrándose entre sus filas a guerreras contundentes con mucho aguante y magia basada en su dios.
En cuarto y último lugar encontraréis al Culto de los Poseídos nacidos de la desesperación y locura que quedaron tras el cometa cuando las mutaciones y la corrupción transformó a los pocos supervivientes en las garras malignas del Caos. Estos seres degenerados y mutantes se agrupan para formar el Culto de los poseídos que en su afán por ganarse el favor de los señores de las sombras, busca retornar la Piedra Bruja al Pozo y acabar con todo aquél que irrumpa en la ciudad de los condenados, que ahora es su nuevo hogar. Los inhumanos, subhumanos y no humanos se han congregado bajo la oscura acogida de la demencia.
La guarida de la Banda
En el campamento de guerra de nuestra banda podremos gestionar nuestros huestes y mejorar el grupo, comprar objetos, armas y armaduras, cumplir contratos de las facciones y coger misiones diarias. Solamente se podrá hacer una misión al día, teniendo que descansar siempre que vengamos de una aventura, también habrá que pagar a las tropas tanto los costes médicos como por el trabajo realizado, por lo que cumplir los pedidos de Piedra de Bruja, que las facciones nos piden, será de vital importancia ya que no recibiremos mucho más dinero que unas pocas monedas por misión y lo que seamos capaces de coger durante el combate de los enemigos caídos.
En Mordheim City of the Damned, la misión principal será constante y dividida en actos solo accesibles si poseemos el nivel apropiado, por lo que, para conseguirlo, habrá que ir cumpliendo pequeñas tareas hasta que alcancemos el nivel que nos permita hacer factible completar la misión y esto es muy importante, porque si un combate no se da bien y hemos sufrido muchas bajas, nuestros guerreros tardarán varios días en recuperarse y quizás se queden con secuelas permanentes, o si es un verdadero héroe consiga una mejora por ser un superviviente.
Tendremos una tienda que se refrescará semanalmente cambiando de objetos que quizás no volvamos a ver, también se podrá vender objetos que nos proporcionen unas monedas de vital importancia a lo largo de toda la aventura, así que os recomendamos coger todo lo que podáis de cada combate para venderlo posteriormente, sobre todo teniendo en cuenta que los objetos especiales caen con cuentagotas y habrá muchas armas que tus guerreros no dominarán, por lo que su mejor uso es la venta.
El apartado más importante e interesante de Mordheim City of the Damned es la gestión de la banda, donde dispondremos de un líder muy capaz y con habilidades únicas. Hasta cinco héroes, que son implacables en combate y piedra angular de las estrategias de confrontación, y hasta cinco secuaces, los insignificantes que cuando empiezan a subir de nivel se transforman en máquinas de apoyo. Dentro de cada uno de los personajes, se puede elegir el tipo de arma que utilizarán, poner armaduras y seleccionar qué habilidades desbloquear, así como enfocar los puntos de mejora.
Cada vez que subamos de nivel podemos poner un punto entre capacidad física, capacidad mental y capacidad marcial lo que permite que cada uno de nuestros guerreros pueda estar más enfocado a una estrategia en concreto. Además, podrán adquirir habilidades activas y pasivas mediante el pago de oro junto con un tiempo de aprendizaje, este apartado también conserva el corte clásico del rol donde ninguna habilidad será devastadora si no la sabes aplicar con criterio dependiendo del escenario.
Por último, en Mordheim City of the Damned tendremos la opción de enfrentar nuestras tropas vía online en el modo escaramuzas, el cual nos permitirá probar y demostrar que nuestra banda es la más temible de todo el universo Mordheim.
La muerte acecha tras cada esquina
Como ya sabéis, en Mordheim City of the Damned controlaremos una banda compuesta por un grupo de héroes y de secuaces que combaten como una unidad táctica, aprovechando el entorno en su beneficio, siendo comunes acciones como ganar posiciones elevadas, ocupar puntos clave o buscar cobertura tras elementos del terreno. Cada miembro de la banda cuenta con unos atributos, habilidades y equipamiento que le permiten llevar a cabo tareas específicas en un entorno repleto de trampas, enemigos, piedras brujas y tesoros varios.
El combate de Mordheim City of the Damned se basa en un sistema de iniciativas basadas en atributos como la agilidad, que dará un valor que se pondrá enfrentado al de todas las criaturas del juego otorgando un turno concreto para actuar, por lo que la ronda finaliza cuando la última de las criaturas ha realizado su acción. Una vez iniciado el duelo y establecidos los objetivos, cada criatura posee unos puntos de movimiento y otros de combate bien diferenciados para realizar las diferentes acciones o habilidades, así mismo el uso de los puntos de movimiento permite desplazarse, evadir, cambiar de arma, lanzar plegarias o huir por ejemplo. En lo que a los puntos de combate se refiere, estos sirven para cualquier acción que conlleve ataque, ya sea físico o mágico, pudiendo hacer distintos tipos de carga a distancia, ataques precisos o emboscadas. Todas estas acciones con puntos, ya sean de combate o de movimientos, tienen un porcentaje de éxito que determinará el porvenir de cada uno nuestros actos y es que el uso de estos valores, el conocimiento tanto del enemigo como de nuestra propia banda y una táctica clara y bien ejecutada, nos hará sobrevivir un día más como guerreros de fortuna.
Requisitos del sistema
Requisitos mínimos
- SO: Windows Vista 64bit, Window 7 64bit, Windows 8 64bit, Windows 10 64bit (32bit OS not supported).
- Procesador: AMD/INTEL Dual-Core 2.4 GHz.
- Memoria: 4096 MB de RAM.
- Gráficos: 1024 MB DirectX 9.0c compatible AMD Radeon HD 5850/NVIDIA GeForce GTX 460 or higher.
- DirectX: Versión 9.0.
- Red: Conexión de banda ancha a Internet.
- Almacenamiento: 8 GB de espacio disponible.
- Tarjeta de sonido: DirectX 9 compatible.
Requisitos recomendados
- SO: Windows Vista 64bit, Window 7 64bit, Windows 8 64bit, Windows 10 64bit (32bit OS not supported).
- Procesador: Intel Core i5-2500K @ 3.3 GHz or AMD FX-8350 @ 4.0 GHz.
- Memoria: 4096 MB de RAM.
- Gráficos: 2048 MB DirectX 9.0c compatible AMD Radeon R9 270/NVIDIA GeForce GTX 670 or higher.
- DirectX: Versión 9.0c.
- Red: Conexión de banda ancha a Internet.
- Almacenamiento: 8 GB de espacio disponible.
- Tarjeta de sonido: DirectX 9 compatible.
Conclusiones Mordheim City of the Damned
Mordheim City of the Damned es un gran juego para todo aquel que busque la esencia más pura del rol de Dungeons clásico, el combate y la subida de niveles es la esencia de este título que ofrecerá horas y horas de diversión y combate estratégico, pero si por otro lado estás más acostumbrado a diálogos intensos e historias rebuscadas con una línea argumental que os vaya conduciendo por un universo RPG, es mejor que os abstengáis.
