Como todos sabemos, hoy en día el mundo del videojuego está mezclado en casi todos los sectores que podamos imaginar, a veces la cosa sale bien y a veces la cosa no sale tan bien como cabría esperar, pero el caso, es que nuestro mundillo siempre está actualizándose en todos los sectores.
A pesar de que estamos acostumbrados a ver videojuegos que se lanzan a la gran pantalla o viceversa (esto es a lo que nos referimos cuando a veces la cosa no sale tan bien como cabría esperar), esta no es la única faceta que tienen los videojuegos fuera de su sector principal.
Hace poco, vimos como médicos utilizan videojuegos para combatir enfermedades y facilitar la vida a los enfermos gracias a la juegoterapia (un aplauso para Sony por este tipo de actos). También hemos visto a los videojuegos metidos en medio de todo tipo de acontecimientos deportivos, desde lo más importantes como son el Mundial de futbol o la liga de baloncesto estadounidense (NBA), hasta los deportes menos practicados como pueden ser tiro al plato, dardos o incluso bolos. Incluso llegaría a decir, que no existe un deporte que no haya tenido su versión virtual en algún momento de la historia del mundo de los videojuegos.
Si ya nos vamos al campo más profesional de la palabra, encontramos videojuegos que ayudan a gente de primer nivel en sus trabajos, hablamos por ejemplo de los simuladores virtuales que utilizan en la F1, simuladores de combate que usan los ejércitos para entrenar sin poner en peligro ninguna vida humana y tampoco la naturaleza, o por ejemplo, los ya conocidos tremendos simuladores de vuelo. Estas obras de arte, no están al alcance de nosotros, pero no por ello dejan de ser videojuegos.
Si nos ponemos a pensarlo, hoy en día hay muy pocas cosas que no la encontremos simulada en un videojuego, de mejor o de peor manera, por supuesto, pero es raro no encontrar ese «algo» disponible para nuestras consolas. Aunque pensándolo mejor, hay algo que creo que si que no existe, un juego de políticos, aunque si lo pensamos mejor aun, este juego no tendría muchas ventas, al menos en nuestro país.