El genero del survival horror tuvo una edad de oro a finales de los 90 y principios de los 2000. Durante estos años, se hicieron popular grandes sagas como Silent Hill o Alone in the Dark. Pero si hay una franquicia que llevo el genero al gran público es Resident Evil, que llevaba al jugador a recorrer distintos lugares repletos de zombies. Shinji Mikami fue el creador de esta nueva saga de Capcom. Tras abandonar la compañía, y con pasos por otros estudios como Clover Studio o su sucesor Platinum Games, fundó Tango Gameworks con la idea de traer de vuelta el genero survival horror que llevaba años sin grandes producciones. Allá por 2014, de este proyecto nació The Evil Within, un título que nos ponía en la piel del policía Sebastian Castellanos para investigar en un hospital psiquiátrico con horripilantes consecuencias. Ahora, aunque Mikami deja la labor de la dirección a John Johanas, Bethesda y Tango Software vuelven a la carga con la saga en The Evil Within 2, una secuela directa del título. Sebastian Castellanos vuelve a protagonizar una aventura de terror con el mismo estilo pero con nuevas mecánicas y mejoras gráficas.
Vuelta a la Pesadilla
El mismo protagonista vuelve a ser el centro de la historia. Ahora, ya como ex policía, vive entre el abatimiento y el alcohol por la perdida de su hija. Pero, al comienzo, Juli «Kid» Kidman, la ex compañera de Sebastian Castellanos, volverá a aparecer para ofrecerle una posibilidad de redención. A diferencia de lo que pensaba, su hija no habría muerte en el trágico incendio de su casa, pero para salvarla tendrá que volver a entrar en STEM. Esta vez Castellanos tendrá que recorrer las calles de Union, la que fuera una idílica urbanización. A pesar de no tratarse de Beacon, en Union nos esperan los mismos horrores, monstruos y desesperación, que tendrá que superar si quiere volver ver a su hija sana y salva.
La trama en The Evil Within 2 es mucho más llevadera que en la primera entrega, llevándonos por una historia convencional. Con sus giros de guión y sorpresas pero de estilo bastante lineal y, a diferencia de los visto en The Evil Within, sabemos que está ocurriendo en todo momento.
En The Evil Within 2 volvemos a un survival horror en tercera persona, donde tendremos que acompañar a Castellanos durante su misión en Union, intentando sobrevivir de las criaturas que le salen al paso. En cuanto a la jugabilidad, el título no ofrece ninguna revolución. Se siguen las mismas mecánicas que en la primera entrega, pero actualizadas y mejoradas en muchos casos.
El principal cambio que encontramos en la ruptura de la linealidad. En este título, tendremos mucha más libertad a la hora de explorar distintos entornos abiertos. Union nos permitirá recorrer sus calles libremente, donde nos enfrentaremos a zombies y conseguiremos suministros y coleccionables. Pero una vez que sigamos con la trama, a partir de determinados momentos, la jugabilidad volverá al plano lineal para evitar romper el ritmo de la trama. A pesar de que en un primer momento pueda parecer algo innecesario estos tramos abiertos, la experiencia se mejora a medida que avanzamos y nos permite buscar un poco de «relax» tras los intensos tramos de la historia.
En cuanto el combate, se mantiene el estilo de la anterior entrega. Sebastian Castellanos irá mejor armado que en su paso por Beacon, ya que podremos conseguir hasta cuatro tipos de armas diferentes, pistola, escopeta, rifle de francotirador y ballesta. Aunque en The Evil Within 2 encontramos con enemigos duros y escasa munición, por lo que conseguir acabar con nuestros enemigos con estas armas no será tarea fácil. Por eso, una de las claves de su jugabilidad es el apartado del sigilo. Usando distintos escondites y caminar agazapado será uno de los métodos principales a la hora de acabar con los distintos monstruos que nos iremos encontrando.
En cuanto al combate, uno de los principales problemas del título en este aspecto es la IA enemiga. En general es bastante mejorable, lo que provoca que en muchas ocasiones, con un poco de astucia, podremos acabar con nuestros horripilantes enemigos sin demasiados problemas, sobre todo en las dificultades más bajas.
Como otra de las novedades principales del título es la incorporación de nuevos elementos roleros. Tendremos la posibilidad de mejorar las características del personaje y las armas. Por un lado, acabando con los distintos tipos de enemigos se nos obsequiará con Gel Verde, que nos permitirá mejorar las habilidades de Castellanos. Podremos desarrollar desde la salud, la resistencia o el sigilo, y aunque estas mejoras necesitan mucho Gel verde, acaban siendo de verdadera utilidad. Por el otro lado, también podremos mejorar las distintas armas que vamos consiguiendo. A medida que vamos consiguiendo piezas de armas, podremos mejorarlas incorporando más potencia, precisión o capacidad de cargador.
Para este aspecto, será clave las distintas misiones secundarias que nos irán encomendando los personajes que nos encontramos. Durante nuestros «paseos» por Union podremos realizar estas tareas secundarias, que nos permitirán conseguir recursos y armas. Estas tareas no tienen casi ninguna importancia en la trama y únicamente las haremos para conseguir mejoras para las armas y para recolectar gel verde con el que mejorar las características de Sebastian.
Un horror que entra por los ojos
El primer The Evil Within fue un título intergeneracional y eso, seguramente lastró su apartado técnico, que sin estar mal, en algunos aspectos se le veían las costuras. Pero esto cambia en The Evil Within 2, gracias en parte al nuevo motor STEM Engine. En esta secuela podemos ver importantes avances en modelados de personajes y escenarios o las animaciones faciales. Pero, el título no solo destaca por su apartado técnico, si no que también cuenta con un distinguido diseño artístico. Los paisajes que nos encontraremos durante nuestra misión darán una perfecta ambientación de terror, apoyados por los grandes efectos de iluminación con los que cuenta esta nueva entrega.
A pesar de esto, el título tampoco es perfecto, también nos hemos encontrado con algún pequeño fallo, aunque no estropea la experiencia. Los excesivos tiempos de carga cuando llegamos a zonas nuevas y algo de popping son algunos de los errores que se pueden apreciar durante la partida. Además, el título se mueve a 30 fps en consola, aunque no es lo deseable, es tan frecuente que hasta ya lo tenemos más que asumido.
En cuanto el apartado sonoro, el título también ofrece un gran trabajo en este aspecto. La banda sonora favorece esta ambientación de terror que busca el título, creando una atmósfera perfecta para llevarnos algún susto. Y no solo es la música, el título también cuenta con unos efectos de sonido muy bien elaborados que ayudan en esta tarea, sobre todo cuando nos llegan sonidos inesperados a través del altavoz del mando de PS4. Gracias a esto consiguen mantenernos en constante tensión hasta en momentos donde no ocurre nada. El título además cuenta con un gran doblaje, con voces en castellano, cuya traducción y interpretación está a un buen nivel. El título, como es lógico en una gran producción como esta, llega perfectamente localizado al español.
Conclusión de The Evil Within 2
Con la primera entrega de la saga, se dio visibilidad a un genero que llevaba casi desaparecido una década y cuyos únicos lanzamiento estaban en la escena independiente. A pesar de esto, el título era bastante mejorable y contentó a medias a aquellos que lo esperaban con ganas. Esto se resuelve con The Evil Within 2, donde nos encontramos con lo que toda secuela debería ser. Un título que sin pretender una revolución mejora en casi todos los aspectos lo visto en la primera entrega. Una trama interesante, unas mecánicas jugables bien elaboradas y un apartado técnico que apoyo totalmente la ambientación hacen del título una propuesta que cualquier seguidor del terror y el survival horror tenga que pasar. Cualquier fan del genero debería acompañar a Castellanos en su terrorífica misión.
