Sony PlayStation sigue apostando por las PSVR, sus gafas de realidad virtual que poco a poco va creando su librería de juegos que hacen que su compra sea menos arriesgada de lo que podía parecer en un momento. Estamos ante un dispositivo que puede parecer una gran inversión, pero la compañía nos está demostrando con cada lanzamiento que confía en él y que no va a defraudar. The Inpatient es otro de los títulos que puede ser una buena muestra de ello, un juego que ya tras su tráiler en el pasado E3 2017 nos dejó muy buen sabor de boca y estábamos deseando probar.
Con The Inpatient tendremos una historia compleja, muchas decisiones, dudas, terror… todo lo necesario para pasar una interesante velada. Veamos por qué.
Buscando un sentido
El jugador se mete de cabeza en la historia sin saber nada de lo que está ocurriendo. Nuestro personaje no recuerda nada, por lo que debemos ir avanzando a base de preguntas para recuperar nuestra memoria y saber que es lo que nos ha ocurrido.
Los creadores de Until Dawn nos llevan de nuevo al Sanatorio de Blackwood, en los años 50, para que podamos descubrir las verdades de este sitio. Junto a estas, debemos intentar quedar tranquilos para ir averiguando qué nos ha traído hasta aquí y qué es lo que nos está sucediendo. Lo mejor será buscar la mayor cantidad de información posible tanto de las personas con las que nos vamos cruzando como de cosas que podemos percibir.
En el lugar en el transcurre la historia veremos que esconde muchos secretos y horrores con los que nos debemos topar para solucionar este rompecabezas antes de que sea demasiado tarde. El único problema que vamos a tener, gracias a los buenos gráficos, es la superación constante del miedo y la tensión que nos va a sorprender con cosas fuera de lo esperado. No obstante, habrá que prestar mucha atención para sobrevivir a este hotel infernal y conseguir salir de allí con vida manteniendo la cordura que nos quede.
Una forma diferente de jugar
Este juego se basa en un estilo cambiante donde cada decisión que se tome influye en la historia, dejándonos abiertas muchas posibilidades y combinaciones de cambiar el final. A veces se pueden ver mariposas al decidir algo, lo que significa que la historia ha dado un giro importante en ese mismo instante. Pero antes se debe pasar por una etapa inicial donde el personaje aprende a andar, a reconocer donde está y empezar a notar que todo lo que ocurre tiene un motivo mas tenebroso de lo que parecía.
Los movimientos son un tanto arbitrarios pero se consiguen aprender bastante rápido. Las manos y los objetos se controlan con el giroscopio del mando, acercándolo como si fuera nuestra propia mano. Esto, en algún momento, llega a ser un poco incómodo y estamos seguros que jugar este título con los mandos «Move» sería más sencillo. Para mirar alrededor llega con girar la cabeza, pero el movimiento del personaje sigue siendo con los dos joysticks del mando tanto para el movimiento como para la cámara. Pero por esos controles, el juego no va del todo fluido, impidiendo muchas veces que nos podamos mover por el mapa con facilidad, llegando hasta el extremo de tener que mirarnos los pies para saber hacia dónde está mirando el personaje para continuar.
Conservando el estilo del estudio, también tendremos distintos finales, ya que dependiendo de nuestras elecciones, al igual que pasaba en Until Dawn, unos personajes sobrevivirán o morirán, lo que nos abre muchos caminos a descubrir, lo que se traduce en rejugabilidad.
Aprovechando las nuevas funciones
Normalmente los juegos de miedo se basan en mostrar muy buenos gráficos que junto a momentos de máxima tensión y sonidos aterradores nos intentan meter el miedo en el cuerpo. Sin embargo, en The Inpatient, nos demuestran que los gráficos no tienen que ser perfectos. Con crear un ambiente de confusión y sucesos desagradables llega para asustarnos por todo. Esto también se aprecia en el audio ya que es muy inmersivo y direccionado según hacia donde estemos mirando, lo que da una sensación envolvente muy realista. Cuenta con unos ruidos, sonidos y melodías que nos meten de lleno en la acción para que parezca lo más real posible, lo que cumple con los estándares del género. Dependiendo de la parte del juego, se pueden escuchar cosas a medida que se gira la cabeza dejando una sensación muy buena.
Cabe mencionar que todo The Inpatient está doblado completamente al español tanto los textos como las voces, lo cual nos parece un gran acierto. Lo curioso de esta entrega es su control por voz que casi nos vemos obligados a usar, ya que prescinde de tutorial y nos mete de lleno en la acción. Esta función se hace efectiva cuando tenemos que tomar las primeras decisiones. Simplemente escogiendo una de las dos opciones de respuesta que nos ofrecen y con leerla en voz alta se confirmará y avanzará el juego. Siempre podemos desactivar esta opción y escoger la respuesta con la mirada y pulsando X. Entre la realidad virtual muy lograda, los sonidos espeluznantes en 3D y el hecho de poder hablar para tomar decisiones tenemos una sensación de miedo… casi demasiado real.
Conclusión de The Inpatient
Como resumen, a los amantes del terror y la saga de Until Dawn les va a encantar este título. La esencia del juego la encontramos en su faceta de terror, basándose en dar miedo y ser una historia fácil de jugar, pero difícil de desarrollar debido a su confusión. Ambas cosas se cumplen pese a tener algún punto bastante débil como los controles, que no acaban de convencernos. El hecho de que el giro de la cabeza no sea el giro del personaje confunde demasiado. No resulta cómodo moverse hasta muy adelante donde, por las buenas o por las malas, hay que acostumbrarse a esto para poder jugar.
The Inpatient es un juego que puede ser algo corto ya que si no disfrutamos de su atmósfera e historia nos durará poco más de 4 horas, pero que se alargará hasta 6-7 si nos metemos de lleno y exploramos.
De todas formas, el juego cumple muy bien su prometido: dar miedo.
