Project Root. Análisis PS4

OPQAM, desarrolladores de Project Root, han querido darle una nueva vuelta de tuerca a los shoot´em up de corte clásico con la incorporación de elementos modernos como la libertad de movimiento, una vista isométrica que nos permite vislumbrar grandes áreas, o un apartado gráfico resultón. Desgraciadamente, los chicos de Alemania se han perdido en un desierto lleno de naves enemigas y música machacante.

¡Llamando a Tierra! ¿Alguien me escucha?

El control de nuestra nave resulta sencillo. Con el analógico derecho disparamos y con el izquierdo nos movemos a través de los enormes escenarios. Para hacer frente a las generosas oleadas de naves hostiles disponemos de balas infinitas y misiles tierra-aire que aparentemente solo sirven para atacar a adversarios terrestres. En su mayoría, los objetivos de las misiones se reducen a eliminar todo con lo que nos encontremos. Por supuesto, también hay alguna que otra variación como escoltar un vehículo amigo. Nuestros oponentes son en su mayoría aeronaves de distintos tamaños y formas, tanques, torretas y los ya clásicos jefes finales.

El principal problema radica en su supuesto “alto nivel” de dificultad, si entendemos por difícil que nos ataquen oleadas de enemigos sin ninguna posibilidad de escape y que además aparecen de forma repentina en el radar. Otras muchas veces las balas no les dañarán, y por si fuese poco, los `power-up´ escasean. ¡Y todo esto jugando en el nivel de dificultad fácil! (y no soy manco precisamente en este tipo de juegos).

Los shoot´em up destacan por su ritmo frenético, obligándonos a usar de forma eficiente nuestros reflejos y habilidades para no ser derribados a la primera de cambio. Project Root se olvida de esta regla de oro con una fuerte dosis de estrategia y táctica premeditada. ¿A qué me refiero? A tener que eliminar uno a uno a los enemigos desde la distancia y con sigilo, porque si te adentras demasiado en una zona, quizás no puedas salir de ella (aún siendo un prodigio con los analógicos).

Sin siquiera ofrecer la cantidad de adrenalina necesaria, el tedio se hace insoportable. No hay ningún tipo de progreso ni reto fijo. Solo debemos preocuparnos de avanzar sin ser eliminados, porque sino tendremos que empezar la misión desde el principio. Imaginad calcular todos vuestros movimientos, alcanzar al jefe final con una sola vida después de 30 minutos y que por un disparo repentino acabar eliminados. Y repito que esto ocurre en el nivel de dificultad fácil.

Lo menos malo

Es una pena, porque los desarrolladores tenían algo bueno entre manos. Al menos en el apartado gráfico llegan al aprobado. La vista isométrica permite contemplar grandes escenarios repletos de vegetación, edificios y sobre todo, naves. Además, cuenta con algún que otro efecto como el agua del mar o unos elementos climáticos que son muy resultones.

En el apartado sonoro aún encontramos más fallos que en el jugable ya que la música es repetitiva y desquiciante. En los 20-30 minutos que puede llegar a durar una misión, escucharemos la misma melodía cientos de veces. Lo peor de todo es que esta no supera el minuto de duración. Por otra parte, el título llega completamente en inglés y sin voces para los diálogos.

Conclusión

Project Root juega con nuestros sentimientos. Cuando lo coges por primera vez y contemplas su estética y aprendes sus mecánicas te divierte. Pasado ese punto se convierte en una de las experiencias más aburridas que podemos encontrar en PlayStation 4. Lo siento por los chicos de OPQAM. Mejor suerte para la próxima vez.

Lo mejor:

Lo peor:

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