Mortal Kombat 11: Aftermath. Análisis de la expansión de los fatalities

Warner Bros continúa ampliando el universo de Mortal Kombat 11 con el lanzamiento de Aftermath, su nueva expansión. Este DLC nos trae 3 nuevos personajes y nos amplía el Modo Historia con nuevos actos, alianzas que jamás nos imaginamos y viajes en el tiempo. Junto a esta publicación, el estudio también ha publicado una serie de contenidos gratuitos.

La obra de NetherRealm Studios se estrenó durante el pasado 23 de abril de 2019 cosechando un gran éxito entre el público, actualmente disponible para todas las plataformas. Un año después, Warner Bros nos sorprende con Aftermath. Expansión que podemos conseguir de tres maneras diferentes: El contenido independiente por 39,99€; el Lote Mortal Kombat 11: Aftermath + Kombat Pack por 49,99€; y Mortal Kombat 11: Aftermath Kollection por 59,99€. Sin duda, este último es el más completo y el más asequible siempre y cuando no se cuente con el juego base.

Contenido gratuito de lanzamiento

El estreno de Mortal Kombat 11: Aftermath nos deja con varios añadidos al juego base. Aunque el análisis trate sobre la parte de pago, Aftermath, también voy a comentar un poco lo que NetherRealm Studios ha añadido al título de forma totalmente gratis. Ahora mismo tenemos disponibles, para todos los jugadores, los aclamados Friendships, Fatalities de escenario y nuevos escenarios que los más veteranos reconocerán fácilmente. Sumando al juego base un total de 4 entornos como la Fortaleza de Kronika, Cámara de Almas, el Pozo de la Muerte y Arcade Retro. Este último el más original de todos porque lleva la lucha a un escenario recreativo proyectando escenarios clásicos de la saga pixelados.

Mortal Kombat 11: Aftermath

Por su parte, los Friendships son movimientos especiales con los que podemos acabar con nuestro adversario de manera divertida. Con ellos dejamos a un lado la sangre y la brutalidad, para terminar con el combate mostrando el lado más tierno y nunca visto de cada uno de los personajes. Además de hacer algunos pequeños ajustes más a la jugabilidad, el lanzamiento de Aftermath también incluye gratuitamente el añadido de los movimientos Breakaway. Un nuevo sistema que nos permite romper por completo la cadena aérea del enemigo acosta de nuestra barra de defensa. Cometiendo un giro aéreo que nos añade armadura temporal reseteando el daño.

La lucha por la Corona

Ahora toca hablar de lo que interesa, el contenido que nos ofrece Aftermath. Como es de esperar, la expansión se sitúa justo después de los acontecimientos vividos durante el modo campaña principal de Mortal Kombat 11. Mostrándonos el ascenso de Liu Kang a Dios del Fuego y el Trueno después de derrotar a la titán Kronika. Cuyo objetivo es manipular el Reloj del Tiempo para restablecer la historia. Sin embargo, la deidad se ve obligada a parar ya que el reloj está empezando a romperse. Manipular su poder sin la ayuda de la Corona pone en riesgo la integridad del artefacto.

Para sorpresa de todos, la derrota de Kronika desencadena la aparición de tres luchadores desaparecidos y exiliados durante la trama original. Trayendo así el regreso del guardián de los Matoka Nightwolf, el Dios del Viento Fujin y el hechicero Shang Tsung. Este último es el que propone recuperar la Corona viajando en el tiempo para llevarla ante Liu Kang. Como era de esperar, ninguno de los presentes se fían del hechicero, por lo que tanto Fujin como Nightwolf emprenden viaje junto a él como respaldo y para evitar una posible traición.

Desde este momento arranca nuestra aventura por la historia original, pero con bastantes cambios. Lo que empieza siendo un viaje del tipo: «no toques nada para no modificar la línea temporal»; acaba convirtiéndose en todo lo contrario. Sin caer en spoiler para no estropear la experiencia a nadie, diré que la trama arranca de una manera fantástica dejándonos situaciones realmente impresionantes dentro de la franquicia. Ofreciéndonos momentos paralelos rescatando una gran cantidad de luchadores ausentes o que contaron con un papel poco importante durante la misma.

Un claro ejemplo de ello es el protagonismo de Shang Tsung, que poco a poco va cogiendo fuerza conforme avanza la trama. Mostrándonos a uno de los personajes más carismáticos de este Mortal Kombat 11 sin lugar a dudas, cayendo todo el peso argumentativo sobre el mismo. Sobre todo más aún cuando el actor Cary-Hiroyuki Tagawa ha participado en el proyecto para darle voz al hechicero. Cabe recordar que Tagawa fue quien interpretó a este luchador en la película de 1995.

Aunque también podemos ver la aparición de otros personajes de gran nivel como la recién incorporada Sheeva, que nos deja con una serie de combates de muy alto nivel demostrando que la luz del foco principal le sienta de maravilla. O el propio Fujin y Nightwolf, dos luchadores muy importantes para el propio desarrollo de la trama. En Aftermath prácticamente todo el elenco del Kombat Pack 1 está presente (como los últimos añadidos junto la expansión: Fujin y Sheeva, a excepción de Robocop) para rascar sus minutos de gloria. Y sinceramente, lo hacen francamente bien.

A medida que avanza el episodio Aftermath la trama se impregna cada vez más de la esencia de la franquicia. Adentrándonos en combates épicos en donde en algunos se nos da hasta la opción de escoger luchador. Momentos que avivan nuestro hype por continuar jugando y que nos deja elecciones sorprendentes que, como es de entender, no desvelaré.

De esta manera la expansión sigue con la tradicional estructura, dejándonos con un total de 5 capítulos que a su vez se dividen en 5 o 6 actos según el mismo. Mientras que, a su vez, el desarrollo de la trama empieza a alcanzar su momento álgido para acabar por todo lo alto con un brutal desenlace. Pero como es costumbre en la serie, para llegar a ese justo momento antes debemos pasar por innumerables enfrentamientos y abundantes cinemáticas llenas de vísceras y sangre. Sin necesidad de renunciar en ningún momento a lo que hace grande a Mortal Kombat: su fatalidad.

Donde NetherRealm Studios sigue demostrando su mano magistral a la hora de enlazar los momentos de película con los de lucha real con una mezcla entre ambos mundos perfecta. La transición al modo combate sigue siendo una delicia para todos aquellos que disfrutamos del espectáculo audiovisual. Gozando de un motor gráfico que sigue sorprendiendo y demostrando que puede hacer cosas realmente impactantes en el campo visual y sobre todo, estético en los personajes. Haciendo uso de un nivel cinematográfico la mar de potente con planos, expresiones e interpretaciones que, para nada, deben tener envidia de las proyecciones americanas de cine.

Conclusión Mortal Kombat 11: Aftermath

Mortal Kombat 11 es uno de los mejores títulos del género de lucha con diferencia. Después de un brillante juego base, NetherRealm Studios regresa con Aftermath para volverse a coronar como la mejor experiencia del mercado. Esta expansión nos añade tres nuevos personajes, dos de ellos importantes para la historia con un gran protagonismo, y a Robocop, un luchador invitado que hará las delicias de cualquiera.

El lanzamiento de Mortal Kombat 11: Aftermath cumple perfectamente con su cometido. Ofrece un modo historia adicional impecable y sorprendente por partes iguales, con grandes giros de guión (aunque predecible), el regreso de luchadores icónicos y otros que toman más protagonismo de la trama principal. Una experiencia que puede ser completa perfectamente en un día, pero que demuestra tener un gran nivel de desarrollo que para nada debe envidiar al juego base. Más bien, sería al contrario. Un complemento más que obligatorio para los amantes de Mortal Kombat 11, pero cuenta con un inconveniente: su alto precio si ya contamos con una copia del título. En tu decisión se encuentra la verdad.

Política sobre notas en Game It
Versión analizada: PS4.

Nota: 7,5

Lo mejor:

  • Un modo historia impactante y explosivo.
  • Gráficamente sigue siendo muy poderoso.
  • Nuevos escenarios, personajes y cosméticos.
  • La participación de Peter Weller en el papel de RoboCop y Cary-Hiroyuki Tagawa como Shang Tsung.

Lo peor:

  • Su alto precio para lo que realmente ofrece.
  • Fácilmente se puede completar en un día.
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