Grandes artistas, gran juego
Es extraño que fenómenos como el visto con Shadows of the Damned pasen de nuevo en mucho tiempo, y es que tres de los más grandes dentro del mundillo han sabido realizar un juego divertido, entretenido y muy adictivo. Los que no sepáis de quien estoy hablando, sabed que me refiero a personajes tan célebres como Goichi Suda, Shinji Mikami y Akira Yamaoka.
Si recordáis otras sagas como Resident Evil o Silent Hill, o simplemente el último Devil May Cry 4, sabréis de qué clase de maestros os estoy hablando. Shadows of the Damned ha sabido cautivar perfectamente a todos sus compradores, y todo ello gracias a una sencilla razón: estamos ante las puertas de una nueva IP que mezcla perfectamente tres grandes sagas de los videojuegos como son las anteriormente nombradas.
García Hotspur será nuestro compañero durante toda esta demoníaca aventura, un mexicano de lengua «sucia» cuyos comentarios hará que nos tronchemos de risa; sin olvidarnos por supuesto de su fiel acompañante Jhonson… una pequeña calavera ex-demonio que nos acompañará durante todo el trayecto.
Gráficos
En un primer momento pensé que me encontraba jugando a otro título de la franquicia «Biohazard», sin embargo, muchas cosas han mejorado desde la salida de tan espectacular juego. Desarrollado íntegramente con el motor Unreal Engine 3 (si no me equivoco), el juego puede presumir de lucir de una manera escandalosamente asombrosa, jugando un papel fundamental los efectos tales como las luces y sombras.
El diseño de los niveles recuerda mucho a escenarios de Devil May Cry (ya he dicho que bebe mucho de las 3 sagas), sacando a flote una enorme ciudad medieval ampliamente detalla en todos sus aspectos. La calidad de texturas en estos escenarios llega a alcanzar el punto máximo de trabajo con el motor, observándose a cada paso, ricos detalles en cada esquina.
El elenco de enemigos no es abrumadoramente extenso, pues se limita básicamente a enemigos finales y una pequeña lista de demonios que van sufriendo metamorfosis a lo largo de la aventura, y cuya dificultad va aumentando debido a numerosas «armaduras óseas». Su texturizado vuelve a sorprender por su acabado y sus detalles finales, sobre todo el de nuestro protagonista, en el que podemos observar grandes cicatrices y numerosos tatuajes que brillan por su calidad y acabado. En cuanto a las armas que podemos conseguir, éstas se basan en 3 armas básicas que irán cambiando de forma a lo largo de todo el trayecto, alcanzando también un buen nivel de detalle.
En resumidas cuentas, Shadows of the Damned es una maravilla gráfica que sabe mezclar perfectamente las características de las tres sagas de las que hereda, y que mejora notablemente muchos aspectos de estas.
Música y FX
Akira Yamaoka es (y será), uno de los grandes compositores japoneses dentro del mundo de los videojuegos, y de nuevo lo hace notar en este nuevo título en el que ha trabajado como compositor y técnico jefe de sonido.
Una de las primeras cosas que nos harán recordar la franquicia Silent Hill es sin duda cuando entramos en el menú o cuando captamos ciertos objetos, pues los sonidos incluidos para estas acciones son exactamente los mismos que los oídos en la saga de Konami (el sonido de coger los objetos es idéntico al de la franquicia). Claramente podemos destacar una banda sonora realmente brillante y que parece haber nacido para compaginar al título.
Yamaoka ha vuelto a jugar de nuevo con canciones oscuras y «paranoicas» para inundar algunos escenarios y eventos que ocurren en la trama, pero también vuelve a demostrar que es el mejor creando canciones bellas y armoniosas (sobre todo con mucha guitarra), que saben entremezclarse sin problema (invito a escuchar Promise o Theme of Laura). Poco más se puede decir sobre este gran compositor japonés que no se haya dicho ya: una banda sonora de Akira Yamaoka es simplemente como un diamante tallado.
Un punto en contra y que siempre criticaremos en los juegos japoneses, es que siguen sin doblarse a nuestro idioma, algo que llega ya a convertirse en un punto imperdonable para las compañías. A pesar de ello, los diálogos de nuestro protagonista con su compañero Jhonson nos harán reír en numerosas ocasiones, pues escucharemos frases durante el juego que no tienen ningún desperdicio (muchas de ellas bromas sexuales y grotescas).
Jugabilidad
Shadows of the Damned hereda completamente su jugabilidad de Resident Evil 4 y Resident Evil 5: un shooter puro en tercera persona. El juego de cámaras y movimientos bebe claramente de esta franquicia, pues a excepción de poder esquivar ataques rodando por el suelo, nuestro protagonista podrá golpear a sus enemigos resultando ser bastante habilidoso en todas sus facetas (como Chris Redfield). También podremos disparar a barriles o cajas de madura para conseguir objetos, algo que también recuerda mucho a RE5. Durante toda nuestra aventura nos acompañará Jhonson, que se convertirá, a modo de Transformer, en numerosos objetos como en una antorcha, una moto o nuestras propias armas.
Otra característica que se drena de Devil May Cry es sin duda la utilización de gemas, que dependiendo de su color nos ofertará unas mejoras y otras. Al matar a los enemigos normales, éstos soltarán unas gemas de color blanco que podremos utilizar para comprar objetos como munición, bebidas… u otro tipo de gemas de color rojo, que utilizaremos para aumentar las características de las armas. Por último, tendremos las gemas de color azul, gemas que solo nos darán los enemigos finales al morir y cuya única finalidad es la de aumentar nuestro elenco de armas (una nueva gema, un nuevo arma), mediante su incrustación en el cráneo de Jhonson, ya que será él el que se metamorfosee en nuestras armas.
Las armas que podremos tener en el juego son tres, ni más ni menos: una pistola, una escopeta y una metralleta. Los parámetros de estas armas podrán ir mejorándose con las susodichas gemas rojas, además de que irán cambiando de forma, ataque y potencia gracias a los cambios sufridos por las gemas azules. También tendremos otro submenú con tres tipos de bebidas que nos recuperarán más o menos cantidad de vida dependiendo de su potencia.
Modos de juego y Online
La campaña de Shadows of the Damned es sencilla y muy adictiva, pues tendremos que ir sobrepasando una serie de capítulos (también como en RE5) mientras vamos enfrentándonos a numerosos enemigos y jefes finales. Como en otros juegos actuales, los escenarios no brillan por su amplitud ni su libertad, pues el juego peca de ser demasiado lineal.
En cuanto a su duración, ésta ronda las 8 o 9 horas de juego, algo realmente negativo en los tiempos que vivimos. Si el juego te engancha y vas avanzando y avanzando… puedes pasártelo sin problema en dos tardes casi sin darte cuenta, haciendo que esta experiencia tan divertida pase como un suspiro casi sin olerla. Si a esto le añadimos la poca rejugabilidad del título, pues nos encontramos con un enorme lastre para este título.
La historia, como hemos comentado antes, se divide en capítulos. Dependiendo del capítulo tendremos que avanzar y resolver puzles por la demoniaca ciudad, derrotar enemigos… o jugar una especie de juego de naves con scroll lateral, en la que nuestro personaje surca los cielos mientras mata a decenas de demonios… aunque no llego a entender mucho el porqué de estos tres capítulos.
Conclusión
Este juego es sin duda uno de los que no puede faltar en nuestra estantería, ya que aparte de ser creado por dos de los grandes del mundillo, la banda sonora ha sido creada por uno de los grandes compositores nipón de la época. Shadows of the Damned es un juego adictivo, intenso, divertido y de mucha calidad en sus apartado gráfico y sonoro… aunque su corta duración y su linealidad pueden llegar a convertir su experiencia en algo menos espectacular de lo que realmente es.
LO MEJOR
– Acabado técnico sobresaliente
– Acción intensa durante toda la aventura
– El diseño de personajes y enemigos es simplemente perfecto
– Escenarios oscuros y bien detallados
– Historia algo distinta a lo visto
– Diálogos variados y muy divertidos
– Banda sonora de un maestro
LO PEOR
– Hereda de tres sagas existentes, por lo que a pesar de ser novedoso, algunas cosas ya se han visto
– Modo campaña corto y con poca rejugabilidad
– Pocas armas, aunque estas van cambiando
– No está doblado al español