Project Nimbus, desarrollado por GameCrafter Team, forma parte desde el 5 de noviembre de 2014 de los privilegiados que entran en Steam Early Access para el uso y disfrute de todos los jugadores y con un descuento del treinta por ciento por lo que a día de hoy está por 10,49€ hasta el 12 de febrero. Desde hace más de dos años lo han estado perfeccionando con la ayuda del público que confío en su paso por Kickstarter.
Project Nimbus se centra en la acción en tercera persona, mediante el uso de robots humanizados mecánicos también conocidos como Mechas, donde la premisa es la acción desenfrenada de un shooter con oleadas de enemigos sobre un escenario post apocalíptico que nos permite recorrer en todas sus dimensiones. Claro es que el mundo de los mechas tiene grandes valedores, sin ir muy lejos Xbox One los tomó como bandera con Titanfall o en su momento Vanquish y que el género tiene aún mucho que ofrecer. Por ello desde Gamecrafter Team han intentado ofrecer una experiencia completa en el uso de Mechas, combinándolo con un combate aéreo que recuerda mucho al clásico Ace Combat.
En un videojuego se pueden tomar muchas variables como medida de calidad, pero lo primero y fundamental es que el juego sea sólido, esto quiere decir que permita tener una experiencia de juego que sea lo más completa posible y desde nuestro punto de vista Project Nimbus la tiene.
El juego se centra en el combate desenfrenado, sobre un escenario futurista, en el que tendremos que acabar con oleadas de enemigos de todo tipo para salvaguardar la paz y la tranquilidad, para lo cual dispondremos de un gran arsenal de armas a nuestra disposición para llevar a cabo esta tarea tan divertida.
Project Nimbus permite tanto el juego en campaña con tres niveles de dificultad, en el cual tendremos que cumplir una serie de misiones para las diferentes facciones que hay. Todo bajo un argumento futurista en el que tendremos que salvar a la humanidad a través de cuatro episodios mientras volamos y disparamos a toda clase de enemigos entre los que encontraremos auténticos titanes destructores que harán que vuestro mecha se eche el aceite encima. El modo campaña es solo el principio ya que también podemos disfrutar del modo supervivencia también con tres niveles de dificultad, que no permite un respiro en el que admirar el infinito, con batallas constantes por la supervivencia del más fuerte durante oleadas y oleadas de enemigos cada vez mejor armados.
En lo que a la jugabilidad se refiere hay que reconocerle cierto mérito al conseguir que dentro del caos que es un combate aéreo, hayan sido capaces de conseguir equilibrio en el movimiento y en sistema de combate. Como es lógico podemos movernos en cualquier dirección con la posibilidad de utilizar un turbo que se recarga con el tiempo. Para poder combatir sin que perdamos el norte, nunca mejor dicho, se ha implementado un sistema de seguimiento y auto apuntado que en un principio da pie a pensar que el juego pueda ser demasiado sencillo gracias a esta ayuda, pero con el avanzar de las misiones se hace indispensable para poder abatir a los numerosos enemigos que se encuentran en escena. A estos gadgets básicos hay que añadir que dependiendo del modelo de Mecha las posibilidades se incrementan, por ejemplo podemos ralentizar el tiempo para que la posibilidad de impacto sea mayor. Pero no todo es matar, ya que hay que evitar el ser impactado, en este sentido además del uso del turbo para evadirnos de misiles perseguidores disponemos de contramedidas o señuelos que desvíen su trayectoria y así lograr salir indemnes.
Otro de los atractivos que ofrece Project Nimbus es la variedad en el tipo de Mecha y el arsenal dando un amplio espectro de posibilidades en la estrategia a adoptar en función de las adversidades que tengamos delante. De este modo por ahora podemos contar con hasta 11 súper robots de combate aéreo diferenciables y con muchas posibilidades.
En el apartado gráfico y sonoro no se quedan atrás intentando optimizar la experiencia de combate y dejando de lado el detalle, de este modo han conseguido un grado medio de realismo con escenarios poco definidos que solo ofrecen coberturas o zonas de estrategia, todo con un toque lumínico futurista. La música centra la atención en el combate siendo electrónica y constante, teniendo un valor muy grande la inclusión de un doblaje en inglés y tailandés muy trabajado (opino del inglés que de tailandés se poco o nada).
Actualmente cuenta con varias actualizaciones que dejan la versión bastante pulida y sin fallos dolorosos a la vista, por lo que si buscáis un juego que ponga a punto vuestros reflejos y las ganas de destrozar naves a bordo de una máquina de destrucción voladora no dudéis en haceros con una copia digital que os garantice el juego definitivo el día de su estreno.
